Tras las elecciones, el Gobierno buscará ponerle foco a la inflación, el dólar, el Presupuesto 2022 y el acuerdo con el FMI. Justamente, en su discurso grabado que se difundió después de los primeros resultados adelantó Alberto Fernández que no realizará un ajuste y que enviará al Congreso un proyecto de ley por las negociaciones con el organismo multilateral.
Inflación
La semana anterior a los comicios, el INDEC reveló que la inflación de octubre fue del 3,5% contra el mes previo, con lo que acumuló en el año una suba de 41,8%. El incremento interanual del índice de precios al consumidor (IPC) se ubicó en 52,1%.
Las dos divisiones de mayor incremento en el mes fueron prendas de vestir y calzado (5,1%) y salud (4,7%), esta última impulsada en gran medida por el alza de gastos de prepagas. La suba en la división de alimentos y bebidas no alcohólicas (3,4%) fue la de mayor incidencia en todas las regiones. Si bien los aumentos principales de los comestibles fueron estacionales, el nivel general se mantiene en niveles tan elevados que minan la intención del Gobierno de mejorar el poder adquisitivo de los hogares. Por lo pronto, las mejoras salariales de 2021, en promedio, acompañan las alzas, por lo que se espera que terminen con subas similares. Aunque esto puede interpretarse como el primer período en que no perdió después de la crisis del macrismo y pandemia, también se puede leer como otro más en que no se recuperó. Por eso serán claves los próximos dos.
En esto coincidió el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, que ponderó que "los salarios le están ganando a la inflación en los últimos meses", por lo que espera “que se pueda consolidar en los próximos meses”. El índice de ingresos de los empleados registrados subió 4,7% mensual en septiembre, como consecuencia de un incremento de 3,6% en el sector privado y un aumento de 6,6% en el sector público.
El secretario de Comercio Interior, Roberto Feletti, congeló los precios de más de 1.400 productos esenciales hasta enero y dialoga con almacenes, mayoristas y fabricantes para que se cumpla en su totalidad también en negocios de cercanía, donde se mantienen ciertas complicaciones. A la par, ratificó la semana pasada un acuerdo con toda la cadena farmacéutica para retrotraer los precios de los medicamentos al 1 de noviembre y mantenerlos por dos meses.
La capacidad de compra de los trabajadores se mantiene como una de los principales preocupaciones, pero no sólo en el país. Si bien en Argentina las grandes corporaciones juegan un rol clave a través de las remarcaciones que imponen con su poder de mercado, los precios son un problema mundial por la salida de la crisis del COVID.
China registró la inflación mayorista más alta de toda su serie histórica, que se remonta a 1995. El índice de precios de producción industrial subió 13,5% interanualmente en octubre, después del alza del 10,7% del mes anterior.
En Estados Unidos, la tasa interanual de inflación se disparó hasta el 6,2% en octubre, ocho décimas por encima de la de septiembre. Este fue el aumento más alto en más 30 años. La Oficina de Estadísticas Laborales (BLS según su sigla en inglés) dependiente del Departamento del Trabajo, no veía semejante variación en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) desde 1990.
Brasil también acarrea el problema de los precios. La cifra mensual fue del 1,25% en octubre, la mayor para ese mes desde 2002. En tanto, en la Eurozona alcanzó un incremento de 4,1% el mes pasado, cifras inéditas que se comparan sólo con las de la crisis de 2008.
Dólar
Si bien las importaciones y las exportaciones se manejan por el dólar oficial, la diferencia del 100% con los tipos de cambio paralelos impacta en las expectativas de los grandes empresarios, que presionan por una devaluación. Además de eso, las compañías con poder de mercado buscan remarcar precios con guía en la brecha.
A pesar de esto, las reservas brutas del Banco Central pasaron de 39.501 millones de dólares en enero a 42.790 millones esta semana. La fuerte suba en los precios internacionales de los productos exportables le permitió a la autoridad monetaria acumular 6.530 millones de dólares en compras en lo que va de este año.
