Las tasas de interés que se deben pagar por comprar en cuotas con la tarjeta de crédito son superiores a la inflación en la mayoría de los casos. Financiar el saldo del resumen implica abonar un interés por la operación y de no pagar el total, la bola de intereses se incrementa.
Cuando no se cumplen con los vencimientos y ni siquiera se llega a abonar el pago mínimo, se generan intereses punitorios, que se suman a los anteriores. Si bien el Banco Central redujo varias veces las tasas de interés, este costo sigue siendo alto para los consumos con tarjetas de crédito.
Todo lo que tenés que saber antes de comprar con tarjeta de crédito en cuotas
Según apuntó el portal Mi Presupuesto, los que quedan con los costos más bajos son los planes Cuota Simple (en 3 o 6, 9 o 12 cuotas). Aunque tienen recargo, es menor que la inflación esperada. Desde mayo de 2024, el BCRA eliminó la tasa de interés máxima para el financiamiento del resumen para las tarjetas de crédito bancarias, pero sigue rigiendo el tope del 25% por encima del promedio de los préstamos personales de cada banco.
En mayo, el promedio de préstamos personales es 75%, con lo que las tasas del financiamiento con tarjeta de crédito no supera el 95% nominal anual (TNA) desde fin de mayo 2024 (antes era 109%). Esto implica una tasa mensual de 7,92% mensual y una tasa efectiva anual del 144%.
Esta tasa se aplica cuando la persona abona sólo el pago mínimo y "patea" el resto para el mes siguiente. Los bancos y tarjetas también dan la opción para que el consumidor pague el monto total en cuotas fijas. Aquí, la tasa de interés es la misma que para financiar el saldo deudor. Es decir, un 95% TNA. Cabe aclarar que esta tasa es la máxima que pueden cobrar los bancos y en algunos casos se aplica una más baja.
Según informaron las tarjetas de crédito más conocidas (Mastercard, Visa, American Express, Cabal, Argencard) a Fiserv (la operadora del Posnet), los planes de 2 a 24 cuotas tendrán una tasa de interés nominal de 95% (hasta 6 pagos) o 99% (de 7 a 24) nominal anual.
Esto implica una tasa efectiva anual (TEA) de 153,75% (12 meses) que, con todos los gastos e impuestos se eleva a un costo financiero total (CFT) superior al 190% , según el plazo. Lo anterior aplica a los bancos. En cambio, las entidades no financieras tienen la misma tasa de interés pero el CFT es mucho más alto (arriba del 200%).