Este fin de semana se cumplió un mes del femicidio de Catalina Gutiérrez que ocurrió en la provincia de Córdoba y que conmocionó a todo el país. Con profundo dolor, el padre de la influencer apuntó contra el acusado Néstor Aguilar Soto y manifestó que quiere que sufra “el doble” de lo que está sufriendo la familia de la joven. “Un mes sin tener a nuestra hija. Todo ese futuro. No lo podemos creer. Estamos destruidos, tratando de salir adelante”, expresó Marcelo Gutiérrez.
El cuerpo de la estudiante de arquitectura de 21 años fue encontrado durante la madrugada del jueves 18 de julio en el asiento trasero del auto Renault Clio de su madre, en el barrio Ampliación Kennedy, en la zona sur de la ciudad de Córdoba. Tenía signos de haber sido brutalmente golpeada y algunas quemaduras, que surgieron como consecuencia de que el agresor intentó incendiar el vehículo.
Hasta el momento, Soto es el único acusado: era amigo de la víctima, cursaban juntos la carrera en la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) y hasta compartían el mismo grupo. También tiene 21 años y es oriundo de Bariloche, provincia de Río Negro. Un día después del hallazgo del cuerpo de la joven, el acusado se presentó ante la Justicia para declarar como un conocido y terminó confesando el crimen. “Era el amor de mi vida”, declaró. La investigación determinó que, tras cometer el homicidio, el asesino regresó a su casa para lavar la ropa y después se encontró con el grupo de amigos de la facultad con los que fingió preocupación por la ausencia de la joven.
Además, efectivos policiales hallaron un anillo que la joven estudiante habría perdido al querer defenderse y pelos de la influencer en diferentes puntos de la vivienda del joven. Tras haber admitido la autoría del aberrante hecho, Soto, quien estaba alojado en el penal de Bouwer, fue trasladado de pabellón en la cárcel Reverendo Francisco Luchesse de Córdoba para "estar con reclusos de baja peligrosidad".
En un principio estaba imputado por "homicidio simple", pero la acusación se agravó días después. El único detenido ahora es investigado por homicidio calificado por alevosía y por mediar violencia de género. Si se lo encuentra culpable por femicidio, la única pena posible es la de prisión perpetua. La causa está en manos de la Fiscalía de Instrucción Capital, Distrito 3.
Gastón Schönfeld, el abogado defensor del sospechoso, aseguró el pasado 2 de agosto: “Dijo que fue él”. Según su testimonio ante el fiscal José Mana, Soto afirmó: “Yo la maté, le arruiné la vida a Catalina, me arruiné la vida, arruiné la vida de nuestras familias y estoy muy arrepentido”.
Femicidio en Córdoba: el padre y la hermana de Catalina pidieron justicia
En declaraciones a El Doce, Marcelo Gutiérrez exigió “la justicia que le corresponde por la barbaridad que hizo”. El padre de la víctima reveló en distintas entrevistas que Soto había visitado su casa en reiteradas oportunidades, que compartía tiempo con su hija y que, previo a su confesión, se presentó en la comisaría para apoyarlos en medio de la conmoción por el hecho. Allí abrazó a la madre de la estudiante a modo de consuelo. “Es macabro, solo una mente demencial pudo haber hecho esto”, agregó.
“Ni un animal es capaz de hacer algo así. Después de cometer semejante hecho horroroso, ir a abrazar a la madre de una persona que vos mataste, queriendo engañar a todos”, expuso.
Por su parte, la hermana de la víctima, Lucía Gutiérrez, contó también cómo ayuda a sus padres a transitar el duelo tras el crimen. “Estamos en esta más unidos que nunca para salir adelante como se pueda, si es que se puede en algún momento”, dijo la joven, en diálogo con el mismo medio. En esa línea, señaló: “Sé que está conmigo, la siento conmigo y eso me da un poco de tranquilidad, pero es muy duro y muy triste. Estoy acompañando a mis papás y tratando de salir los tres juntos”.
Horas después de realizar una publicación en sus redes sociales, la joven mostró un homenaje que le hizo a su hermana: se tatuó su nombre en la parte interna del brazo. Al compartir el gesto de amor, manifestó que tiene “el alma partida en mil pedazos”. “No hay palabras para el dolor inmenso que siento. Ayudame, dame fuerzas, no me sueltes que sin vos no puedo. Sigo por vos, lucho por vos, por y para siempre”, escribió y reclamó: “Justicia, justicia y justicia por vos" hermosa”.