En el Parque Tres de Febrero, en Palermo, se encuentra un lugar con un encanto especial, el Patio Andaluz. Esta curiosa construcción, inaugurada en 1929, fue un regalo del Ayuntamiento de Sevilla a la Ciudad de Buenos Aires. Rodeado de bancos revestidos en mayólica y con una fuente en el centro, este sitio es un verdadero tesoro de la arquitectura española en pleno corazón de la capital argentina.
El proyecto inicial de instalar un Jardín Español en el Parque Avellaneda no se llevó a cabo por cuestiones presupuestarias, pero finalmente se autorizó la construcción del Patio Andaluz en el Parque Tres de Febrero. La donación llegó desde Sevilla en barco y fue trasladada por la fábrica de Sevilla José Laffite, reconocida por su artesanía en cerámica y baldosas de alta calidad.
Las columnas y rejas metálicas fueron provistas por la fábrica Hijos de Manuel Montes, también de Sevilla. Además, se utilizaron baldosas de gres rojo provenientes de Marsella y otras de borde perimetral desde Italia.
El diseño del Patio Andaluz del Roseldal cuenta con una planta rectangular y una segunda planta en desnivel, a la que se accede a través de pequeñas escaleras. El lugar está decorado con episodios que hacen referencia a la historia de Don Quijote, y está cubierto por una pérgola apoyada en columnas de hierro fundido y pilares de ladrillos rojizos.
A lo largo de sus 95 años de existencia, el Patio Andaluz se convirtió en un símbolo del arte callejero de Buenos Aires, especialmente en la zona de Palermo. Además, en la Plaza Holanda del Parque Tres de Febrero, se encuentran dos esculturas de bronce tituladas "Tigresa portando un pavo real para sus cachorros" y "El león de Nubia y su presa". Estas esculturas, réplicas de obras del escultor francés Auguste Nicholas Cain, embellecen aún más el entorno.
El Patio Andaluz es un verdadero tesoro arquitectónico de Buenos Aires, que nos transporta a la belleza de la cultura española. Es un lugar ideal para disfrutar de un momento de tranquilidad y admirar su exquisito diseño y detalles históricos.
"La Ámsterdam de Buenos Aires": el pueblo mágico para pasear cerca de CABA
Existen muchos un rincones de Buenos Aires que se asemejan mucho a Europa. Ámsterdam, capital de Países Bajos, es uno de los destinos de Europa que muchas personas quisieran conocer. Sin embargo, existe un lugar muy similar ubicado en Buenos Aires.
No es necesario esperar a las vacaciones o juntar grandes cantidades de dinero para hacer un lindo paseo. Los fines de semana largos son ideales para hacer escapadas y conocer pueblos de Buenos Aires que jamás habías visto. Una excelente opción es este pueblo en cuestión, conocido como "la Ámsterdam de Buenos Aires".
Se trata de Laprida, una ciudad ubicada en el centro-sur de la provincia de Buenos Aires que cuenta con alrededor de 12 mil habitantes. Las aguas de su laguna, sus sectores repletos de verde y sus actividades culturales la convierten en un lugar sumamente atractivo para los turistas. Además, su arquitectura es muy similar a la de Ámsterdam, con el agua rodeando las construcciones.
Este pueblo se encuentra a 458 kilómetros de Capital Federal, aproximadamente a 5 horas en auto. Para ir desde CABA, se debe tomar la Autopista Ricchieri hasta el empalme de la Autopista Ezeiza-Cañuelas. Luego, tomar la Ruta Nacional 3 hasta el kilómetro 300, doblar por la Ruta Nacional 266 y agarrar la Ruta Provincial 51, hasta llegar a la Ruta Provincial 86.