La gran apuesta de China que podría cambiar el comercio con Sudamérica

Pese a una demanda judicial en proceso, China avanza en Perú con la construcción de un megaproyecto de un puerto que modificaría la conexión marítima comercial entre América Latina y Asia. El proyecto, que cuenta también con capitales privados peruanos, se desarrolla en Chancay, a menos de 80 kilómetros de Lima, y permitiría trasladar mercadería de manera directa al continente asiático sin escalas en México o Estados Unidos y con una reducción de más de 10 días de tiempo. La creación de este puerto se enmarca en la Ruta de la Seda y en medio de la preocupación de Estados Unidos por el avance del gigante asiático en la región.

El proyecto

Terminal Portuaria Multipropósito de Chancay es el nombre del proyecto que llevan adelante en un 60% Cosco Shipping Ports de capital chino, y un 40% Volcan compañía minera, empresa peruana y en la cual también tiene acciones la empresa minera suiza Glencore. Se habla de megaproyecto porque el plan prevé la construcción de un puerto con características que no se encuentran en Sudamérica, como la posibilidad de recibir los buques más grandes del mundo debido a la profundidad de las aguas, que permitirá llegar de forma directa a Asia y reducir entre 10 o 12 días un viaje marítimo que tarda más de 30.

“El puerto de Chancay va a cambiar la dinámica comercial de América del Sur y de Centroamérica al mercado asiático porque va a permitir llevar los productos regionales de manera mucho más directa y con más eficiencia en los costos de transporte y de fletes”, aseguró a El Destape, la ex ministra de Transporte de Perú y economista, Paola Lazarte, quien ha visitado las instalaciones durante su gestión. La ex funcionaria explicó que el puerto se hace con la última tecnología de lo que se conoce como puertos inteligentes, como los que funcionan en China y además explicó que va a ser el primer centro portuario en recibir buques de un gran tamaño que llegan a trasladar hasta 24 mil contenedores.

El proyecto comenzó a desarrollarse en 2016 durante el gobierno de Pablo Pedro Kuczynski y se inauguraría en noviembre de este año, en el marco de la realización en Perú del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), cuando se espera también la visita del mandatario Xi Jinping. El plan cuenta con un financiamiento arriba de los 3 mil millones de dólares en una primera fase, pero podría superar los 9 mil, financiamiento superior a otras construcciones portuarias en el país.

¿Proyecto regional?

Si bien se destacan los beneficios que el puerto traerá a Perú, también será de interés para otros países de la región. “Es un desafío regional también porque se replantea la necesidad de integrar no solamente lo que es el transporte por carretera sino también el transporte ferroviario, el transporte por hidrovías mucho menos explorado acá en el Perú, pero sí más desarrollado en Brasil, Paraguay y es precisamente esa oportunidad de conectividad regional que va a poder permitir que otros países de la región puedan explotar de manera también competitiva la operación en la emergencia del puerto de Chancay en el Perú”, agregó la ex ministra.

Para el caso brasileño, la cantidad de días que puede ahorrarse en el viaje a través de Chancay es de hasta 20 días. Es un caso especialmente interesante del gigante latino si se recuerda que Brasil es el responsable de alrededor del 40% del total de las exportaciones de la región a China, país que en los últimos 10 años se ha convertido en el primero o segundo socio comercial de varios estados latinoamericanos, incluído el gobernado ahora por Luiz Inácio Lula da Silva. 

“China compra hierro, soja, carne y mucho de esos productos no está en las costas de Brasil, está en el interior del país, a veces son mil kilómetros hasta la costa del Atlántico, después los barcos tienen que ir hacia el norte y pasar por el canal de Panamá, donde hay ahora un problema con el nivel de agua que está bajando en el canal y hay congestión. Entonces los exportadores brasileños podrían sacar su carga por Chancay y eso sería mucho mejor y más barato”, explicó a El Destape, el director del Centro de Estudios Asiáticos (CEAS) de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) de Perú, Carlos Aquino, sobre los efectos que también en el comercio regional.

En ese contexto, el periodista francés que reside en Perú, Román Migus, quien realiza una investigación del proyecto desde hace meses, destacó la relevancia del puerto para Sudamérica: “Se trata del tercer hub portuario del continente americano. En la actualidad, sólo existen dos puertos que lo hacen, o que vinculan de forma regular el continente con Asia, el puerto de Long Beach en Estados Unidos y el puerto de Manzanillos en México. Chancay pasaría a ser el tercer puerto con traslado regular a Asia y el primero para América del Sur. Entonces, eso obviamente podría cambiar el rostro de América Latina en los próximos años”.

Complicaciones

Pero no todo avance sobre rieles. La Autoridad Portuaria Nacional de Perú, que depende del Ministerio de Transportes y Comunicaciones, denunció la resolución por la cual la misma oficina en 2021 le entregó la exclusividad de los servicios de operación portuarios a la empresa china. Las autoridades piden que se anule el artículo de la resolución que señala la exclusividad a Cosco, debido a que iría en contra de la libre competencia y consideraron que fue un error administrativo. De todas formas, aclararon que no interrumpiría la puesta en operatividad.

