Condiciones más duras: por qué la UE paga más por las nuevas vacunas contra la COVID

En el bloque europeo califican de "estafa" las nuevas reglas impuestas por los laboratorios. Cuál es el precio de las nuevas dosis. 

03 de agosto, 2021 | 10.06

La Unión Europea ha accedido a pagar una prima en los nuevos pedidos de vacunas contra la COVID-19 porque exige el cumplimiento de condiciones más estrictas, según informaron las autoridades europeas, ya que el bloque intenta garantizar los suministros después de un comienzo difícil de su campaña de vacunación. Tras el incremento, el precio es inferior al que Estados Unidos aceptó pagar en su último pedido de julio.

El domingo, el Financial Times informó que la UE ha acordado pagar a Pfizer y a BioNTech 19,5 euros (23,1 dólares) por cada una de sus vacunas contra la COVID-19 en virtud de un contrato firmado en mayo para un total de 1.800 millones de dosis, lo que supone un aumento de los 15,5 euros por dosis acordados en dos contratos iniciales de suministro para un total de 600 millones de vacunas. Esto estaba en línea con informes anteriores. 

El precio de las vacunas de Moderna subió a 25,5 dólares por dosis, según el periódico, en referencia a un acuerdo de 300 millones de vacunas, frente a los 22,6 dólares de su acuerdo inicial por 160 millones de inyecciones.

La legisladora Tiziana Beghin, del partido gobernante italiano 5 Estrellas, dijo que la UE estaba siendo estafada. "Es inexplicable", dijo.

El precio de Moderna sigue estando en el extremo inferior de la horquilla de 25 a 37 dólares indicada por la empresa el año pasado, pero Pfizer y BioNTech habían dicho anteriormente que los precios serían más bajos para los contratos de mayor volumen.

Otros dijeron que había buenas razones para pagar más y que las circunstancias habían cambiado mucho desde que se cerraron los acuerdos iniciales con los fabricantes de medicamentos el año pasado.

El ministro de Asuntos Europeos de Francia, Clement Beaune, declaró el lunes a la radio francesa RFI que los posibles precios más altos aún se estaban negociando y eran el resultado de cláusulas más estrictas sobre variantes, producción y entregas.

Un responsable europeo familiarizado con las negociaciones con los fabricantes de vacunas dijo que el valor de las inyecciones de los farmacéuticos había aumentado desde que se demostró su eficacia y el impacto positivo que tuvieron para ayudar a la economía a recuperarse de una recesión inducida por la pandemia.

Poder de negociación

Todas las vacunas utilizadas en Europa han demostrado tener un impacto positivo, pero las fabricadas por AstraZeneca y Johnson & Johnson, se han enfrentado a restricciones en su uso en la UE debido a la preocupación de que puedan provocar trombos en raras ocasiones.

Estos dos fabricantes de vacunas también han sufrido problemas de suministro, que en el caso de AstraZeneca han motivado recursos judiciales presentados por la UE.

Aunque el poder de negociación de Pfizer/BioNTech y Moderna ha aumentado, es probable que las exigencias adicionales de la UE eleven los costes de fabricación y suministro de las vacunas.

Un portavoz de Pfizer declinó hacer comentarios sobre los precios europeos, pero dijo que el último contrato con la UE era diferente de los iniciales, incluso en cuestiones relativas a la producción y la entrega. Moderna no respondió a una solicitud de comentarios.

Una portavoz de la Comisión Europea dijo en una conferencia de prensa el martes que en las conversaciones con los fabricantes de vacunas la UE tiene en cuenta varios elementos, como la capacidad de producción de las empresas, los plazos de entrega y la tecnología que utilizan.

El 23 de julio, Washington compró a Pfizer otros 200 millones de vacunas a un precio de 24 dólares la dosis (20,1 euros), según informó la compañía, frente a los 19,5 dólares que pagó Estados Unidos por sus primeros 300 millones de vacunas.

Pfizer dijo que los precios más elevados en Estados Unidos se debían a la inversión necesaria para producir, envasar y suministrar nuevas fórmulas de la vacuna, así como los costes adicionales para producir tamaños de envase más pequeños adaptados a "las oficinas de los proveedores individuales, incluidos los pediatras".

Con información de Reuters