El líder de ultraderecha español Santiago Abascal exhortó hoy a "recuperar la democracia" de manos de "gobernantes, multinacionales y medios de comunicación", en un acto en Madrid del que participaron de modo remoto el expresidente estadounidense Donald Trump, la líder italiana Giorgia Meloni y otras figuras de extrema derecha.
"¿Cómo hemos llegado hasta aquí? Quienes tenían que proteger nuestra economía, nuestra libertad, nuestras instituciones, la seguridad de nuestra nación y nuestra soberanía han traicionado a su pueblo", denunció Abascal, en el cierre de un "macroevento" de su partido Vox donde presentó las líneas políticas para los próximos meses.
Para el líder de ultraderecha, que durante el encuentro intentó mostrar la unidad de Vox y arengar a sus seguidores, no solo España atraviesa una situación "grave", sino que el resto de soberanías europeas están "al borde del abismo", informó la agencia de noticias Europa Press.
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Abascal, de 46 años, volvió a despotricar contra los impuestos, la inmigración y la inseguridad y a criticar duramente las políticas del Gobierno español del presidente Pedro Sánchez, una coalición entre su partido socialista PSOE y el partido de izquierda Podemos.
Durante el encuentro, Vox mostró a través de videos el apoyo de numerosos líderes, encabezados por Trump, quien agradeció a Abascal el "increíble" trabajo que realiza y abogó por unas fronteras seguras y la defensa de la agenda conservadora.
"Todos estamos viviendo una situación singular. Tenemos que asegurarnos de defender las fronteras, la agenda conservadora", proclamó el magnate republicano durante su breve intervención, en un mensaje grabado a bordo de un avión.
Trump dijo que "España es un gran país" y así quiere que "siga siendo".
Por su parte, Meloni, que se perfila como primera ministra de Italia luego de que su partido Hermanos de Italia fuera el más votado en las elecciones del mes pasado, denunció la actual construcción europea y mostró su esperanza de que pronto Vox pueda seguir sus pasos en las urnas.
"En España, como en Italia, hay una mayoría de ciudadanos que no se reconocen en utopías e ideologías de izquierdas y piden que asumamos la responsabilidad de gobernar", sostuvo.
Desde Hungría, el primer ministro Viktor Orban celebró la "buena costumbre" de los seguidores de Vox de reunirse bajo banderas españolas.
"Es bueno para nuestro corazón y nuestra alma; y también porque a los progres globalistas les provoca un infarto", esbozó y se erigió contra la "burocracia" de la Unión Europea (UE), al igual que Trump y Meloni.
"Debemos defender los intereses nacionales, nuestras tradiciones y nuestra soberanía", manifestó y continuó: "y no permitir que millones de inmigrantes irregulares invadan nuestros países".
En tanto, el primer ministro de Polonia, Mateusz Morawiecki, quien participó del acto personalmente, sostuvo que de no haber nacido en su país, hubiera deseado hacerlo en España.
Abascal le devolvió la gentileza asegurando que él hubiera deseado ser polaco de no ser español.
Con información de Télam