Luego del pedido de la fiscal de Instrucción N° 3 de Posadas, Adriana Marcela Herbociani, con el objetivo de conocer la ubicación exacta y la posterior detención del femicida Fabián Tablado, autor del brutal femicidio de Carolina Aló, el autor del brutal crimen de las 113 puñaladas apareció. "Tengo la pulsera colocada. Yo el viernes pasado fui a trabajar en Hipólito Yrigoyen y se perdió la señal por la geografía del lugar. No es que yo intenté evadir, fugarme o como dicen que estuve en Bernardo de Irigoyen... Nada que ver, pedí disculpas por el malentendido", manifestó en una entrevista televisiva.
"El tema es el siguiente: yo el viernes pasado fui a trabajar en Hipólito Yrigoyen, no Bernardo de Irigoyen como dicen. Y se perdió la señal por la geografía del lugar. Yo no tengo necesidad de informar, lo único que yo no puedo hacer es ir a Buenos Aires, acercarme a 300 kilómetros del denunciante. Pero yo fui a trabajar allí", indicó en diálogo con Crónica TV.
En esa línea, Tablado sostuvo que "no hay forma de sacar la tobillera, la tengo puesta, estoy a derecho" y que solo se trató de una pérdida de señal del dispositivo que controla su ubicación. "Quizás por las condiciones climáticas de Misiones, no olvidemos que estamos bajo una nube de humo hace varios días por los incendios. La zona donde fui es del interior, de pueblo. Cuando desde el personal policial me comunican que habían perdido la señal, inmediatamente tomé un micro y me vine a Posadas. No es que yo intenté evadir, fugarme o como dicen que estuve en Bernardo de Irigoyen... Nada que ver", aclaró.
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Tras ser condenado a 24 años de prisión, el femicida de las "113 puñaladas" salió en libertad durante el 2020, bajo una serie de normas que transgredió en repetidas ocasiones. A pesar de ello, nunca fue sancionado. Ahora, tras fijar domicilio en la provincia de Misiones, rige una alerta máxima: desde el viernes pasado no lograban ubicarlo y luego de perder la señal de la tobillera electrónica, la Policía de Misiones comenzó con operativos y movimientos para localizarlo.
"Salgo a dar la cara, no me fugué, no soy una persona que está en rebeldía, el equipo lo tengo funcionando correctamente. Ha sucedido muchas veces que pierde señal, no es por mi culpa, a veces se caen los sistemas como pasa con los teléfonos o WhatsApp. Lo que yo tengo es un teléfono y lógicamente a veces se va la señal. En mi celular tengo el número del Servicio Penitenciario Bonaerense, donde a veces me llaman y me notifiquen sobre la señal. Es la misma señal la de la tobillera y la del teléfono", indicó Tablado desde la puerta del lugar donde reside.
Más allá del pedido de detención realizado por la fiscal Adriana Marcela Herbociani, el condenado dijo desconocer que exista un pedido de detención en su contra y que lo único que hizo fue "ir a trabajar, ya que estoy aprendiendo un oficio -tapicería- y tratando de sobrevivir" después de reinsertarse socialmente. "Yo estoy muy arrepentido de lo que pasó, le pido a Dios por todas las personas que yo dañé. Por la familia. Estoy muy arrepentido. Dios conoce mi corazón y me arrepiento adelante de él es sincero. Estoy dentro de una fundación cristiana, siempre estuve acá, tratando de aprender un oficio y de incluirme a la sociedad", concluyó.
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