Existe un truco que los japoneses tienen para enfriar los hogares en plena ola de calor. No se trata del aire acondicionado ni del ventilador, ya que esta técnica es utilizada ancestralmente por los orientales desde mucho antes que se inventen estos artefactos. Este truco se puede implementar muy fácilmente en cualquier hogar, sin importar dónde vivas.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) anunció ola de calor con alerta amarilla y naranja en 12 provincias del país. Por esta razón, es fundamental conocer técnicas para enfriar la casa que no requieren un gasto de energía, en especial durante el verano, que los cortes de luz se vuelven cada vez más frecuentes.
Cómo es la técnica japonesa para enfriar la casa
En Japón, las personas usan una técnica muy llamativa para dormir frescos sin aire acondicionado ni ventilador. Este truco consiste en elegir un colchón especial, llamado shikibuton, un colchón tradicional japonés que es mucho más delgado y liviano. De esta forma, se puede enrollar y guardar durante el día. Están hechos a base de algodón y fibra de bambú, que evitan que el calor se acumule, y van directamente sobre el suelo, para aprovechar su frescura.
Además, otro truco que utilizan es colocar toallas húmedas en las muñecas, tobillos y frente antes de acostarse. También usan sábanas de algodón puro o lino, ideales para mantenerse fresco durante la noche. A diferencia de otras telas, estas dos previenen la transpiración, aportan frescura y suavidad, ideales para un sueño reparador en plena ola de calor.
La técnica simple y eficaz para enfriar la casa con un ventilador
Para quienes desean evitar el aire acondicionado y aún así disfrutar de un hogar fresco, hay un truco sencillo que requiere apenas unos pocos materiales fáciles de conseguir y tres pasos básicos:
-
Abrir una ventana: esto favorece la entrada de aire fresco y mejora la circulación en la habitación.
-
Ubicar el ventilador cerca de la corriente de aire: colocarlo estratégicamente frente a la ventana ayudará a potenciar el flujo de aire en el espacio.
- Añadir botellas congeladas detrás del ventilador: este paso clave permite que el aire que expulsa el ventilador se enfríe al pasar por las botellas heladas, generando una brisa refrescante en el ambiente.
Este método es ideal para aliviar el calor de forma práctica y económica, aunque su eficacia puede disminuir en días con temperaturas o niveles de humedad extremadamente altos. Si el calor persiste, una recomendación útil es orientar el ventilador hacia el techo. Esto mejora la distribución del aire en la habitación, haciendo que la sensación térmica sea más agradable. Además, mantener las ventanas abiertas ayuda a expulsar el aire caliente acumulado y a renovar la ventilación del hogar.
Aunque este truco no reemplaza por completo al aire acondicionado, ofrece una solución accesible y de bajo costo para mantener la casa fresca. Con materiales simples y un uso inteligente del ventilador, es posible combatir el calor sin aumentar significativamente el consumo eléctrico, una ventaja que se sentirá tanto en el confort diario como en el pago de los servicios.
Primeros auxilios clave ante un golpe de calor
-
Trasladar a la persona a un lugar fresco y sombreado, preferiblemente con aire acondicionado y quitarle exceso de ropa si la tuviera, dejarla con algo holgado y liviano.
-
Hidratar con agua fresca ofreciendo pequeñas cantidades. No se recomienda el uso de gaseosas ni bebidas alcohólicas.
-
Utilizar compresas frías en cuello, axilas, muñecas y tobillos. También se puede mojar o rociar la piel con agua fresca y usar un abanico para ayudar a reducir la temperatura corporal.
Cómo prevenir un golpe de calor
"Prevenir los golpes de calor es posible con medidas simples pero eficaces. Evitar la exposición al sol en las horas de mayor intensidad, vestir ropa ligera y clara, usar sombreros y protector solar son prácticas fundamentales. Además, mantenerse hidratado constantemente con agua fresca y limitar actividades físicas intensas en ambientes calurosos son estrategias clave. La planificación y el autocuidado son aliados esenciales para disfrutar del verano sin riesgos", señalaron desde Boreal Salud.
Lo fundamental es reconocer las señales de alarma que indican la necesidad de atención médica inmediata. Una temperatura corporal superior a 39-40 °C, confusión, dificultad para respirar, convulsiones o pérdida de conciencia son síntomas graves. Si la persona no mejora con los primeros auxilios iniciales, se debe buscar ayuda médica urgente. Actuar con rapidez puede prevenir complicaciones potencialmente fatales y garantizar una recuperación segura durante la temporada estival.