La comunidad científica tecnológica argentina continúa dando pasos certeros en la lucha contra el COVID-19 y avanza con estrategias para la detección de la enfermedad y evitar su circulación y contagio con la producción de insumos para el diagnóstico, monitoreo, tratamiento y prevención.
En este marco, la empresa PS Anesthesia SA y la Universidad Nacional de La Plata, con ayuda del Gobierno nacional, elaboró el primer hisopo de producción 100 por ciento argentino para la obtención de muestras en pacientes y su posterior compatibilidad con la técnica de detección (PCR) que fue aprobado, recientemente, por Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT).
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En qué consiste el hisopo nacional para testeos
Se trata de un hisopo nasofaríngeo monolítico diseñado para alcanzar el tracto respiratorio superior a través de las fosas y tomar mucosa epitelial. Su estructura consta de un mango ergonómico y un extremo con forma de cucharón de miel (acanalado) que facilita la captura de la secreción de las mucosas y se fabrican mediante la técnica de moldeo por inyección.
Dicho hisopo integra un kit de toma de muestra para su uso en la prueba PCR SARS-CoV-2 de bajo costo y reemplaza a los tradicionales hisopos flocados. Pueden ser producidos rápidamente y cuenta con la ventaja de que su manufactura está conformada por una cadena de abastecimiento local, simple y robusta. Durante este proceso, PS Anesthesia adaptó su fábrica en la localidad bonaerense de Brandsen para cumplir con la demanda de este insumo.
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El proyecto, llevado a cabo por el consorcio formado entre la empresa PS Anesthesia SA y la Universidad Nacional de La Plata, recibió apoyo de la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i), a través del Fondo Tecnológico Argentino (FONTAR), a través de un esquema de financiamiento que incluyó una primer etapa del desarrollo mediante subsidio, y una segunda fase a través de un Aporte Reembolsable.
Desde la Agencia de I+D+i apuestan a promover las capacidades nacionales en investigación, desarrollo tecnológico e innovación para encontrar soluciones a los desafíos que se presentan. "Contar con un abastecimiento nacional de estos elementos capaz de satisfacer las demandas del sistema de salud se convirtió en una prioridad porque garantiza una atención correcta a los pacientes, fortalece el testeo y permite la sustitución de importaciones", aseguraron desde la Agencia.
Cómo comenzó el proyecto del hisopo nacional
En este marco, Tomás Echarri, investigador, Magister en Ingeniería Mecánica, docente de la facultad de Ingeniería de la UNLP y representante de la casa de estudios en este desarrollo, detalló que el trabajo de este equipo "comenzó hace un año, cuando Europa estaba atravesando la primera ola de la infección".
El investigador relató, en diálogo con radio Universidad de La Plata, que fueron convocados por la empresa Copan del norte de Italia, líder de producción de insumos de diagnóstico, que comenzó a desarrollar proyectos alternativos para suplir la falta de este insumo en medio de la ola de infecciones. "La empresa se pone en contacto con nosotros y comenzamos el desarrollo de un hisopo alternativo, que no utiliza el flocado característico. Es de polipropileno y tiene cavidades que permiten la captura de material genético suficiente para hacer el diagnóstico posterior", agregó.
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El ingeniero explicó a su vez que "toda la parte de ingeniería recayó en el equipo de trabajo conformado por investigadores de la facultad de Ingeniería, y la parte de prototipado y pruebas de campo, son fundamentalmente responsabilidad de la empresa". "Por la característica del producto, permite generar una gran cantidad de hisopos, en un lapso de tiempo relativamente corto, y a un costo por unidad bajo, por debajo de los hisopos estándar", completó.
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