El Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) de la Reserva Federal (FED) de Estados Unidos se reunirá hoy y mañana para definir su política monetaria, la cual, según los analistas, permanecerá sin cambios, luego de haber incrementado la tasa de interés en 11 oportunidades entre marzo de 2022 y julio del año pasado.
Tras llevar las tasas a un rango de entre 5,25 a 5,20% -el mayor nivel en dos décadas- la FED logró bajar la inflación a 3,4% anual en diciembre, acercándose a la meta del 2% anual.
En su pico, en junio de 2022, había llegado a ser del 9,1%, un récord en los últimos 40 años.
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Por el momento, el mercado especula que el organismo monetario mantendrá sus tasas sin cambio hasta, por lo menos, marzo, para luego comenzar con recortes.
En las minutas de la reunión de diciembre, los propios funcionarios de la FED concluyeron que es muy posible que hayan recortes este año, aunque no dieron precisiones sobre cuándo comenzarán.
De hecho, las proyecciones de los miembros del FOMC –denominadas como “dot plot” (diagrama de puntos)- ubican tres reducciones de tasas para este año y otras cuatro para el próximo.
“En sus proyecciones enviadas, casi todos los participantes indicaron que, reflejando las mejoras en sus perspectivas de inflación, un menor rango de meta para la tasa federal de fondos sería apropiada para finales de 2024”, señaló el documento que aclaró que hay un “nivel inusualmente elevado de incertidumbre” sobre los próximos movimientos de política.
En las minutas, el organismo también destaco que hubo un “claro progreso” contra la inflación anuqué señalan que el mismo es “desigual”, sintiéndose más en la energía y los bienes de primera necesidad, y aún no tanto en los servicios.
Hasta ahora, la FED logró su objetivo de bajar la inflación sin generar una recesión en la actividad económica.
De hecho, el Producto Borto Interno (PBI) creció 2,5% en 2023, por encima del 1,9% de 2022.
Pese al encarecimiento del crédito y una política monetaria restrictiva, tanto el consumo como el mercado laboral se muestran sólidos.
No obstante, cuanto más tiempo las tasas permanezcan en un porcentaje restrictivo, más será el impacto en la demanda y en los planes de contratación y expansión de las empresas.
En ese sentido, la senadora demócrata Elizabeth Warren junto a otros tres legisladores enviaron el domingo pasado una carta al presidente de la FED, Jerome Powell para que bajen las tasas de forma inmediata, pues el nivel actual, al encarecer las hipotecas, está dificultando el acceso a la vivienda.
“El PBI podría ralentizarse significativamente en la primera mitad de 2024 de la mano de un enfriamiento en el mercado laboral y preocupaciones por la disponibilidad del crédito y la demanda de los consumidores”, alertó la economista Eliza Winger a la agencia Bloomberg.
Más allá de que no se esperan cambios en las tasas, el mercado estará atento mañana en las declaraciones y las señales de que podría dar Powell en su conferencia de prensa.
“El escenario está preparado para que la FED tome pasos para recortar tasas en los próximos meses. Creemos que comenzará a bajarlas en marzo”, comentaron los analistas Stuart Paul y Estelle Ou.
Con información de Télam
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