Un grupo de científicos financiados por la NASA descubrió cuevas en la Luna con temperaturas promedio casi primaverales. La importancia de este hallazgo radica en que estos espacios podrían ser ideales para refugiar humanos en futuras misiones que tienen como destino el satélite natural de la Tierra.
Gran parte de la superficie lunar presenta temperaturas que van desde los 127ºC durante el día hasta los -173ºC durante la noche, dependiendo siempre de si son zonas que están expuestas al Sol o no. Debido a este dato por muchos desconocido, cobra especial relevancia uno de los últimos descubrimientos que realizó un grupo de investigadores a través de la nave espacial Lunar Reconnaissance Orbiter (LRO) y con la ayuda de modelos informáticos.
Es que el equipo de científicos de la NASA descubrió cuevas en la Luna que presentan temperaturas promedio casi primaverales de 17º centígrados. Este hallazgo es de vital importancia ya que esos espacios serían ideales para refugiar humanos en futuras expediciones al satélite natural de la Tierra. Esto se debe también a que las mismas son térmicamente estables, algo que se explica por la proyección de sombra, que sirve tanto para limitar las altas temperaturas durante el día como para evitar que el calor se disipe durante las noches.
"Alrededor de 16 de los más 200 pozos son probablemente tubos de lava colapsados", explicó Tyler Horvath, director de la investigación y estudiante de doctorado en Ciencias Planetarias en la Universidad de California, Los Ángeles. En ese sentido, cabe destacar que los tubos de lava -que también hay en la Tierra- se forman cuando el magma fundido fluye por debajo de un campo de la misma enfriada o se forma una costra sobre un río de lava, dejando un largo túnel hueco. Si el techo de uno de estos tubos solidificados se derrumba, se abre un pozo que puede conducir al resto del tubo con forma de cueva.
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El esperado regreso a la Luna
Tras largos años de ausencia en el satélite natural de la Tierra, la NASA estima que su próxima misión llegará después del 2026, así como otras agencias espaciales avanzan en viajes propios. Por eso, el presente estudio suma interesantes alternativas para la exploración de escenarios particularmente hostiles para el humano y uno de los investigadores planteó la posibilidad de un recuerdo a épocas ancestrales para la humanidad en la Tierra. "Los humanos evolucionaron viviendo en cuevas, y a las cuevas podríamos regresar cuando vivamos en la Luna", opinó David Paige, coautor del artículo y responsable de las mediciones de temperatura.