Luego de las postales de la última manifestación del fundamentalismo macrista, que incluyó un nuevo intento de agresión al canal C5N, el periodista Pablo Sirven intentó justificar la agresión violenta de los manifestantes en lo que llamó "una cobertura aviesa y que busca irritar".
En su columna para el diario La Nación, se mofó de que los medios que necesitaron protección policial para evitar ser agredidos por los manifestantes: "Los concurrentes a movilizaciones contra gobiernos peronistas saben que los cronistas hiperoficialistas irán a buscarlos, no para escucharlos, sino para someterlos a interrogatorios aviesos y burlas", expresó.
A la vez que deslizó: "Es algo que no suele ocurrir en los actos peronistas. Sería algo inconcebible que un cronista de TN, por ejemplo, se internara adentro de esa muchedumbre y empezara a provocar a algunos de los concurrentes con preguntas impertinentes o mofas. Lisa y llanamente lo molerían a palos".
"Buscan provocar, confundir y hacer trastabillar a la mayor cantidad posible de asistentes"
"No se acercan con respeto, sino que buscan provocar, confundir y hacer trastabillar a la mayor cantidad posible de asistentes. ¿Debe un manifestante en una marcha opositora responder a estas requisitorias que solo pretende dejarlo mal?", justificó.
Mientras mostraban el evento, los periodistas realizaron entrevistas y dialogaron con algunos de los presentes. Pero hubo a quienes no les gustó que estuvieran cubriendo y comenzaron a atacar. Así, rápidamente empezaron los insultos y los gritos, y otros acudieron con ánimos de dar golpes.
A diferencia de otras marchas, finalmente la Policía la Ciudad de Buenos Aires realizó un cordón para contener a los manifestantes, ya que en anteriores ocasiones las agresiones fueron excesivamente violentas.
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