Esta plaza turística cuenta con innumerables actividades para realizar en todas las estaciones del año, por eso es que hay que viajar más de una vez a la provincia para poder conocer cada uno de sus rincones. La gran capacidad de hoteles en Mendoza, hace que puedas planificar diferentes viajes de fin de semana, como así también de estadías un poco más largas para poder descubrir más del encanto de la región.
Para una primera vez en provincia, es recomendable poder hospedarse en hoteles en Mendoza capital, ya que esto les permite a los turistas encontrarse con una hermosa ciudad con todos sus encantos, pero a su vez se encuentra cerca de la Zona Alta del Río Mendoza que abarca parte de Las Heras, parte de Maipú y Luján de Cuyo. Desde la capital a diario salen distintos tours que te llevan a conocer diferentes bodegas y olivícolas, en donde los pasajeros realizan visitas guiadas y pueden probar los distintos productos que se ofrecen en cada uno de ellos.
En cuanto a los hospedajes, al contar con una variada plaza en lo que respecta a hoteles en Mendoza cada turista puede organizar su viaje en cuanto a las características de su poder adquisitivo, sin la necesidad de tener que gastar grandes sumas para pasar unos días por la provincia y conocer sus encantos. En lo que respecta a la ciudad, los lugares más destacados para visitar son el Cerro de La Gloria, que se encuentra dentro del Parque San Martin, un pulmón verde de 17 kilómetros de extensión que permite poder bajar las temperaturas del aire en las temporadas más calurosas, la Plaza independencia y el Parque Cívico, son solo algunos de los sitios a recorrer.
Otras actividades que quedan por fuera de Mendoza capital, pero hospedándose en dicha ciudad quedan relativamente cerca para poder trasladarse con algún tour o en auto, son las Termas de Cacheuta, un complejo termal que cuenta con piletas a diferentes temperaturas a la vera del río Mendoza, en las que se puede realizar trekking, rappel o rafting, este último más acercándose hacia el verano, que es cuando más caudal de agua se libera. Sobre la misma ruta se encuentra el Embalse de Potrerillos, un sitio creado como consecuencia de la construcción de la represa sobre el río Mendoza, con un imponente paisaje de montañas que rodean al espejo de agua.
Dentro de los recorridos por los distintos rincones de la provincia la Ruta 7, la que lleva al cruce a Chile, tan solo son 120 kilómetros los que separan a la capital mendocina de Uspallata, una ciudad con muchos rasgos característicos de los pueblos originarios que habitaron dicho suelo. Por la misma ruta, se puede llegar hasta la Cordillera de Los Andes, pasando por Los Penitentes, el Parque Aconcagua y el Puente del Inca, antes de llegar al país trasandino.
La Reserva Natural Villavicencio, es otro de los sitios característicos contemplados por el turismo, ya que a menos de 50 kilómetros de Mendoza capital, se encuentra un increíble lugar, con un paisaje imponente, pero por sobre todas las cosas, importante desde el punto de vista ecológico, ya que en esta se preserva una importante parte de los recursos hídricos con los que cuenta esta provincia desértica
Retomando la ruta del vino, pero ya alejándonos de la capital tenemos la región del Norte Mendocino, donde prevalecen las creaciones de vinos blancos, como el Torrontés, única uva nativa de nuestro país, el Chenin o el Ugni Blanc, tenemos los departamentos de Guaymallén, Lavalle y abarca hasta la zona norte de Maipú. Ya en la Zona Este, tierra favorable para las uvas que dan lugar a los Syrah, Bonardas y Tempranillo, está compuesta por La Paz, San Martín, Rivadavia, Junín y Santa Rosa.
La Zona sur, compuesta por una parte de General Alvear y San Rafael, cuenta con una inmensa diversidad de diferentes plantaciones ya que cuenta con la posibilidad de crear tanto vinos tintos, como también blancos, abastecida de agua gracias al río Atuel y el Diamante. En la primera de las variedades podremos encontrar Pinot Noir, Cabernet Suavignon, Malbec, Merlot y Syrah, mientras que, dentro de los blancos, tendremos Semillón, Chardonnay Chenin y Sauvignon blanc.
Por último, pero no menos importante, otra de las zonas más conocidas y promocionadas es la del Valle de Uco, que abarca los departamentos de Tupungato, San Carlos y Tunuyán, y al igual que la Zona Sur, se pueden encontrar variedades en las cepas de las uvas, con la posibilidad de producir vinos blancos y tintos. Semillón, Chardonnay y Suavignon Blanc, son los máximos exponentes de la zona en cuanto a los blancos, mientras que para los tintos se producirán Malbec, Merlot, Cabernet Suavignon y Barbera.
En el caso de los Olivos, con el tiempo han ido perdiendo terreno y espacio dentro de la consideración de los productores para cosechar, pero sigue siendo otro de los atractivos con los que cuenta Mendoza en su faceta gastronómica. La aceituna Arauco es la variedad más conocida que puede ser hasta el 50% en la producción de un aceite, aunque luego se cuentan con 10 variedades más posibles en nuestro país, aunque en el mundo existen más de 2000 especies distintas.
Denominada la Tierra del Sol, debido a su bajo nivel de precipitaciones durante el año, recibe a miles y miles de turistas que disfrutan de cada uno de sus rincones. Viajar a Mendoza de vacaciones es ideal para aprovechar toda y cada una de los diferentes atractivos con los que cuenta a lo largo y a lo ancho de la extensión de su territorio, tanto con deportes aventuras, paisajes soñados y una gastronomía que nada tiene para envidiarle a otras partes del mundo.