La Comisión de Presupuesto y Hacienda del Senado firmó el dictamen del proyecto de ley de alivio fiscal que beneficiará a alrededor de 4,5 millones de monotributistas y 140.000 autónomos. El despacho obtuvo el apoyo de todos los bloques que integran la Cámara alta y podría ser convertido en ley la semana que viene.
El proyecto de ley de alivio fiscal para pequeños contribuyentes (monotributistas) y autónomos fija una escala de tramos diferente, la exención del pago para las categorías A y B de monotributo y una mayor deducción especial del Impuesto a las Ganancias para autónomos. Esto, en caso de ser aprobado por el Senado, implicaría una reducción en el cobro de impuestos de casi $67.000 millones, según informó la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC).
La reducción de cargas sobre el Régimen Simplificado supondría un alivio impositivo a contribuyentes por $ 11.067 millones, mientras que el efecto sobre la determinación del Impuesto a las Ganancias implicaría una reducción de cargas por $ 55.223 millones. En este último caso, señaló la OPC, de no mediar un ajuste en la normativa vigente sobre el monto de los anticipos a ingresar, el efecto sobre la recaudación tributaria se comenzaría a observar a partir de junio de 2023 luego de realizarse la presentación de la Declaración Jurada del ejercicio fiscal 2022.
Por otra parte, el impacto fiscal sobre Régimen Simplificado se estima que se reflejará en 1.577.254 contribuyentes, que dejarían de pagar el tributo. En dicha observación se incluye una proyección de los monotributistas que pasan de tramo y eventualmente quedarían excluidos del régimen, además de la eximición del pago del impuesto integrado a los contribuyentes de las Categorías A y B.
En cuanto a Autónomos, el porcentaje de reducción de recaudación que se obtuvo de la simulación sobre los datos por tramos marca una diferencia en torno al 6%, que arroja una merma por el incremento de la Deducción Especial del Proyecto que se estima en $55.223 millones en el devengado de las DDJJ del ejercicio fiscal 2022. Al igual que Ganacias, como la reforma empieza a regir a partir del año fiscal 2022, el impacto se verá en junio del 2023.
Sobre esto, en el informe, la OPC señala: "En razón que los anticipos de personas humanas se calculan aplicando una tasa del 20% tomando como base el impuesto determinado del año anterior menos los conceptos susceptibles de deducción, se comenzaría a tributar anticipos con la incorporación del Proyecto a partir de agosto 2023. Por lo tanto, en el año 2022 no tendría impacto fiscal, a menos que se solicite una reducción de anticipos".
Con información de Télam