El Gobierno apuesta a acuerdos para frenar la disparada de los materiales de construcción

El Gobierno apuesta a acuerdos para frenar la disparada de los materiales de construcción que se registran desde octubre. Además, busca cerrar precios accesibles para los planes de viviendas sociales. En enero los insumos subieron 71% interanual. Al comienzo de esta escalada, el Ejecutivo había identificado claras prácticas especulativas, que el propio Presidente hizo públicas.

Los materiales aumentaron 5,9% contra diciembre, muy por encima del resto de los rubros, lo que elevó los costos totales al 3,1% contra el mes anterior. Los gastos generales ascendieron 1,8% y la mano de obra sólo 0,6%. El hierro lideró las alzas (12,7%), tal como había anticipado El Destape. Estuvo seguido de los ladrillos (11,3%), productos plásticos (10,4%) y maderas en bruto y para techos y pisos (10,1%).

La concentración que se da en el sector se repite en muy pocos otros rubros de la economía, como el de alimentos. La fabricación de metales comunes, por caso, se encuentra en manos de sólo tres compañías: Aluar, Acindar, Siderca. La producción de cemento recae en Loma Negra como un cuasi monopolio, mientras que el emporio de Techint lidera en otros segmentos de la construcción.

Para atender esta espiral de incrementos, el Gobierno nacional hablará el tema cara a cara con los responsables. La semana próxima empiezan las reuniones con cadenas de valor; la de la construcción será una de esas. Allí se debatirá de precios y de salarios con los empresarios y trabajadores del rubro.

Este ciclo de encuentros fue inaugurado los 10 y 11 de febrero, cuando dieron cita en Casa Rosada a los principales actores de la economía. Si bien las invitaciones fueron cursadas como “personales e intransferibles”, Paolo Rocca estuvo entre los pocos dueños de compañía que envió a un subalterno. Su argumento: se encontraba de viaje.

El Ministerio de Desarrollo Productivo, de Matías Kulfas, trabaja en paralelo a esta estrategia para conseguir acuerdos de precios para los planes de vivienda social. De este modo, la cartera de Desarrollo Territorial y Hábitat podrá contar con costos más accesibles para hacer frente al elevado déficit habitacional del país.

Los insumos pegaron un salto en octubre debido a la especulación de las fabricantes y corralones. Esto les valió el encare público de Alberto Fernández el 24 de noviembre pasado. "La mayor producción alguien la compra y la retiene. Y allí veo una nefasta actitud de acaparar esos bienes tratando de especular con un mejor precio en el futuro. A quienes estén haciendo eso quiero advertirles que voy a ser inflexible. Voy a caerles con todo el peso de la ley de abastecimiento", advirtió en ese momento. Acto seguido, el Gobierno obligó a las compañías a producir al máximo de su capacidad y llevó adelante inspecciones para escrutarlas.