Luego de haber apoyado abiertamente el golpe de estado contra Evo Morales en noviembre del 2019, la OEA felicitó a Luis Arce por haber ganado las elecciones en primera vuelta las elecciones en Bolivia por más del 50% de los votos.
Así lo expresó el propio Luis Almagro a través de su cuenta oficial de Twitter: "El pueblo de Bolivia se ha expresado en las urnas. Felicitamos a Luis Arce y David Larama deseando éxito en sus labores futuras. Estoy seguro que desde la democracia sabrán forjar un futuro brillante para su país. Un reconocimiento al pueblo boliviano".
Sin embargo, era el mismo secretario general de la Organización de Estados Americanos el que convalidó al gobierno de facto, negó el resultado de las elecciones generales, y afirmó: "¿Golpe de Estado en Bolivia? Sí. En el momento que pretendieron robarse las elecciones del 20 de octubre y perpetuar a Evo Morales en el poder".
Antes
Ahora
El resultado de la elección daría, en principio, una ventaja de más de 20 puntos a Luis Arce, el candidato de Evo Morales, mientras que Carlos Mesa, su principal oponente rondaría estaría en segundo lugar. Por último, el candidato de extrema derecha boliviana, Luis Fernando Camacho Vaca llegaría en tercer lugar.
Mas allá de la tardanza del Tribunal Supremo Electoral, el MAS amplificó una puntillosa metodología para evitar el fraude del gobierno golpista de Jeanine Áñez en la cual generó más de mil mesas testigos en todo el país. La decisión del presidente del TSE, Salvador Romero, se basó en que, según él "por responsabildiad con el país" se decidió no usar el sistema de "Difusión de resultados".