Crisis sanitaria: cuando se debe decidir entre la vida y la muerte

Cada vez son más los hospitales y clínicas que deben activar los comités de Bioética para la toma de decisiones más críticas en medio de la pandemia del COVID-19: quién recibe tratamiento y quién ya no. Cómo se toman estas decisiones vitales, cuáles son los criterios.  

11 de mayo, 2021 | 20.07

Ante el desborde de las terapias intensivas en todo el país por la pandemia del COVID-19, en la mayoría de los hospitales y clínicas ya se activaron los comités de Bioética, un grupo interdisciplinario que asesora al equipo médico en la toma de decisiones en casos críticos ante la falta de recursos. Estas decisiones van desde la asignación de camas hasta la suspensión de tratamientos a pacientes críticos que ya no tienen pronósticos clínicos de vida, una de las decisiones más trágicas a las que se enfrenta hoy el sistema de salud.

Para esto, a medidas de 2020, el Ministerio de Salud de la Nación creó a través de una resolución 1117/2020 el Comité de Ética y Derechos Humanos en Pandemia COVID 19 (CEDHCOVID19) que busca asesorar sobre estas implicancias éticas en la salud pública. El organismo es autónomo y sus integrantes trabajan ad honorem.

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El médico Ignacio Maglio, miembro del Comité e integrante del Equipo de Cuidados Integrales del Hospital Muñiz, dialogó con El Destape y admitió que en estos momentos están frente a la toma de decisiones más trágicas como la suspensión de tratamientos a pacientes más críticos para permitir tener camas en medio del desborde sanitario por la segunda ola del COVID-19.

Crisis sanitaria: cuando se debe decidir entre la vida y la muerte

"En lo particular en el Hospital Muniz creamos el Comité desde donde con un efecto interdisciplinario buscamos dar respuestas a los dilemas que crea la pandemia a nivel hospitalario y en ese sentido ahora nos tocó estar frente a la toma de  decisiones más trágicas como la suspensión de tratamiento en pacientes críticos para permitir tener camas a otros pacientes que necesitan camas y tiene otra expectativas más razonable de recuperación", detalló el profesional.

Es que, con el récord de ocupación de camas de terapia intensiva en el AMBA, los comités de bioética de los hospitales se enfrentan a las decisiones más impactantes: a qué pacientes continúan con el tratamiento para tratar la enfermedad y a quienes ya no. En este sentido, Maglio remarcó que este tipo de decisiones se toman colectivamente y bajo estrictos criterios, análisis del estado clínico del paciente basados en dos objetivos fundamentales que son: la gravedad de la enfermedad y el pronóstico de recuperación.

"Lo que estamos tratando de evitar es lo que pasó en Italia que médicos y médicas tuvieron que tomar esas decisiones en soledad, lo que trajo aparejado una serie de secuelas psíquicas, psiquiatras y morales con mucho peso. Por eso, acá las decisiones son colectivas donde no hay improvisación y se quita cualquier sesgo de discriminación o, por ejemplo, la incidencia de la la edad que no es un criterio de prioridad", explicó Maglio. Es así que el comité define junto al equipo médico las prioridades en medio de la crisis sanitaria con el fin de que "nadie cargue con el peso de una decisión individual". 

Cómo se toman las decisiones sobre la continuidad de tratamientos o no

En este sentido. el Comité de Ética y Derechos Humanos en Pandemia Covid-19 estableció criterios para orientar a las instituciones de la Salud en el proceso de toma de decisiones con un enfoque en derechos humanos que contemple: el respeto igualitario, la no discriminación, transparencia, claridad y criterios de solidaridad, justicia, razonabilidad y factibilidad.

En este marco, Maglio ratificó que los criterios para la toma de decisiones en casos críticos son principalmente transparentes. "Estos criterios son clínicos, básicamente, donde nosotros desde el punto de vista ético recomendamos algunas pautas como por ejemplo: no introducir la edad como criterio de asignación primaria y no introducir ninguna valoración social en cuenta al criterio de priorización".

Es así que cada hospital y clínica debe decidir cuál paciente es prioritario en medio de la situación sanitaria que, según el reporte, mantiene una ocupación de camas en unidades de terapia intensiva del sistema público de salud del 81% quedando sólo disponibles 95 camas de terapia intensiva sobre un total de 500.

Lo cierto es que sí existen criterios de discriminación positiva que tienen que ver con otorgar un favorecimiento a niñas y niños y personas gestantes o trabajadores de la salud. "Esto es así porque entendemos que deberían ser prioridades en el uso de estos recursos", aclaró. "Pero por sobre todo creemos que todas las personas merecen respecto y dignidad y en ese sentido todas merecen el mismo trato", completó.

Nuevos aportes del comité de bioética en el marco de la pandemia en Argentina

Por otra parte, el Comité de expertos recientemente realizó una serie de aportes para optimizar todas las acciones ante la emergencia, sin dejar de garantizar el respeto de la ética y los derechos humanos. El primer punto analizado fue la reprogramación de la actividad asistencial en el sistema de salud y se llamó a reforzar el primer nivel de atención, que satisface al 80% de la demanda. También se llamó a acceder a los domicilios de las personas con discapacidades, que cada centro hospitalario se genere una comisión de cirujanos y especialistas para revisar los casos de cirugía programadas, y se brindó además una serie de recomendaciones para los pacientes ambulatorios.

El segundo punto a tratar fue la polémica generada por la presencialidad educativa. En ese sentido, los expertos señalaron que es importante que se reconozcan las múltiples formas de presencialidad, que van más allá de la física. A su vez, consideraron que sigue siendo necesaria la suspensión de las clases presenciales hasta que se verifique un descenso significativo en el número de contagios. Además, reclamaron que se trabaje intensamente para completar la vacunación de los docentes en todas las jurisdicciones.

Crisis sanitaria: cuando se debe decidir entre la vida y la muerte

Por último, se analizó el impacto que genera en la población algunas informaciones falsas o engañosas vertidas por los medios masivos de comunicación. Bajo el nombre de iatrogenia informativa, los expertos consideraron que se trata de una enorme falta de responsabilidad que no solo implica un daño moral, sino que también pone en riesgo la vida de las personas, como ocurrió con algunos contenidos erróneos que se difundieron sobre las vacunas.

Estos aportes fueron presentados por el Comité de Bioética a la ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, que se comprometió a acercar el documento al Presidente de la Nación, Alberto Fernández, ya que contribuirá a tener una mirada integral que ayude a la toma de decisiones en medio de la pandemia. “El Presidente sabe del esfuerzo y dedicación del trabajo que están realizando. El texto toca justamente tres temas que son de su primordial interés y contar con esta documentación va a ser muy importante”, aseguró.
 

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