Cómo usan las empresas la grafología en los procesos de selección

En el momento de la búsqueda laboral, todos sabemos que las entrevistas son clave para conseguir ese trabajo que solicitamos. Pero, ¿sabías que las empresas pueden estar mirando mucho más allá de tus respuestas o tu currículum? La grafología, una técnica que estudia los rasgos de la escritura, está ganando terreno en los departamentos de Recursos Humanos.

Según la grafóloga Macarena Arnás, autora del libro Grafología, lo que revela tu escritura, la forma en que escribimos puede decir mucho más de lo que imaginamos sobre nuestra personalidad, emociones y aptitudes. Y, lo que es aún más interesante, hoy en día algunas empresas la utilizan para determinar si somos aptos para un puesto específico.

¿Cómo funciona la grafología en los procesos de selección?

Aunque parece una técnica curiosa, la grafología es mucho más que un simple análisis de la estética de la letra. En los procesos de selección, los grafólogos analizan diversos aspectos de la escritura, como el tamaño, la presión de las letras, la velocidad y la forma en que las palabras se conectan entre sí. Esto les permite obtener información sobre el candidato que no se refleja en un currículum o una entrevista.

Según Arnás, la grafología no busca medir la inteligencia ni las habilidades técnicas de una persona, sino aspectos más profundos de su personalidad, como sus ambiciones, su capacidad de compromiso o su nivel de adaptación social.

De hecho, en algunos casos, las empresas solicitan que los candidatos completen un cuestionario o escriban un texto a mano, con el fin de que un especialista en grafología pueda leer entre líneas y detectar rasgos de carácter que no serían tan evidentes de otro modo.

¿Qué revela tu escritura?

Cada letra que escribimos tiene un significado. Según Arnás, ciertos rasgos pueden ofrecer pistas muy precisas sobre cómo nos comportamos en diversas situaciones. Por ejemplo:

• La letra “T”: Si la barra de la “T” es alta, puede indicar una persona con dificultad para aceptar órdenes o que prefiere liderar. Si la barra es baja, sugiere que se trata de alguien con capacidad de ejecución y un enfoque más práctico.

• La letra “F”: Esta letra está relacionada con las ambiciones personales. Una "F" con la parte superior muy enfatizada puede indicar a alguien con grandes sueños o aspiraciones.

• La letra “I”: Conocida por su punto, la "I" puede revelar si una persona es detallista y precisa, o si tiende a ser más despistada y menos observadora.

¿Qué tipo de escritura se relaciona con cada puesto?

Cada tipo de trabajo demanda diferentes características personales, y la grafología ayuda a determinar si un candidato tiene las aptitudes necesarias para cumplir con los requisitos de un puesto específico. 

• Creativos: Si trabajás en áreas como diseño o publicidad, tu escritura puede mostrar ciertos rasgos, como crestas grandes o formas curvas. Esto indica creatividad, imaginación y capacidad de liderazgo. Además, las firmas tienden a ocupar las zonas superiores del papel, lo que refleja un enfoque idealista.

• Directivos: La caligrafía de un líder suele ser más elevada, con letras grandes y barras de “T” altas, lo que demuestra confianza, capacidad de decisión y una personalidad fuerte.

• Freelancers: Los profesionales autónomos, que necesitan trabajar en solitario, tienen una escritura que tiende a ser desligada y con espacios amplios entre las palabras, reflejando su necesidad de independencia.

• Comerciales: Las personas que trabajan en ventas suelen tener una letra ligada, con formas curvas y rúbricas en zigzag, lo que indica que son personas persuasivas, dinámicas y con un buen sentido de las relaciones sociales.