“La construcción del puerto se ha autorizado y se va a autorizar su operación porque se encuentran amparados en la Ley del sistema portuario nacional vigente que permite que en el Perú los puertos puedan ser desarrollados a partir de concesiones o asociaciones público-privadas o sea como una inversión netamente privada, como es el caso del puerto de Chancay que se trata de una inversión de Cosco Shipping y de Volcan como socios y se le ha entregado la exclusividad de los servicios portuarios al interior del puerto”, explicó la ex ministra de Transporte sobre lo que posiblemente suceda.

La ex funcionaria agregó: "La construcción del puerto no es una controversia, sino si el puerto puede ser el único que puede prestar los servicios portuarios. La resolución sigue vigente, lo cual significa que el puerto al día de hoy tendrá la exclusividad. Sin embargo, sí es desafortunado que haya sucedido esto porque es una mala señal para los inversionistas, Esa parte sí es un poco la que genera, no es un buen mensaje, Perú tiene claro esto de la estabilidad jurídica y lo importante que es para la atracción de las inversiones privadas, de capital nacional y extranjero, precisamente el Congreso y el Ejecutivo están viendo la forma de poder resolver este imposible jurídico que la Autoridad Portuaria Nacional habría encontrado y corregirlo”.

¿Disputa geopolítica también?

En medio de la denuncia de la Autoridad Portuaria sobre la exclusividad de los servicios portuarios a las empresas surgieron también cuestionamientos internacionales. Desde Estados Unidos suelen acusar a China de llevar adelante una “trampa” en la construcción de puertos u otro tipo de infraestructuras que desarrollan en el marco del proyecto de la Ruta de la Seda que conforman más de 130 países y que con inversiones chinas llevan adelante distintos proyectos en sus naciones. El "engaño" radicaría en quedarse con el control de espacios estratégicos, algo de lo cual también ha sido acusada históricamente la potencia del Norte.

“Hay un actor al que no le gusta esta implantación de China, que es Estados Unidos. Como reveló el Financial Times en octubre, el gobierno de Estados Unidos se quejó por el dominio que tiene China de algunos sectores estratégicos. Se refería expresamente a las empresas, pero en realidad tienen el mismo dueño que es el Estado chino, de producción, distribución y comercialización de electricidad. Hablamos de 12 millones de habitantes que dependen 100% del Estado chino para el consumo de electricidad, eso a los estadounidenses no les gusta y Chancay tampoco”, destacó el periodista sobre las críticas acerca de las empresas de luz que operan en Lima y que son del gigante asiático.

En ese sentido, Migus recordó que la generala Laura Richardson, que estuvo recientemente en Argentina con el presidente Javier Milei, no fue al país durante el gobierno de Pedro Castillo pese a estar en ese cargo desde el 2021 y sí lo hizo en mayo de 2023 ya con Dina Boluarte en la Presidencia. En esa oportunidad se firmaron varios convenios, algunos de ellos sobre el ingreso de tropas norteamericanas al país. En cuanto al proyecto del megapuerto, el especialista afirmó: “Creo que aquí está metida la mano de Estados Unidos. No tanto para impedir la inauguración del puerto porque se va a inaugurar al fin de este año, pero efectivamente para asustar a cualquier tipo de inversor, cambiando las reglas del juego en pleno partido, y según el presidente de la empresa, eso efectivamente ha causado mucha molestia en el accionista principal, es decir, el estado chino”.

El director del Centro de Estudios Asiáticos sumó un dato más sobre la relación con el país gobernado por Joe Biden: “Hay rivalidad obviamente. Estados Unidos está muy preocupado por la presencia creciente de China en Latinoamérica y se decía mucho que Latinoamérica es el patio natural de Estados Unidos, es el patio trasero. Ahora, ¿por qué eso es así? En gran parte por el descuido de Estados Unidos. Estados Unidos dice que el Perú permite mucho la presencia de China, pero en realidad, el Perú es el país abierto a la inversión extranjera, no hay ningún problema que venga la inversión de Rusia, de Japón, de China, Estados Unidos, lo que pasa es que lamentablemente Estados Unidos no invierte en el Perú, el ritmo de su inversión ha bajado”.

Para noviembre se espera que quede inaugurada una primera fase que contará con cuatro terminales, pero el proyecto final contempla 15 terminales portuarias de última tecnología. Según autoridades de la empresa china el país latinoamericano podría convertirse en “La California de América del Sur”, en referencia a que ese estado norteamericano es conocido por su comercio por el Pacífico hacia el continente asiático. Lo cierto es que en medio de las denuncias sobre el control que podría tener China o incluso las denuncias ambientales o reclamos de los vecinos de la región de Chancay que deberán ser desplazados, Perú está ante la posibilidad de contar con un puerto que lo sitúe en lugar de privilegio en la región y el mundo. Dependerá de su Gobierno si los beneficios serán solo para los privados o para otros Estados.