Bielorrusia dijo que el jefe del grupo Wagner, Yevgueni Prigozhin, podría estar en Rusia y que sus combatientes siguen en Ucrania. Según el mandatario bielorruso, el líder de la organización paramilitar no está en su país, sino que habría regresado a Rusia a sólo dos semanas de haberse rebelado contra la cúpula militar del presidente Vladimir Putin por sus diferencias en la marcha de la guerra en territorio ucraniano. La revuelta del mes pasado, el mayor desafío en años a Moscú, terminó en menos de 24 horas gracias a una acuerdo mediado por el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, que incluía el exilio de Prigozhin en ese país vecino.
"En cuanto a Prigozhin, está en San Petersburgo. ¿Dónde está esta mañana? Puede haber partido a Moscú, o a otro lado, pero no está en territorio bielorruso", declaró el mandatario bielorruso en una conferncia de prensa con medios extranjeros en la ciudad de Minsk. Según él, los combatientes de Wagner también están "en sus campamentos permanentes" en Ucrania y no en Bielorrusia, "por el momento". Poco después, el vocero de Putin aseguró en Moscú que Rusia no seguía los "movimientos" del jefe de mercenarios.
La noticia de la presencia de Prigozhin en Rusia coincide con fuertes combates en el este y sur de Ucrania al ritmo de una contraofensiva lanzada por el Ejército ucraniano para intentar recuperar territorios ocupados por las fuerzas rusas. El país prosiguió con sus ataques a distancia por detrás de las líneas de los frentes sur y este, lanzando misiles y drones explosivos hacia varias ciudades cercanas a las zonas de combate pero también a otras mucho más lejanas, como la norteña Kiev. De hecho, según informaron autoridades locales en este jueves, misiles rusos mataron a cinco personas e hirieron a otras 37 en la ciudad de Lviv, en el oeste de Ucrania, cerca de Polonia.
Lukashenko, además, dijo que Prigozhin no estaba detenido en Rusia y que ayer había hablado con él por teléfono, también informó que la cuestión de la "reubicación" de Wagner en Bielorrusia aún no estaba resuelta. Según el acuerdo alcanzado con el Kremlin con la mediación de Lukashenko, que puso fin a la rebelión del 24 de junio, Prigozhin debía exiliarse en Bielorrusia, un país aliado y vecino de Rusia. Putin, por su parte, sin nombrarlo, lo había catalogado como "traidor", y dio a los combatientes de Wagner la opción de unirse al Ejército regular, irse a Bielorrusia o regresar a la vida civil.
En medio de la rebelión de ese fin de semana, Lukashenko anunció que Prigozhin había llegado a su país y afirmó que él mismo había convencido a Putin de que "no lo matara". "Sé con certeza que está en libertad", dijo hoy Lukashenko, y agregó que Prigozhin le dijo ayer por teléfono que continuaría "trabajando para Rusia".
El grupo Wagner ha tenido una destacada actuación en la invasión rusa de Ucrania, anotándose victorias importantes como la toma de la ciudad oriental ucraniana de Bajmut, en mayo, al cabo de la batalla más intensa de la guerra iniciada en febrero de 2022. En pleno conflicto, Prigozhin insultó varias veces al ministro de Defensa y al jefe de las Fuerzas Armadas rusas, a quienes acusaba de mal manejo de las operaciones militares y de ser responsables de la muerte de cientos de combatientes rusos. El día que se rebeló, acusó al ministro Serguei Shoigu y el jefe militar Valeri Guerasimov de haber ordenado un bombardeo a un campamento de Wagner en Ucrania que mató a 30 de sus combatientes.
De inmediato tomó a sus hombres y los dirigió a Rusia, donde se hicieron con el control de un cuartel militar en una ciudad del sur. Desde allí iniciaron una marcha hacia Moscú, derribando helicópteros militares y un avión ruso que intentaron detenerlos. El repentino anuncio de Lukashenko del acuerdo para su exilio puso fin a la insurrección, que había obligado al Ejército a desplegar tanques y soldados en Moscú.
Tras su motín, el jefe de mercenarios aseguró que no había querido tomar el poder sino proteger a Wagner del riesgo de ser desmantelado por el Estado Mayor ruso. No quedó claro, a partir de las declaraciones de Lukashenko, qué rol están jugando los combatientes de Wagner que permanecen en Ucrania, en medio de la contraofensiva ucraniana. Casi un mes después de su inicio, el Estado Mayor de Ucrania anunció avances "en algunos lugares" alrededor de la devastada Bajmut, en la provincia oriental ucraniana de Donetsk.
Continúan los ataques rusos y la respuesta ucraniana
Las autoridades agregaron que más de 30 edificios resultaron dañados por el bombardeo en Lviv, que se ubica unos 720 kilómetros al noroeste de las zonas de combate más cercanas, que serían las del sur de Ucrania.
"Este fue el ataque más destructivo contra la población civil de la región de Lviv desde el comienzo de la guerra", señaló en Telegram el jefe de la administración militar regional de Lviv, Maksym Kozytsky. El Ejército ruso aseguró que había atacado lugares de "despliegue temporal" de soldados ucranianos en Lviv. "Todas las instalaciones designadas se vieron afectadas", dijo el Ministerio de Defensa ruso.El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, se queja de la lentitud en la entregas de armas occidentales, que según él han permitido a Rusia fortalecer sus defensas en las zonas ocupadas.
Ucrania exige en particular aviones de combate F-16 y municiones de artillería para hacer frente a la superioridad aérea y la avalancha de fuego ruso en el frente. Zelensky llegó a Bulgaria, un país productor de municiones, donde se reunió con el primer ministro Nikolai Denkov y el presidente Rumen Radev antes de una importante cumbre de la OTAN en Vilna, la capital de Lituania, el 11 y 12 de julio.
El objetivo del viaje era acelerar las entregas de armas ligeras y de municiones, cruciales para la contraofensiva ucraniana en curso. Según Dmitri Peskov, el vocero de Putin y del Kremlin, la visita a Bulgaria ilustra el deseo de Ucrania de involucrar a "más países" en el conflicto. Zelensky también visitará Estambul mañana para mantener conversaciones con su par de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, en momentos en que Rusia amenaza con retirarse de un acuerdo sobre exportaciones de granos ucranianos negociado por el Gobierno turco.
Con información de Télam