Para reducir la brecha cambiaria entre los dólares financieros y el oficial y cortar con las operaciones especulativas, que se conoce en la jerga cuevera como "puré", el Banco Central abandonó la intervención diaria en el mercado del dólar Bolsa. Hace unos meses el Central viene desembolsando un promedio de 20 millones de dólares diarios arbitrando (comprando y vendiendo) bonos para bajar el precio de referencia del dólar MEP o Bolsa y reducir la brecha cambiaria.
Esa operación subsidiada por la autoridad monetaria era aprovechada por un esquema de compra-venta de bonos que ofrecen los agentes de mercado y aseguraba una ganancia de hasta 8 por ciento diaria, con solo hacer contado con liquidación (o MEP en este caso) y arbitrar en paralelo en el mismo mercado para volver a pesificarse; y así reiniciar la rueda..
Hasta la semana el Central mantuvo un fuerte ritmo de venta de bonos en el mercado para bajar el costo del contado con liquidación y MEP y mantenerlo en torno a los 183 pesos. Esta semana subió hasta superar los 210 pesos para estabilizarse en 200 en la operaciones del jueves. Claramente fue una sobrerreacción a lo que comenzaba a notarse en el mercado: el Central dejaba de intervenir en ese mercado.
Una operación de contado con liquidación para dolarizarse implica la compra de un bono o acción en pesos para luego venderlo en el exterior en moneda extranjera. Lo mismo sucede con el MEP, la diferencia es dónde se depositan los fondos básicamente; en el primer caso en el exterior y en el segundo se hace con cuentas locales. Es por eso que el MEP actualmente evidencia un precio mayor que el contado con liqui, pese a que los dos permiten dolarizarse.
Para reducir la brecha con el oficial, el Central intervino vendiendo bonos, en particular el AR30 (Bonar 2030), para reducir el costo del MEP y el contado con liquidación, lo que favorece como alternativa de compra de divisas a los ahorristas. Sin embargo, habían crecido mucho, en la previa de las PASO y se mantienen hasta ahora, los arbitrajes con este bono subsidiado que, según fuentes oficiales, le costaba al Central unos 20 millones de dólares diarios, que impactaban directamente en las comprometidas reservas.
De acuerdo con el relevamiento del Grupo de Estudios de la Realidad Económica y Social (GERES), las reservas netas al cierre de octubre se ubicaron en 6857 millones de dólares, de los cuales 1222 millones son líquidas, 2037 millones son Derechos Especiales de Giro del FMI y 3599 millones en oro.
El rulo se completaba cuando se usaban esos dólares adquiridos en el MEP para volver a pesificarse, ya sea en el Senebi --negociación bilateral-- o en rueda normal (por pantalla, PPT), con otros instrumentos más caros que elevan la cotización. De tal forma cambiaban los dólares adquiridos a 183 pesos a un valor mayor. Ese mayor precio se lo daba su baja liquidez.
El Banco Central empezó el martes a reducir su nivel de intervención en ese mercado y este miércoles prácticamente no intervino.