Según un informe realizado por el Observatorio Hacer Educación, a 40 años de democracia en la Educación Argentina, la polarización de la política o la tan conocida "grieta", iniciada en el año 2008, atravesó los problemas educativos del país y generó complejidades y contradicciones a la hora de construir consensos y sancionar leyes. Esto creció aún más en el último tiempo, luego de que la coalición opositora decidiera no colaborar desde el Congreso.
Dentro del mismo documento señalan que, entre 1983 y 2022, se sancionaron un total de 321 leyes educativas. "Al desagregar esta información por década se registra una progresiva merma en la cantidad de leyes sancionadas, en simultáneo con un aumento significativo de los procesos no sancionados", señalan. Y añaden que durante los años '80, el campo educativo y tecnológico "fue fiel reflejo del proceso general de redemocratización"; mientras que en los '90, al igual que a nivel económico, se realizaron fuertes reformas educativas.
Por su parte, desde el Observatorio -dependiente de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires- caracterizan al período entre el año 2000 y el 2009 como "un proceso de reversión y/o modificación (parcial)" de los cambios que se dieron la década anterior. Además tildan de "exagerado" calificar a dichas reformas como estructurales pero sí destacan el fin del polimodal, el retorno al esquema primaria-secundaria, la obligatoriedad de la escuela secundaria, la creación de Universidades Nacionales y el mínimo de 180 días de clases, entre otros, como puntos claves.
Las últimas dos etapas que analizan son las de 2010-2019 y 2020-2022, donde remarcan que existe un "progresivo estancamiento" en lo que tiene que ver con los niveles de productividad legislativa; algo que lógicamente se refleja en la cantidad promedio de leyes sancionadas y los proyectos que quedan estancados.
"A modo de hipótesis, es posible imaginar que la tan mentada polarización que, desde aproximadamente 2008 y en forma creciente, caracteriza a nuestro sistema político ha redundado, en materia de ECyT, en pocas leyes sancionadas", sostienen. Y añaden: "Predominan durante esta etapa decretos y/o resoluciones, que sin desmerecer su importancia, abordar más bien cuestiones puntuales y específicas y no representan un cambio sistémico".
Si bien señalan que la productividad legislativa fue variando a lo largo del tiempo, sostienen que "llama la atención que el estancamiento normativo ocurre en simultáneo con un diagnóstico extensamente compartido respecto de la crisis por la que atraviesa la educación en la Argentina" y agregan que el sistema político "no está siendo capaz de alcanzar los consensos mínimos necesarios para emprender un camino de reformas" que logren resolver los problemas y las demandas del sistema.