Quién es Tim Walz, el candidato a vicepresidente de Kamala Harris en las elecciones 2024 en Estados Unidos: gobernador de Minnesota y "el tío que todos quieren tener"

El compañero de fórmula demócrata es un defensor del aborto, de la comunidad LGBT, de medidas de corte progresista a favor de la redistribución y es caracterizado por los medios como un hombre que irradia demasiada calma. Su exageración con información poco clara ante temas sensibles lo pusieron recientemente en el centro de las críticas.

13 de octubre, 2024 | 14.52

El lugar que hoy tiene la vicepresidenta Kamala Harris en la Casa Blanca podría ocuparlo próximamente Tim Walz, el demócrata de 60 años que acompaña a la primera candidata negra a las elecciones de Estados Unidos en su disputa con la dupla Donald Trump- J.D Vance. "Izquierdoso radical", "peligroso extremista", "Una pesadilla para los estadounidenses". Así lo definió el candidato republicano que busca su segunda presidencia enarbolando nuevamente una agenda antiderechos. Walz está parado en las antípodas. El demócrata nacido en Nebraska hizo de la garantía a los derechos reproductivos su principal bandera como gobernador de Minnesota. Más calmo que Kamala, "lento como hombre del midwest" para algunos críticos que gustan de reproducir estereotipos. Con pasado en la Guardia Nacional, un ítem que le generó problemas por inflar su currículum, Walz se vende en estos comicios como un familiar al que los estadounidenses quieren tener cerca.

"Lo que la prensa ha dicho de él es que es el tío que todo el mundo quisiera tener, al que le podés contar algo cuando no querés recurrir a tu mamá o tu papá; además ha dedicado toda su carrera a ayudar a la juventud, a formarlos académicamente", subrayó a El Destape Alejandra Soto, directora de comunicaciones y medios latinos de Planned Parenthood Federation of America. Antes de inicar su carrera política, Walz fue profesor de estudios sociales en una escuela secundaria como coach de football y miembro de la Guardia Nacional del Ejército durante 24 años.

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En las aulas tuvo su primer acercamiento con la defensa de los derechos de la comunidad LGBT+, cuando fue elegido como consejero del primer club Gay-Straight Alliance- por los mismos alumnos en 1999. "Fue uno de los pocos profesores que querían que estuviera bien con quién era y que pudiera decir lo que pensaba", recordó años más tarde Seth Meyer, quien se autopercibe como bisexual, en diálogo con NBC. El estado que Walz gobernó se convirtió en un "refugio trans" cuando, en 2023, protegió a la comunidad mientras al menos 15 estados los cercaban con leyes para prohibir el acceso a intervenciones quirúrgicas y tratamientos para la reafirmación del género. "El amor gana", dijo ante las cámaras cuando aprobó la ley, antes de pasarle la lapicera a Hildie Edwards, una niña de 12 años que impulsó la norma. 

El demócrata pasó por la Cámara de Representantes de 2007 a 2019 y en 2017 le disputó la gobernación de Minnesota a Mark Dayton. En 2018, gracias al 53% de los votos que cosechó, comenzó su gestión como gobernador de Minnesota. Aunque fue en 2023, transcurrido un año de su segundo mandato, que impulsó las medidas de corte más progresistas: blindó el derecho al aborto (este fue el primer Estado en lograrlo), amplió el acceso a la fertilización asistida, defendió los derechos de las diversidades y lanzó programas de alimentación gratuita en las escuelas durante la pandemia.

Contra todas esas políticas apuntaron Trump y Vance, en tono burlón, cuando se supo que sería él quien estaría en la boleta demócrata. "Tampon Tim", lo apodaron por la ley que impulsó en 2023 para exigir que las escuelas proporcionen productos menstruales a estudiantes de 4º a 12º grado. Los $2 por alumno que tenía que destinar el Estado para brindar productos gratuitos para garantizar salud sexual le resultaron intolerables a los trumpistas. 

"Por fin tenemos a una mujer encabezando una fórmula y, tal vez; cambiando el marco de la conversación política entorno a la salud y los derechos reproductivos, con un candidato varón que apoya eso. Walz trae un punto de vista interesante, es un hombre que ha vivido estas situaciones que tienen que ver con los tratamientos de fertilización, lo ha vivido en carne propia, enfrentó retos junto a su esposa para creer su familia", remarcó Soto. El candidato contó su historia entre lágrimas en la Convención Nacional Demócrata que se celebró en agosto. "Esto es personal para Gwen y para mi", dijo al referirse a la profesora especializada en Inglés que conoció en su tiempo como docente en una secundaria en Nebraska y con la que se casó en 1994. Hope, de 23 años, y Gus, de 17 , son sus hijos. "Si nunca experimentaste el infierno que es la infertilidad, te garantizo, como alguien que lo ha atravesado, que recuerdo rezar todas las noches por una llamada, el nudo en el estómago cuando el teléfono sonaba y la absoluta agonía cuando escuchaba que el tratamiento no había funcionado. A Gwen y a mi nos tomó años, pero tuvimos acceso a los tratamientos de fertilidad y cuando nuestra hija nació, la nombramos "Esperanza". 

