El dengue, el zika y la fiebre chikungunya son enfermedades virales que se pueden transmitir luego de sufrir la picadura del mosquito Aedes aegypti. En principio sus síntomas son similares pero evidentemente la forma de atacar al organismo es distinta. ¿Cuáles son sus diferencias y cómo tratarlas correctamente?
Chikungunya, dengue y zika: diferencias, síntomas y tratamiento
Es importante tener presente que a diferencia del dengue y la fiebre chikungunya estas solo se transmiten debido a la picadura de un mosquito. En este sentido, el zika también se contagia por medio de las relaciones sexuales. Por este motivo es importante contar con medidas preventivas para evitar contraer estas enfermedades.
En primer lugar, el dengue tiene un cuadro que puede confundirse con otras enfermedades ya que este cuadro genera fiebre, sarpullido y malestar. Es importante estar muy atento a estas sensaciones para evitar alguna consecuencia grave. En caso de tener síntomas representativos es necesario acudir inmediatamente a un centro médico.
El zika, por su lado, se manifiesta de una manera más moderada durante los 3 a 12 días posteriores a su contagio. La fiebre, dolores de cabeza y malestar en diferentes articulaciones del cuerpo están acompañados por conjuntivitis y la inflamación de miembros inferiores. Se debe tener presente que esta enfermedad puede tener generar algunos inconvenientes neurológicos.
Por último la fiebre chikungunya, presenta una temperatura mayor a los 38°C. Es acompañada por un dolor en las articulaciones que puede generar inflamaciones. Sus síntomas pueden estar presentes de 3 a 7 días luego de la picadura del mosquito. En algunos casos estos dolores continúan por mucho tiempo y varios de los pacientes presentan mejorías después de una semana de haber contraído la enfermedad.
Lo que tenés que saber del mosquito Aedes aegypti
En el territorio nacional en la actualidad existen más de 200 especies de mosquitos. Teniendo presente esta situación solamente el Aedes aegypti es el encargado de transmitir este tipo de enfermedades. Es importante tener en cuenta que durante el periodo invernal se reduce su actividad debido a que con temperaturas de -12° permiten su muerte en compañía con la de sus larvas. Pero no hay que confiarse debido a que sus huevos pueden superar bajos escenarios y hasta incluso aguardar a climas ideales para poder desarrollarse. Por ello es importante que mantengas tus espacios aireados y sin acumulación de basura o agua potable, componentes que benefician su propagación.
El mosquito Aedes aegypti no se cría en charcos o pozos de agua. Su hembra deja los huevos en paredes o dentro de recipientes que acumulen agua. Por ello, sus larvas se desarrollan dentro de macetas, bebederos de mascotas, baldes o tanques de agua con exposición constante a este líquido vital. Por lo tanto, como medida de seguridad es clave que se realice una limpieza frecuente a estos recipientes para así evitar su propagación.