En medio de una situación inflacionaria que se agravó con la guerra en Ucrania, la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, lanzó un nutrido paquete de medidas que incluyó poner un techo al precio de los pasajes aéreos y eso unió a distintas aerolíneas de países europeos que pidieron una marcha atrás de la medida. Además pidieron que la Comisión Europea investigue si la medida de la ultraderechista podría provocar un "efecto dominó".
"Que la Comisión Europea pueda aclarar con Italia si esta intervención tiene un impacto en el mercado de transporte aéreo libre y desregulado en Europa", afirma el documento firmado por compañías de transporte aéreo agrupadas en la alianza Airlines for Europe. La semana pasada, como parte de medidas para hacer frente a la inflación, Italia anunció una serie de precios máximos a los pasajes aéreos de cabotaje, en especial desde la península hacia las islas de Sicilia y Lampedusa.
El Gobierno italiano dice que lo hizo tras detectar que las compañías daban precios al alza en base a perfiles de los clientes basados en el tipo de dispositivo desde que se hacían las búsquedas o en base a la demanda del momento, como las aplicaciones de pasajeros. Para las compañías, según una carta dada a conocer por los diarios Repubblica y Corriere, limitar las tarifas "violaría" los derechos de las empresas "a competir donde sea posible, fijar precios y definir servicios como mejor les parezca".
Para la organización de empresas, que uno de los países de la UE tenga éxito en fijar precios máximos podría "constituir un precedente que lleve a un efecto dominó".
En particular, Meloni dispuso que los pasajes aéreos tengan un precio máximo del 200% de la tarifa media anual, al tiempo que considera "una práctica comercial no correcta" el uso de algoritmos para "perfilar" a los clientes en base a los dispositivos que usan y a la demanda.
Con información de Télam