Aborto: un defensor en unas elecciones clave por el derecho

Una de las medidas más recordadas que tomó Walz como gobernador de Minnesota, estado al que se mudó para acompañar a Gwen, fue el acompañamiento a ley "PRO act" (Protect Reproductive Actions), que establece que "todo individuo tiene derechos fundamentales para tomar decisiones autónomas sobre su propia salud reproductiva", lo que incluye el derecho al aborto y anticoncepción. Se trata de un concepto de "libertad en la reproducción" más amplio, en tanto abarca además "el derecho de hacer uso o no de salud reproductiva"

"Hoy estamos cumpliendo nuestra promesa de poner salvaguardias contra los esfuerzos de revertir la salud reproductiva. No importa quien se siente en la suprema corte de Minnesota, esta ley va a asegurar que los ciudadanos de Minnesota tengan acceso a salud reproductiva en las próximas generaciones. Acá en Minnesota, tu acceso a la salud reproductiva y tu libertad para tomar tus propias decisiones están preservadas y protegidas", dijo al firmarla Walz. Lo hizo un año después de que la Corte Suprema de Estados Unidos diseñada al gusto de Trump, anulara la histórica sentencia Roe vs. Wade, que desde 1973 garantizaba el derecho al aborto en el país.

La decisión de Kamala Harris de ir por Walz como compañero envía un fuerte mensaje en este sentido y es osado, teniendo en cuenta que el suyo es un estado clave en estas elecciones. A pesar de que el Partido Demócrata tiene la cuarta racha ganadora más grande del país en Minnesota (con 26 elecciones consecutivas), siempre se definieron voto a voto. De hecho, en 2016, Trump perdió por menos de 2% y en 2020, su margen de pérdida se triplicó a más de siete. 

El aparato judicial moldeado por Trump contra los derechos reproductivos acecha todavía. "Trump no solo le cambió la cara a la Corte sino a la totalidad de la rama judicial federal. En cada uno de los Estados hay cortes de distrito, cortes de apelaciones y cortes de circuito. En esos 4 años asignó cientos y cientos de jueces en puestos vacantes que ahora van a poder esta ahí de por vida. Eso que hizo es lo que permitió que desapareciera precisamente Roe vs Wade", explicó la directora de comunicaciones y medios latinos de Planned Parenthood. 

La elección de Walz en la boleta es toda una declaración de Harris contra el "Proyecto 2025" que Trump primero apoyó y después desconoció. La propuesta fue creada por la Fundación Heritage e incluye a varios ex funcionarios de la administración Trump. Ellos firmaron un documento de 900 páginas en el que reclaman una reforma del Estado extrema, con el desmantelamiento del departamento de educación y otras agencias federales. También son radicales en su rechazo a cualquier tipo de ampliación de derechos como el aborto.

Walz irrumpe como candidato en momentos en que las historias detrás de los abortos inseguros a los que fallos estatales restrictivos empujan a las mujeres y personas gestantes aparecen en las primeras planas de los diarios. Para Soto, en tiempos en los que los discursos contra los derechos parecen tomar las calles la elección de Walz es "increíblemente acertada" porque las últimas encuestas dieron cuenta de que los estadounidenses apoyan el aborto y no quieren que los políticos tomen decisiones por ellos. "En términos generales, incluso en los grupos demográficos que se autodesignan como conservadores votantes republicanos registrados, de mayor edad, estereotipos asociados a los mas conservadores. es la pequeña mayoría la que esta en contra. Aunque sea por un voto, la mayoría no quiere que sea Trump el que diga qué hacer con su cuerpo". 

Además, en las elecciones de medio término se sometió a votación el derecho al aborto y ganó en seis estados. En este ciclo electoral de noviembre se refrendará con referéndums en Arizona, Colorado, Florida, Maryland, Missouri, Montana, Nebraska, Nevada, Nueva York y South Dakota. 

