Mientras se agita como un gran triunfo que la inflación de abril haya llegado a un dígito, los salarios y estipendios del sector científico y tecnológico no sólo no se recuperan sino que no parecen encontrar un piso. En el Conicet, dado que no tuvieron aumento nominal, ese descenso el mes pasado fue del 8,11%, lo que equivale a un 26,14% en los primeros cinco meses de la nueva gestión.
Los salarios universitarios tuvieron un aumento nominal del 8%, pero en términos reales descendieron un 0,76% y acumulan una caída del 28,51% real desde noviembre.
Los salarios públicos tampoco tuvieron alzas nominales: cayeron 8,11% en abril y suman un 15,8% en el mismo lapso. En el contexto de una inflación del 289,4% interanual (107,1% desde que asumió el nuevo gobierno), los estatales tienen hoy el 51% del poder de compra que tenían en diciembre de 2015.
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Tales son las conclusiones del análisis realizado por el grupo Economía. Política. Ciencia (EPC), que integra el Centro Iberoamericano de Investigación en Ciencia, Tecnología e Innovación (Ciicti), creado en diciembre y alojado en la universidad Nacional de La Plata (UNLP) y la Universidad Nacional de San Martín (Unsam). Dirigido por el ex Ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus, se plantea promover la investigación en estudios sociales de la ciencia e incidir en la formulación de políticas científicas.
“Empezamos a armarlo en diciembre, pero recién hace aproximadamente un mes salió la firma de las universidades –cuenta Gabriela Dranovsky, filósofa de formación y codirectora del Ciicti–. Estos análisis los hacemos tomando información oficial de la página de presupuesto abierto del Ministerio de Economía, con datos del Indec y con el dato de la inflación. Elaboramos tres informes mensuales sobre salarios, sobre qué pasó con el presupuesto y otros aspectos ‘macro’ de ciencia y tecnología que se dan a conocer en una fecha predeterminada. Estamos tratando de crear algo así como un Indec de la ciencia”.
El Ciicti, que cuenta con financiamiento de organismos internacionales, se plantea realizar análisis de los sistemas científicos de la Argentina y de América Latina, pero también de España y Portugal. “Estamos firmando convenios con distintos países”, explica Dranovsky, que fue Subsecretaria de Evaluación de la gestión de Daniel Filmus y tuvo a su cargo el programa de 23 proyectos de alto impacto sobre temas estratégicos, que iba a otorgar subsidios de un millón de dólares para cada uno a lo largo de cuatro años (https://www.eldestapeweb.com/sociedad/ciencia/23-proyectos-cientificos-de-alto-impacto-recibiran-subsidios-de-hasta-un-millon-de-dolares-20238821430). La Comisión Directiva del nuevo centro también incluye a Fernando Tauber, rector de la UNLP y a José Luis Zárate, de la Unsam.
Con una pérdida de un 26,14% real, los salarios del Conicet retrocedieron a niveles de agosto de 2021, con lo que se revirtieron los efectos de las últimas cuatro jerarquizaciones del organismo. “La política hacia el sector parece bastante dirigida a alcanzar antes del tercer trimestre el nivel salarial de 2019”, afirma el EPC.
En la misma medida se redujeron los estipendios que cobran los becarios. “Desde mayo de 2021 no se alcanzaba un nivel de ingresos tan bajo, con lo que la evolución salarial contrarrestó en apenas un cuatrimestre el impacto de las últimas seis jerarquizaciones específicas para el sector”, agrega.
En lo relativo al SINEP (Empleo Público), donde se encuentran encuadrados los trabajadores de los diversos organismos científicos y tecnológicos, tampoco tuvieron incrementos durante abril, de forma que cayeron un 8,11% en el mes y llevan una caída de 15,80% real desde noviembre de 2023. Es decir, que están en un mínimo histórico: se redujeron a la mitad en poco más de 8 años.
Algo similar ocurre en las universidades nacionales. Tomando como cargo testigo el de profesor adjunto con dedicación exclusiva y 10 años de antigüedad, aunque tuvieron un aumento nominal del 8% durante el último mes, en realidad están un 28,51% por debajo del umbral de ingresos de noviembre de 2023 y en los últimos cinco meses permanecen 35,9 puntos reales por debajo del nivel de diciembre de 2015.
En suma, se verifica una caída general de los sueldos del sistema nacional de ciencia, tecnología e innovación. “Tomando como base noviembre de 2023 (último mes liquidado por la anterior gestión), el escalafón del empleo público (SINEP) perdió 15,80% en términos reales, los sueldos y estipendios del Conicet 26,14% real y los investigadores en UUNN un 28,51%”, concluyen.
Todo esto, sumado la reducción de las becas de doctorado, los despidos, la destrucción de organismos y la paralización de obras en marcha y proyectos de investigación no puede sino configurar un caldo de cultivo para una nueva fuga de cerebros en momentos en que la mayoría de los países de la región intensifica sus esfuerzos para el desarrollo de sistemas científicos nacionales.
Dice Filmus: "Sin lugar a dudas, la caída del salario de investigadores y becarios va tener graves consecuencias para la ciencia y la tecnología argentinas. Una porción importante de ellos buscará horizontes nuevos fuera del país. Especialmente los más formados y los más jóvenes. Ello significará la paralización de muchos de los más importantes proyectos de desarrollo científico que tienen años de esfuerzo e inversión, pero principalmente la pérdida de un enorme capital que la Argentina invirtió en su formación y que gratuitamente estaremos 'donand' a los países centrales. Después de que a través del programa Raices logramos repatriar a más de 1500 científicos, volveremos a perder lo mejor de nuestra capacidad profesional. Es necesario cumplir con la leyes de financiamiento y el plan 2030, votadas por unanimidad en el Congreso y terminar con los procesos pendulares para avanzar hacia políticas de Estado".
Se puede acceder al informe completo en https://grupo-epc.com/wp-content/uploads/2024/05/epc-iescyt-n.7-abril-2024.pdf
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