El actual presidente de la Cámara Federal de Casación Penal, Gustavo Hornos, fue denunciado este jueves por sus reiteradas visitas a la secretaría privada de Mauricio Macri durante el gobierno de Cambiemos. “Que un juez federal interviniente en causas en donde se investiga a funcionarios opositores se reúna en privado con un Presidente de la Nación es, en sí mismo, un hecho escandaloso y digno de investigación judicial”, escribieron en su presentación los diputados Martín Soria, Rodolfo Tailhade y Eduardo Valdés. Y resaltaron que cada una de las seis visitas registradas en Casa de Gobierno “estuvieron proseguidas por fallos emitidos por ese magistrado que, sin ninguna excepción, agravan la situación procesal de funcionarios o personas opositoras al Gobierno de Macri”.
Los diputados del Frente de Todos realizaron una ampliación de denuncia en la causa de la Mesa Judicial Pro, que tramita en los tribunales de Comodoro Py y tiene imputados a Macri y su mesa chica. Los legisladores requirieron como medidas de prueba que se analicen los ingresos y egresos a la Quinta de Olivos durante el macrismo y que la DAJuDeCO informe el entrecruzamiento de llamadas de todas las personas imputadas en este caso.
En un escrito de 17 páginas, los denunciantes describieron cada una de las visitas de Hornos al despacho de Macri que están registradas en el listado de acceso a la Casa Rosada y mencionaron los fallos que en los días previos o sucesivos el camarista firmó como integrante de la sala IV de la máxima instancia penal del país, en los que se destacan muchos adversos al kirchnerismo. “Debemos hablar entonces de un modus operandi claro y absolutamente contrario a la independencia judicial y la separación de poderes”, señalaron, ya que Hornos “visitaba al Presidente Mauricio Macri en su despacho presidencial días antes de dictar sentencias favorables a los intereses de ese mismo Presidente”, indicaron. “Esto no sucedió una o dos veces, lo cual podría ser atribuible a una mera coincidencia, sino que un total de 6 veces. En ninguno de esos casos se registra una excepción a la regla: nunca una visita sin fallos posteriores, nunca un fallo que no sea en contra de un mismo sector político. Absolutamente ninguna de las visitas realizadas a la Casa Rosada fueron precedidas de un pedido de audiencia pública”, agregaron.
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Para los denunciantes, “estos hechos pueden ser constitutivos de una diversa variedad de delitos, tanto por parte del juez Gustavo Hornos como del mismo ex Presidente de la Nación Mauricio Macri: prevaricato, abuso e incumplimiento de deberes por parte de un funcionario público, cohecho pasivo y activo, entre otros”, enumeraron. También señalaron que hay “flagrantes violaciones a las Leyes de Ética Pública y a los deberes que la Ley de Organización de la Justicia Federal establece para garantizar la independencia e imparcialidad” de los jueces “así como los principios establecidos en Tratados Internacionales, en nuestra Constitución Nacional y en diversos fallos de la Corte Interamericana de Derechos Humanos y de la Corte Suprema de Justicia de la Nación”.
Entre otras cosas, porque para los diputados “la animosidad de las decisiones judiciales del camarista, respecto de ex funcionarios y empresarios relacionados al kirchnerismo es patente”.
“Todo indica que es parte fundamental del engranaje que hace a la ‘Mesa Judicial M’. Por tanto, podemos decir que, además de estar influenciado por el Poder Ejecutivo, también es un juez ‘parcial’”, sostuvieron. Y allanaron el camino para una presentación en el Consejo de la Magistratura.
Las visitas y los fallos
“A esta altura de la investigación, el lawfare o ‘guerra judicial’ en la Argentina es un hecho. Las pruebas de una conspiración política, mediática y judicial contra el ‘adversario político’ por parte del gobierno encabezado por Mauricio Macri son verdaderamente contundentes. Pero por si faltaba alguna evidencia aún más palmaria, el libro de visitas a la Casa Rosada nos da una nueva prueba de este nefasto complot”, afirmaron los tres diputados que realizaron la ampliación de denuncia.
Acto seguido, detallaron las visitas de Hornos “al despacho presidencial de Mauricio Macri durante su presidencia”.
