Cómo hacer almíbar

Te contamos cómo preparar los distintos tipos de almíbar para agregárselo a tus medialunas, budines y postres.

01 de febrero, 2022 | 15.11

El almíbar es uno de los acompañantes más clásicos de muchos de los postres preferidos por los argentinos. Para mojar las medialunas, budines o postres, la receta del almíbar es muy sencilla y con pocos ingredientes, pero es fundamental estar muy atentos a su preparación ya que cada tipo de jarabe tiene sus propios secretos. Te contamos tipos, temperatura y tiempo de cocción, juntos con algunos consejos y tips, como para que puedas preparar el mejor almíbar casero.

Si bien la receta clásica para hacer almíbar es con agua, es posible prepararlo con cualquier líquido -vino, jugo de frutas, o inclusive mezclar-. Es que se trata de una mezcla de azúcar con un líquido, que se cocina hasta alcanzar una consistencia de jarabe. La proporción es 2x1, es decir de dos partes de azúcar por una de líquido (sin importar cuál sea). También es importante remarcar que el almíbar se hace con azúcar blanca, ya que es la que cristaliza en la forma que se necesita para esta preparación. 

Receta para hacer almíbar casero

Ingredientes

  • 200 gramos de azúcar refinada
  • 100 mililitros de agua

Preparación

Hay distintos tipos de almíbar, que no se distinguen por tener diferentes ingredientes sino por la temperatura que alcanza y el tiempo que hay que dejarlo en el fuego para que reduzca. Para saberlo se puede utilizar un termómetro para saber exactamente alcanza la temperatura ideal. También se puede hacer con una cuchara, agua fría y los dedos, pero hay que tener mucho cuidado de no quemarse. Para esta última opción, hay que tomar un poco del almíbar con una cuchara, pasarla por agua fría y después tomarla con los dedos. La forma que tenga demostrará en qué punto está. Es fundamental que el fuego esté medio-bajo.

Almíbar flojo o ligero

Se produce cuando la temperatura llega a 100º centígrados. A fuego bajo, una vez que la preparación rompa hervor, estará listo. Se trata de un almíbar transparente que servirá para humedecer tortas o hacer frutas en almíbar, entre muchos otros.

Almíbar a punto de hilo flojo

Apenas más espeso que el ligero, este almíbar se consigue al llegar a los 105º centígrados. Al hacer la prueba con los dedos (siempre después de enfriarlo con agua), se podrá ver cómo se forman hilos muy finitos que se rompen con facilidad. Es ideal para hacer frutas confitadas.

Almíbar a punto de hilo flojo

Almíbar a punto de hilo fuerte

Al llegar a los 110º centígrados, los hilos se vuelven un poco más gruesos y espesos. Este es el tipo más famoso de almíbar y se utiliza para los glaseados, entre otros.

Almíbar a punto de bola blanda o burbujas encadenadas

Usado para hacer merengue italiano, se consigue al llegar a los 120º, cuando se pueden formar una bolita muy blandita con los dedos. 

Almíbar a punto de bola fuerte

Entre los 130º y los 135º se pueden formar bolas más resistentes. Utilizado usualmente en confituras y decoraciones de azúcar.

Almíbar a punto quebrado

Entre 140º y 150º, se endurece al caer en el agua pero sigue siendo muy flexible y maleable con los dedos. Es el usado para hacer algodón de azúcar.

Caramelo

Con el agua casi completamente evaporada se forma el caramelo, que se divide en claro u oscuro. El primero llega a los 160º, mientras que el oscuro recién a los 170º. Hay que tener en cuenta que mientras más oscuro sea, menos dulce será la preparación.