El entrenador de River Plate, Marcelo Gallardo, eliminado de la Copa Libertadores de América por primera vez en los últimos cuatro años antes de las semifinales, comenzó a delinear su próximo objetivo y definirá su futuro en el club a fin de año cuando culmine su contrato.
En ese contexto y luego del duro golpe que significó la eliminación a manos de Atlético Mineiro, un rival que lo superó ampliamente en la serie, el "Muñeco" Gallardo intentará pelear el título de la Liga Profesional con 18 fechas por jugarse y que nunca consiguió en su estadía de más de siete años en el club, en gran parte porque priorizó los torneos internacionales de la Conmebol.
Además, será la primera vez en las siete temporadas que el DT lleva al frente del equipo que compite en un sólo frente, esto debido a que fue eliminado en los octavos de final de la Copa Argentina por Boca Juniors, a lo que sumó la reciente eliminación de la Libertadores consumada en Belo Horizonte.
En el mensaje a los jugadores anoche luego de la caída inapelable por 3-0 ante el Mineiro, el entrenador fue muy claro: "Descansen y a limpiar esta derrota porque tenemos que enfocarnos en el torneo local para ser protagonistas", lanzó el "Muñeco" según confió a Télam una fuente de su entorno.
En ningún momento, ni en la intimidad de su grupo de trabajo y menos aún con los dirigentes o con los referentes del plantel, Gallardo cambió el eje de su proyecto futbolístico para este 2021 a pesar de la dura caída ante Mineiro.
En cuanto a las preocupaciones del entrenador hay un hecho que es clave y tiene que ver con el mercado de pases en Europa que cierra el 30 de agosto y la posibilidad concreta que, una vez consumada la eliminación en la Libertadores, otro integrante del plantel se vaya.
Asimismo, la dirigencia "Millonaria" sabe que se vienen tiempos muy difíciles para el proyecto de Gallardo porque la diferencia económica en Sudamérica se va a reflejar en lo futbolístico, sobre todo con los clubes de Brasil.
"Hay que ver si el entrenador tiene fuerzas para seguir compitiendo con chances cada vez menores desde lo económico y haciéndose más complicado retener jugadores, el contexto te hace menos competitivo y Gallardo lo sabe": explican desde el entorno del "Muñeco".
Si bien el panorama es incierto en cuanto a la continuidad, algunos directivos se ilusionan con la idea que el proyecto integral de inferiores que planificó el DT y que ya empezó a dar sus frutos sea un buen motivo para que siga.
"Se viene un fútbol donde el valor de las inferiores va a ser tan fuerte como nunca en la competencia profesional, ojalá que Gallardo pueda conducir también esta etapa que él mismo vio venir cuando le dedicó tantos esfuerzo a las inferiores": analizan en River.
Ni siquiera las elecciones presidenciales que se realizarán en diciembre son un factor determinante ya que todo el arco político del club pondrá a Gallardo como bandera indiscutible de sus propuestas.
Ya en el anterior proceso electoral y para evitar quedar en el medio de las cuestiones políticas, Gallardo habló con todos los candidatos y les anticipó que iba a renovar su contrato sea cual fuere el resultado de la contienda.
Para este fin de año el escenario se repite por el tema de su contrato que termina el 31 de diciembre y el "Muñeco" será de nuevo un actor fundamental para las fuerzas políticas y en especial para el oficialismo.
Es que desde que se inició la gestión de Rodolfo D´Onofrio, nunca tuvieron que sentarse a pensar en un River sin Gallardo porque fue el único entrenador que necesitaron elegir tras la salida de Ramón Díaz en junio del 2014 a quien habían heredado de la presidencia de Daniel Passarella.
Con información de Télam