Bullrich candidata: empieza la campaña en la Ciudad

La ministra de Javier Milei, madrina del traspaso de sus tres legisladores a filas libertarias, empezará a caminar la CABA con miras al 2027. Mauricio no se muestra como candidato. El PRO tiene que definir si negocia con LLA a nivel nacional o si da libertad de acción distrital.

29 de enero, 2025 | 23.56

Patricia Bullrich empezará a caminar la Ciudad de Buenos Aires con la intención de construir una candidatura, la suya. La funcionaria nacional no tiene intenciones de presentarse en las elecciones de este año y, ante la posibilidad concreta de que su archi enemigo Mauricio Macri tampoco se postule, no tiene ningún incentivo para hacerlo. Sí, sin embargo, apunta a quedarse con la CABA en 2027.

Desde hace tiempo, el bullrichismo construye la idea de una candidatura de Patricia para disputarle al PRO de Macri la jefatura de la Ciudad. La gestión de Jorge fue muy cuestionada desde el armado de la ministra, anticipando la verdadera intención del armado: darle un golpe mortal a Mauricio y arrebatarle la Capital Federal.

Como contó El Destape, el plan apunta a construir una propuesta que pueda resultarle atractiva a la Casa Rosada en 2027: Bullrich a la Ciudad, Diego Valenzuela a la provincia. Hasta ahora, la funcionaria nacional no había mostrado demasiado interés por protagonizar una campaña para jefa de Gobierno, pero parece haber sido convencida.

La definición servirá para acomodar una estrategia política y comunicacional, hasta ahora bastante diluida. Patricia, de fuertes críticas a Mauricio, va a tener que moderar un poco su discurso para no ahuyentar a las “Mabeles” porteñas que apoyan al ex presidente en la Ciudad.

La ministra de Javier Milei fue la madrina del salto de sus tres legisladores porteños hacia las filas libertarias. Los diputados capitalinos no sólo dejaron el bloque PRO, donde funcionaban como opositores infiltrados en el oficialismo de Jorge Macri, sino que también abandonarán el partido para pasar a teñirse de violeta. El traspaso había sido conversado y hablado a principios del 2025, por lo que no fue una decisión de último momento. Por ahora, no se reflejará de la misma manera a nivel nacional, para ello habrá que esperar un poco más.

El salto no fue sorpresivo para la dirigencia macrista que, además, le baja el precio al anuncio de posibles pases masivos del PRO a La Libertad Avanza. Si fuera así, dijo una referente, después del anuncio de Diego Valenzuela varios más hubieran tomado la decisión, cosa que no sucedió. Por el momento, los únicos que accionaron fueron los bullrichistas, no considerados parte del partido.

En medio de la confusión, Mauricio no se muestra como candidato. Una fuente de conversación habitual con el ex presidente rechazó, a menos que lo convenzan en el futuro cercano, que pueda postularse. Para el líder del PRO, es momento de aportar desde otro lugar, no desde las boletas. Quienes lo apoyan destacan los gestos que tuvo durante este tiempo y su importancia para ordenar el partido desde un rol de conducción que le pidieron ocupar y que él aceptó.

La mayor presión para que Macri esté presente en una lista amarilla llega desde la Ciudad, acorralada por la exigencia bonaerense de acordar con La Libertad Avanza. Por eso, desde el Gobierno porteño ahora no se descarta un pacto con los violeta. Desde el ecosistema libertario bullrichista por ahora hay bastante confusión. Si algún dirigente lo descartó, otro lo consideró posible.

Al PRO le quedan definir varias cuestiones. En principio, cómo se abordará cualquier acuerdo (de existir) con el gobierno. Todavía no está claro si habrá libertad de acción por distrito o, como confió una referencia amarilla, si se sostendrá la posición manifestada últimamente de abrazar un pacto nacional. Todo o nada.

El macrismo siempre quiso avanzar de ese modo, con un acercamiento general, hasta que Santiago Caputo metió la cola y quiso disputar la Ciudad. El ensañamiento libertario con la Capital Federal lleva a algún dirigente histórico del PRO a preguntarse cuánto más deberían tolerar de ese destrato.

Por ahora, la orden del partido es prepararse para competir en soledad, siempre teniendo en cuenta que está abierta la posibilidad de una alianza con los libertarios. Para los amarillos, la pelota está en campo violeta, dado que son más que claros los gestos PRO para colaborar con el gobierno y llegar a un entendimiento. Después de la sangría y la grieta interna generada por las PASO del 2023 entre dos candidatos macristas, se confía en que el territorio acatará la decisión que se tome desde la conducción.