En el marco del avance del Plan Estratégico de Vacunación contra el COVID-19 en la Argentina, el Gobierno nacional incluyó la vacuna de Moderna a los esquemas de inoculaciones y al estudio federal para evaluar la combinación de dosis en un mismo esquema de los fármacos contra la enfermedad que ya se aplican en el país, según informó el Ministerio de Salud.
Se trata de una investigación que evalúa la inmunogenicidad y seguridad del uso de dos dosis distintas de las vacunas contra el virus SARS-CoV-2, y compara esquemas de vacunación heterólogos y homólogos, detalló la cartera de Salud. En tanto, el objetivo del estudio es alcanzar evidencia científica nacional para poder decidir la utilización o no de diferentes dosis en un mismo esquema de las vacunas disponibles al momento en el país: AstraZeneca, Moderna, Sinopharm y Sputnik-V. El ensayo también compara los resultados entre los esquemas de vacunación heterólogos y homólogos.
En este sentido, la ministra de Salud, Carla Vizzotti, remarcó que "han definido incorporar la vacuna Moderna en los estudios que buscan determinar la seguridad e inmunidad en la combinación de vacunas”. “Avanzar en la producción de evidencia científica, en este sentido, es muy importante de cara a contar con un abanico mayor de posibilidades para alcanzar esquemas completos en el menor tiempo posible”, enfatizó.
Cómo es el estudio de combinación de vacunas que incluye a Moderna
El estudio, en tanto, es abierto, colaborativo y federal, en el que participan investigadores de la Unidad Coronavirus del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación; del Conicet; y de las provincias de Buenos Aires, Córdoba, La Rioja, Mendoza y San Luis. Los voluntarios del estudio son mayores de 18 años vacunados con una dosis de vacuna Sputnik V, AstraZeneca o Sinopharm hasta 60 días previos a su enrolamiento, con y sin factores de riesgo identificados para la Covid-19 que permanezcan en la jurisdicción donde se inició su estudio hasta el final del mismo.
De la investigación están excluidas las personas con inmunocompromiso por enfermedad de base o por tratamiento inmunosupresor; las personas gestantes y en período de lactancia, quienes están registradas en el Sistema Integrado de Información Sanitaria Argentino (Siisa) por haber padecido coronavirus (sintomático o asintomático); y quienes hayan presentado una reacción alérgica grave (anafilaxia) a cualquier vacuna.
La combinación de vacunas de diversas plataformas requiere una evaluación a través de ensayos clínicos que permitan determinar si los mismos tienen una respuesta similar que los esquemas homólogos ya establecidos. Se trata de una evaluación comparativa de su inmunogenicidad y reactogenicidad (eventos adversos) con estudios que consideren posibilidades de implementación, sean adaptativos y respondan a situaciones de la vida real.
Vacuna Moderna: cuál es su origen y efectividad
La vacuna contra el COVID-19 desarrollada por Moderna & NIH en Massachusetts, Estados Unidos, está basada en ARN mensajero, que consiste la técnica que utiliza una parte de los genes del virus, su ARN, para provocar una respuesta inmune. A diferencia de Pfizer, los viales no requieren una cadena de frío para su almacenamiento, ya que se pueden conservar congelados, a unos -25 o -15 grados bajo cero durante un tiempo máximo de 7 meses, o refrigerados, a una temperatura de entre 2 y 8 grados centígrados durante 30 días como máximo. Asimismo, pueden estar hasta 12 horas a temperatura ambiente, a unos 25 grados aproximadamente.
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Respecto a su efectividad, según la evidencia de los ensayos clínicos, la vacuna de Moderna presenta una eficacia del 94,5% con dos dosis en una distancia entre ambas de 28 días. Mientras que, según un estudio de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos, la vacuna tiene un 80% de efectividad con una única dosis, aunque se recomienda administrar las dos dosis.
En tanto, la fórmula producida por la farmacéutica estadounidense Moderna, es la segunda vacuna contra el COVID-19 aprobada en Europa. La Comisión Europea la autorizó el 6 de enero de 2021 luego de la revisión de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) y se empezó a administrar el 16 de enero