Los fenómenos naturales relativos a la Tierra son indicadores de cómo fue la vida en el planeta, cómo evolucionó el mismo, que significaron estos cambios en sus habitantes y también sirven para entender el futuro que le espera al mundo. En una reciente publicación, investigadores afirmaron que la mitad del planeta perdió calor más rápidamente que la otra en los últimos 400 millones de años. En todo ese tiempo, el interior del planeta que coincide con el Océano Pacífico fue la parte de la Tierra que se enfrió más rápido.
El calor en el interior de la Tierra proviene, por un lado, de la descomposición de elementos radiactivos y también de las colisiones de los asteroides que formaron al planeta. Este interior se enfría continuamente, aunque de forma muy lenta y progresiva. El motivo de esto es que la superficie terrestre libera más calor del que se produce en el interior.
Según un estudio publicado en la revista Geophysical Research Letters, en los últimos 400 millones de años la Tierra perdió calor de forma desigual. Antes, el enfriamiento podría haber sido uniforme ya que las placas tectónicas se movieron durante muchos millones de años. En el último tiempo, los continentes se reunieron en un mismo lado del globo terráqueo, lo que implica que en los sectores continentales la pérdida de calor aún más lenta que en las zonas en las que predomina el agua.
Para calcular la pérdida de calor en el planeta, investigadores del Centro para el Desarrollo de la Tierra de la Universidad de Oslo, utilizaron modelos de cómo se movieron los continentes. Para hacerlo primero dividieron a la Tierra en dos hemisferios: Pacífico y Africano. En este último se encuentran agrupados la mayoría de los continentes, incluso más hace millones de años que en la actualidad.
Durante alrededor de 160 millones de años -entre hace 335 y 175 millones de años-, los continentes estaban juntos en un supercontinente conocido como Pangea, que tenía a África como centro. Esto implicaba que el Hemisferio Pacífico no tuviera continentes, por lo que la pérdida de calor en ese sector era aún mayor, explicó Krister Karlsen, autor principal del estudio.
De esta forma, los científicos pudieron reconstruir las pérdidas de calor en ambos hemisferios y calcular la diferencia de temperatura entre ellos. Tras realizar los cálculos correspondientes, los investigadores llegaron a la conclusión de que en los últimos 400 millones de años, el Hemisferio Pacífico se enfrió 50º centígrados más que el Hemisferio Africano.