Los inversores que apuestan por los activos en bolsa ya no eligen a Estados Unidos sino que prefieren los papeles que cotizan en Europa.
Así lo indica un informe del Bank of America, que afirma que en los siete días previos al 25 de enero, las bolsas europeas recibieron US$ 3.400 millones en flujos.
Este cambio de tendencia Europa llevaba 48 semanas seguidas de fugas de flujos en sus cotizaciones- se debe a los temores de recesión que asoman en Estados Unidos, según el informe elaborado por un grupo de estrategas del banco, liderado por Michael Hartnett, y que fue difundido por la agencia Bloomberg.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Los mercados emergentes no se quedan atrás con ingresos de US$ 7,9 mil millones.
En tanto, las bolsas estadounidenses mostraron un flujo de ingreso de sólo US$ 300 millones, el primer dato positivo en un mes, según el reporte que cita datos de EPFR, firma que monitorea los movimientos globales de dinero.
Las acciones en Europa resultan cada vez más atractivas contra las de Wall Street por un cumulo de motivos: un mayor optimismo por un descenso de la inflación en Europa, la reapertura de China y un alivio en la crisis energética que atraviesa el continente.
Los inversores y estrategas de Wall Street cada vez se muestran más pesimistas por el escenario de las acciones estadounidenses, no sólo por el panorama de una posible recesión sino por los últimos balances que presentaron las compañías y la dura política de la Reserva Federal (FED) en lo que respecta a las tasas de interés.
En ese sentido, según el informe cada vez hay más signos de un aterrizaje duro en la economía estadounidense, es decir, que no se logrará subir las tasas y al mismo tiempo- bajar la inflación y evitar que la economía no caiga en una recesión.
Otro endurecimiento de las condiciones financieras en esta próxima primavera (boreal) podrá ser necesario para llevar a una recesión a una economía estadounidense que actualmente crece más del 7% en términos nominales, señalan los economistas del Bank of America.
Citan como ejemplo al índice selectivo S&P 500, del cual señalan que está a sólo 3,4% de llegar a un punto donde será necesario deshacerse de las acciones.
Las peores fugas de fondos en las últimas semanas fueron en los papeles de salud y en los tecnológicos.
El informe del Bank of America coincide con otros dados a conocer recientemente por los bancos HSBC, Barclays, Goldman Sachs y Morgan Stanley, los cuales, además de Europa, hacen eje en los mercados emergentes como nuevo destino de estos fondos que antes apostaban por la bolsa estadounidense.
En cada década hay un nuevo líder en el mercado. En los 2010, eran las acciones de Estados Unidos y de las tecnológicas de gran capitalización, mientras que los líderes de esta década claramente pueden ser las acciones internacionales y de los mercados emergentes, indicó esta semana en otro informe, Jitania Kandari, subdirectora de inversiones y directora de investigación macroeconómica para mercados emergentes de Morgan Stanley Investment Management.
Los números ya lo demuestran: El índice MSCI que reúne a acciones seleccionadas de los mercados emergentes presenta una ganancia de 8,6% en lo que va del año, en contraposición con el 4,7% que lleva el índice equivalente de Estados Unidos.
Según el punto de vista de Kandhari, cada vez más existe una mayor divergencia entre el tamaño de capitalización del mercado bursátil estadounidense y la participación relativa cada vez menor- del país en la economía global, lo cual lleva a los inversores a repensar sus carteras y a considerar que las acciones de Estados Unidos están sobrevaluadas.
Con información de Télam