La capacidad de las tortugas de vivir más de 100 años siempre llamó la atención de las personas, especialmente de la comunidad científica. Finalmente, la ciencia pudo encontrar una respuesta a por qué las tortugas pueden vivir tantos años.
Las tortugas son unos de los pocos animales tan longevos que pueden vivir más de 100 años. Las tortugas terrestres de especies comunes viven entre 50 y 100 años, mientras que algunas otras especies, las tortugas gigantes terrestres Galápagos, las de Aldabra o las acuáticas, pueden superar los 100 años. Esta capacidad de longevidad tiene una explicación científica.
Por qué las tortugas viven más de 100 años: la explicación científica
Según la ciencia, hay muchas razones por las que las tortugas viven tanto. Algunas de ellas son las siguientes:
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Su tipo de sangre y su metabolismo lento: Las tortugas son de sangre fría y tienen un metabolismo extremadamente lento. Esto hace que sus cuerpos consuman energía a un ritmo más bajo, reduciendo el desgaste de sus células y prolongando su vida.
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Regeneran sus células y combaten el estrés oxidativo: Muchas especies de tortugas tienen la capacidad de regenerar tejidos y órganos dañados, lo que hace que se recuperen más fácilmente. Además, producen menos cantidad de radicales libres (moléculas dañinas que aceleran el envejecimiento), haciendo que tengan una mayor resistencia al estrés oxidativo.
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Tienen menor riesgo de sufrir enfermedades: Como sus células se regeneran, sufren menos enfermedades durante toda su vida.
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Buena genética: Teniendo en cuenta todas estas características, la genética de las tortugas es mucho mejor que la de otros animales.
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Miles de crías de tortugas fueron liberadas por ola de calor en Perú
Unas 3.200 crías de taricayas, una clase de tortuga acuática, fueron liberadas tras un periodo más corto de lo previsto de incubación debido a un aumento del calor y sequía en la amazonía de Perú, dijo una bióloga de un programa ambiental. Los huevos de las tortugas habían sido recolectados en playas de ríos de la región amazónica de Loreto en el marco de un plan para repoblar la especie, amenazada por la caza indiscriminada.
"Este año hemos experimentado una sequía un poco fuerte, ese es el caso por el cual ha habido un porcentaje de eclosión un poco alto, con respecto a los años anteriores ya que el sol está demasiado fuerte y se ha producido la eclosión un poco rápido", dijo la bióloga Zabryna Pipa Perea, del programa Amarumayu, una iniciativa privada para mantener las especies de la amazonía.
Las tortugas, de caparazón pardo u oliváceo, llevan el nombre científico de Podocnemis unifilis, pero los peruanos las llaman taricayas. Tienen manchas amarillas y escamas negras y los bebés miden solo un par de centímetros. Perú tiene la segunda mayor parte de territorio de la selva amazónica, después de su vecino Brasil.
Pipa afirmó que normalmente el periodo de eclosión de la taricaya en la provincia de Maynas, de Loreto, es de entre 60 y 72 días, pero que este año se redujo a alrededor de 45 días. Perú enfrenta desde inicio de año los efectos del fenómeno climático de El Niño, que produce un aumento de temperatura del mar Pacífico y ocasiona fuertes lluvias en la costa, al tiempo que desencadena olas de calor y sequías en otras partes del país sudamericano. Los científicos coinciden en que la conservación de la selva amazónica es vital para evitar un cambio climático catastrófico debido a su capacidad para absorber gases de efecto invernadero.