El oftalmólogo pampeano Tomás Ortiz Basso fue distinguido en el exterior con el prestigioso Premio Richard y Chita Abbott Young Leader 2024, en reconocimiento a su innovador trabajo en el campo de la salud ocular.
La distinción, entregada en octubre en Chicago durante la finalización del Curso de Liderazgo 2022-2024, es un galardón internacional que premia a jóvenes líderes en la oftalmología por sus contribuciones significativas a la medicina y la salud pública. Ortiz Basso, en representación del Consejo Argentino de Oftalmología, fue galardonado por su proyecto denominado “Registro inteligente de visión e investigación en salud” (Rivis).
Este proyecto tiene como objetivo abordar una de las mayores problemáticas sanitarias en Argentina: la retinopatía diabética y el edema macular diabético, dos enfermedades visuales que son responsables de una alta tasa de ceguera en la población en edad laboral.
Este reconocimiento no solo resalta la labor científica de Ortiz Basso, sino que pone en evidencia la necesidad de generar soluciones innovadoras para mejorar la salud ocular en el país, particularmente en lo que respecta a la prevención y tratamiento de afecciones crónicas relacionadas con la diabetes.
El desafío de la retinopatía diabética en Argentina
Según los especialistas, la retinopatía diabética y el edema macular diabético son responsables de una significativa pérdida de visión en los adultos jóvenes y de mediana edad. Sin embargo, a pesar de ser condiciones tratables, la falta de información integral y el acceso desigual a la atención médica dificultan su diagnóstico temprano y su tratamiento adecuado.
En este contexto, el proyecto de Ortiz Basso, Rivis, busca ofrecer una solución que permita recopilar y analizar de manera centralizada los datos de pacientes afectados por estas patologías, lo que facilitaría tanto el diagnóstico como el desarrollo de pautas de tratamiento más efectivas.
El Registro inteligente de visión e investigación en salud tiene como objetivo principal centralizar la información epidemiológica de los pacientes con estas enfermedades, lo que permitirá a los médicos y autoridades sanitarias tener una visión más clara de la magnitud de estos problemas de salud en Argentina.
Además, el proyecto busca mejorar los estándares de atención, impulsar la investigación en salud ocular y contribuir a la formulación de políticas públicas basadas en datos concretos.
¿Cómo funciona el proyecto Rivis?
El proyecto Rivis se basa en la creación de una plataforma que integra datos provenientes de diferentes entornos de atención médica, tales como hospitales públicos, clínicas privadas e instituciones académicas. De esta manera, se garantiza una representación fiel y completa de la población de pacientes que padecen estas enfermedades, sin importar su ubicación o acceso a los servicios de salud. El uso de historia clínica digitalizada y la protección de datos de los pacientes es otro de los aspectos clave de la plataforma, que asegura el anonimato de las personas involucradas.
El sistema está diseñado para ser fácil de usar, lo que facilita su implementación en diversas instituciones, y tiene la capacidad de actualizarse de manera continua, permitiendo el seguimiento de los pacientes a lo largo del tiempo. “El registro es una herramienta flexible que, además de ofrecer datos precisos sobre la epidemiología de estas enfermedades, también promueve la integración de un enfoque multidisciplinario en el cuidado de la salud ocular”, explicó Ortiz Basso.