Paul Auster, Gay Talese, Siri Husvedt y Colum McCann fueron algunos de los escritores que participaron hoy en Nueva York de una lectura pública de obras de Salman Rushdie, en solidaridad con el autor de origen indio y nacionalizado británico estadounidense que fue gravemente herido a puñaladas hace una semana en la localidad neoyorquina de Chautauqua.
La cita fue en las escalinatas de la Biblioteca Pública de Nueva York donde se congregaron más de una decena de escritores, incluidos amigos y colegas de Rushdie, quien fue invitado a ver el encuentro desde el hospital en el que se está recuperando, informó la agencia de noticias AFP.
En el evento organizado por la biblioteca neoyorquina y el PEN América, asociación global de escritores que busca proteger la libertad de expresión y celebrar la literatura, Talese leyó un extracto de la novela "La decadencia de Nerón Golden", mientras que el irlandés McCann leyó un ensayo que Rushdie escribió en 1992 para el New Yorker, "Fuera de Kansas", y dijo que esperaba con ansias su recuperación así como su regreso al mundo literario.
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"Él siempre ha estado a la altura de las circunstancias, tendrá algo profundo que decir", especuló.
Suzanne Nossel, directora del PEN estadounidense, destacó que "ni siquiera un puñal en la garganta podría sofocar la voz de Rushdie" y recordó que el escritor de 75 años habló por "decenas de escritores que han sido perseguidos y atormentados y no querían que sus terribles experiencias subsumieran sus identidades o ahogaran su imaginación".
Auster, por su parte, recordó que la obra de Rushdie es como "la mejor literatura", porque abre el universo, empuja las fronteras de las lenguas, hace el mundo más amplio y ayuda a identificarnos con quienes no son como nosotros.
En tanto, Husvedt resaltó la diversidad en la que Rushdie creció: nacido en India, educado en Inglaterra y residente en Estados Unidos, y expresó que su valor consiste en no sufrir por la falta de raíces, sino al contrario, disfrutar de sus muchas raíces. Al tiempo que el autor indio Kiran Desai leyó un pasaje de "Quichotte", una novela de Rushdie inspirada en el clásico "Don Quijote".
"Querido Salman y querida familia de Salman: la semana pasada muchos de nosotros nos dimos cuenta de que contábamos contigo para sostener el cielo", dijo Desai antes de la lectura y agregó: "Espero que sepas que también podés contar con nosotros. Estamos aquí para ti y estaremos aquí por mucho tiempo".
A su turno, el novelista y periodista británico Hari Kunzru leyó el comienzo de "Los versos satánicos", el que tras su publicación en 1988 le significó a Rushdie una condena de muerte por parte de las autoridades religiosas iraníes, y subrayó: "Salman escribió una vez que el papel del escritor es nombrar lo innombrable, señalar los fraudes, tomar partido, iniciar discusiones, dar forma al mundo y evitar que se duerma. Es por eso que estamos aquí".
A pesar de sus lesiones que "cambiaron su vida", el autor ganador del Premio Booker ha conservado su "sentido del humor luchador y desafiante habitual", dijo su familia a principios de esta semana.
Rushdie fue apuñalado varias veces el viernes último, hace hoy una semana, cuando se disponía a comenzar una conferencia literaria en el Instituto Chautauqua, de la localidad homónima, y desde entonces se encuentra hospitalizado, recuperándose de daños sufridos en el hígado, los nervios de un brazo y los ojos.
El agresor, un joven estadounidense de 24 años llamado Hadi Matar, fue detenido al momento del ataque y desde entonces permanece preso sin derecho a fianza, habiéndose declarado inocente de intento de asesinato y agresión, a la espera de una nueva audiencia judicial en Nueva York.
Con información de Télam