De acuerdo con el relevamiento del Grupo de Estudios de la Realidad Económica y Social (GERES), las reservas netas al cierre de octubre se ubicaron en 6.857 millones de dólares. De ellos, 1.222 millones son líquidas, 2.037 millones son Derechos Especiales de Giro del FMI y 3.599 millones tratan de oro.
"En el transcurso de este año el Banco Central compró dólares y la balanza comercial es superavitaria, por lo cual no hay condiciones para una devaluación abrupta", detalló Letcher a El Destape. "Más allá del interés que puedan tener algunos sectores particulares, tanto el año pasado como en este momento, de buscan forzar un salto del tipo de cambio que los beneficie económicamente, las condiciones no están dadas para un ajuste abrupto", sentenció el investigador económico de CEPA.
Acuerdo con el FMI
Kulfas explicó la semana pasada que el objetivo del Gobierno es ordenar y dar más previsibilidad a la macroeconomía. Uno de esos caminos será la reestructuración de la deuda y "generar instrumentos específicos como los acuerdos de precios con el fin de ir reduciendo esa inercia inflacionaria".
Sobre los pasivos externos, Alberto Fernández anunció el envío de un proyecto de ley que "explicite el programa plurianual para el desarrollo sustentable, con los entendimientos con el staff del Fondo Monetario Internacional en las negociaciones". En un mensaje grabado tras la llegada de los primeros resultados adelantó que presentará en los primeros días de diciembre para solucionar “el escollo más grande que enfrentamos para continuar en la senda de la recuperación económica y de la construcción de un país con más equidad”.
El jefe de Estado aclaró que en el acuerdo con FMI no renunciará a los principios de crecimiento económico e inclusión social. El proyecto, precisó, es una decisión política y tiene el aval del Frente de Todos, la vicepresidenta, el Gabinete". Además, esgrimió que el Gobierno mantendrá los esfuerzos para lograr el apoyo de la comunidad internacional “en la construcción de mejores condiciones de financiamiento para llevar a cabo el programa de políticas públicas que como Nación soberana que somos, queremos implementar en pos de la mejor calidad de vida de nuestro pueblo”.
Presupuesto 2022
El tratamiento del Presupuesto 2022 en el Congreso se mantiene en la agenda del ministro de Economía, Martín Guzmán. Si bien se esperaba que comience su debate en Diputados dos semanas atrás, el objetivo del funcionario será ponerlo en el centro después de los comicios.
El proyecto del Palacio de Hacienda prevé un crecimiento del 4% del PBI, una inflación del 33% y un dólar a $ 131,10. A la vez, prevé un incremento real del gasto social y una reducción de los subsidios energéticos. En tanto, no contempla el pago de vencimientos de capital al Fondo Monetario Internacional.
"Si este proyecto de Presupuesto previera el pago de la totalidad de los vencimientos del principal en el marco del Acuerdo del 2018 con el Fondo Monetario Internacional, se colocaría al Estado Nacional en una grave situación", señala el documento redactado por Guzmán.
El supuesto de crecimiento del 4% para 2022 permitirá que se sobrepase en los primeros meses el nivel de actividad de la prepandemia, ya que terminará de compensar la retracción del 9,9% de 2020. Las proyecciones para el próximo año se complementan con alzas en el consumo privado del 4,6%, del consumo público del 3,1%, de la inversión del 6,6%, con una mejora de las exportaciones del 7,5% y de las importaciones del 9,4% para un saldo comercial de US$ 9.300 millones.
El Presupuesto contempla la actualización del escenario 2021 que de acuerdo a las "proyecciones presupuestarias conservadoras" preveía para este año un crecimiento de 5,5% del PBI pero que ahora se ratifica crecerá en torno al 8%, con el consumo privado de un 9%, consumo público 5,2% y la inversión 31,1%. Sin embargo, funcionarios nacionales ahora esperan que la economía se expanda en un nivel más cercano al 9%.