"La de Trump y Vance es una agenda que le sirve solamente a los más ricos"

En su discurso ante la convención demócrata, Walz también denunció que "la de Trump y Vance es una agenda que le sirve solamente a los más ricos, es una que no hace nada por nuestros vecinos que están necesitados. Es además errónea y peligrosa". Para controntarlos, recordó algunas medidas que tomó durante su gestión en Minnesota: "Recortamos impuestos para la clase media. Pasamos la licencia familiar y médica remunerada. Invertimos en la lucha contra el crimen y la vivienda asequible. Reducimos el costo de los medicamentos recetados y ayudamos a las personas a escapar del tipo de deuda médica que casi hundió a mi familia. Y nos aseguramos de que todos los niños de nuestro estado reciban desayuno y almuerzo todos los días. Entonces, mientras otros estados prohibían los libros en sus escuelas, nosotros estábamos desterrando el hambre de las nuestras", indicó. 

Soto cree que la gran ventaja que tiene Walz frente a Trump, e incluso de Kamala, es su "temperamento calmo" pero también que puede mostrar cómo gestionó un estado, más allá de la experiencia ejecutiva de Trump. "Creo que le hace muy bien a ella. Es un equipo balanceado, unidos en sus principios pero con dos estilos distintos. Él es más tranquilito", indicó. Después del debate con Vance, los medios afines a los republicanos se rieron de Walz por su calma. "Tuvo críticas de que no fue suficientemente firme, que titubeaba, que no respondió a las preguntas y que le tomó demasiado tiempo responder. El estereotipo del hombre del mmidwest, de formas lentas". 

Una de las iniciativas que mencionó fue su programa de alimentos gratuitos en las escuelas.  De acuerdo a datos oficiales, el 60% de los estudiantes pasaron a desayunar todos los días en la escuela intermedia y el 72% lo hizo todos los días. Walz recibió críticas encontradas por su manejo de la pandemia de Covid y los programas de nutrición, ante denuncias de fraude que lo acusaron de que decenas de personas utilizaron esos programas para obtener más de 250 millones de dólares en fondos relacionados con la pandemia para su beneficio personal, aunque Walz nunca estuvo directamente implicado en el plan.

Su mayor prueba como gobernador fue el asesinato policial de George Floyd en Minneapolis porque se lo acusó de haber tomado una respuesta tardía al respecto. Se ocupó de transferir el caso a la oficina del Fiscal General del Estado, Keith Ellison, que más tarde consiguió la condena del policía Derek Chauvin por asesinato, y ordenó a las agencias estatales que iniciaran una investigación ordenada por el tribunal.

Su pasado en la Guardia Nacional y el escándalo de Tiananmen

El escándalo que atravesó a su participación en las elecciones hasta ahora tiene que ver con su pasado en la Guardia Nacional. Walz pecó de exagerado, o le falló la memoria, pero llegó a decir en 2014 que estuvo en Hong Kong durante la masacre de Tiananmen. Y los republicanos no le dejaron pasar el error que cometió cuando era congresista de Minnesota, cuando ante el micrófono recordó haber estado cuando el Partido Comunista Chino reprimió las protestas estudiantiles que habían sacudido al país desde mediados de abril de 1989. La inolvidable represión fue el 4 de junio de ese año. 

"Iba a enseñar en una escuela secundaria en Foshan, Guangdong, y estuve en Hong Kong en mayo de 1989", dijo. "Y a medida que se desarrollaban los acontecimientos, varios de nosotros entramos. Y todavía recuerdo la estación de tren de Hong Kong". Y continuó: "Había un gran número de personas, especialmente europeas, creo, muy enojadas porque todavía seguíamos adelante con lo que había sucedido, pero yo creía en ese momento que la diplomacia iba a suceder en muchos niveles". Luego tuvo que salir a decir que no combatió allí, cuando el video se repitió hasta el cansancio en los medios locales. 

De nuevo hizo una reconstrucción confusa de su pasado en la Guardia Nacional cuando en 2018 habló de "las armas que sostuvo en la guerra". Los republicanos, incluido el candidato a vicepresidente, el senador de Ohio JD Vance, comenzaron a cuestionar su historial militar, dado que el comentario sugiere que se presenta a si mismo como alguien que pasó tiempo en una zona de combate. 

Lo cierto es que Walz sirvió 24 años para la Guardia Nacional pero nunca combatió. Se retiró antes para seguir su carrera política. La polémica que se desató por sus dichos fue tal que hasta tuvo que salir a elogiar a Vance, quien sí estuvo movilizado. “El gobernador Walz nunca insultaría ni socavaría el servicio de ningún estadounidense a este país; de hecho, agradece al senador Vance por arriesgar su vida por nuestro país. Es el estilo estadounidense”, dijo Lauren Hitt, vocera de la campaña Harris-Walz.