Primer visita. El 22 de diciembre de 2015, apenas doce días después de que Macri asumiera la presidencia, Hornos registra su primera entrada a la secretaría privada del Presidente, según los documentos de ingresos y egresos de la Casa de Gobierno. El camarista entró a las 17.53 y se retiró a las 18.12. “Macri había asumido hacía menos de dos semanas y ya había puesto en marcha su plan más urgente, consistente en dominar el Poder Judicial”, indicaron los denunciantes. “Las consecuencias de la reunión fueron inmediatas”, señalaron. Y relataron que el 23 de diciembre, la Sala IV de Hornos “hacía lugar a la presentación realizada por el Grupo Clarín (querellante en la causa) y emitía el fallo que ordenó investigar al ex Secretario de Comercio de la Nación, opositor a Mauricio Macri, y que rechazaba la recusación que la defensa había planteado contra el juez Bonadío”.
Segunda visita. El 5 de mayo de 2016, Hornos volvió a la secretaría privada de la Casa Rosada. Entró a las 11.12. Se retiró 11.53. “Dos semanas después, confirmaba el procesamiento del ex titular de la Comisión Nacional de Valores, Alejandro Vanoli, en una causa impulsada por (nuevamente) el Grupo Clarín”, indicaron los denunciantes. “Esa misma semana, ratificaban una prueba en una filmación en ‘La Rosadita’, otra causa en donde se quiso vincular mediáticamente al kirchnerismo con actividades ilícitas. Y, para concluir con una semana llena de actividad mediático-judicial orientada siempre a favor de los mismos intereses, la firma de Hornos avalaría el rechazo a la recusación de (también nuevamente) Claudio Bonadío en la causa de 'dólar futuro', en donde se imputaba a Cristina Kirchner y Axel Kicillof”.
Un día antes de esta visita a la Casa Rosada, la sala IV de la Cámara de Casación Penal integrada por Hornos, Mariano Borinsky y Juan Carlos Gemignani rechazaba la excarcelación del empresario Lázaro Báez.
Tercera visita. El 8 de agosto de 2016, Hornos estuvo otra vez en la Casa de Gobierno. En esta ocasión no se precisó el destino de la visita. Pero sí el horario de entrada y salida: 17.30 y 18.02, respectivamente. Tres días después de esa visita, en la sala IV integrada por Hornos se movía la causa bautizada “Ruta del dinero K” y se ordenaba “continuar una investigación contra Luis D’Elia en una causa por discriminación”. También la misma sala ordenaba impulsar una investigación penal por enriquecimiento ilícito contra Aníbal Fernández, entre otros fallos.
Cuarta visita. El 31 de octubre de 2017, “el juez Hornos fue a visitar a Mauricio Macri a su despacho, tal como da cuenta la hoja de ingresos de la Casa de Gobierno. Exactamente la visita fue un día martes y comenzó a las 14.23 de la tarde”. Dos días después, el 2 de noviembre de 2017, la misma sala IV de Casación no hizo lugar a tres recursos de queja en el caso de la Obra Pública vial de Santa Cruz. "Ello significó confirmar el procesamiento y embargo por el monto de 10.000 millones de pesos a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner", destacaron los denunciantes. "A la vez, la Cámara rechazó los pedidos de nulidad por haber intervenido más de un fiscal en el proceso”, agregaron.
Con estas decisiones, "Hornos y la Cámara de Casación dejaban expedita la vía para la realización del juicio oral y público de la ex presidenta. Feliz noticia para la Mesa judicial, artífices del Lawfare en este país, ya que su cometido estaba más cerca de la meta final, una oposición destruida y desgastada por el apriete y la persecución”, señalaron los denunciantes.
Quinta visita. El 16 de noviembre de 2017, Hornos volvió al despacho presidencial. Entró a las 17.46 y partió a las 19.14. En aquel entonces, “un fortalecido Macri había avanzado en su plan sistémico de impulsar el lawfare: en menos de un mes, Julio de Vido y Amado Boudou, ex ministro y ex Vicepresidente de la Nación, habían sido desaforados y detenidos, respectivamente. Hornos, sin lugar a dudas, jugaba un rol fundamental en el vínculo entre el Gobierno Nacional y el Poder Judicial”, afirmaron Soria, Tailhade y Valdés en su ampliación de denuncia.
“Cada uno de los fallos que se han dictado en instancia de Casación en la causa en donde el Grupo Clarín actuaba como denunciante y Alejando Vanoli era el imputado, fueron emitidos días después de una reunión entre Macri y Hornos. Esta no fue la excepción: la firma de Hornos habilitó la realización del juicio oral contra Alejandro Vanoli por abuso de autoridad”, se indicó en la denuncia.
Una semana después, “el 23 de noviembre, un fallo firmado por Hornos confirmaría el procesamiento y embargo de los hijos de Lázaro Báez, uno de los platos fuertes del armado mediático de la supuesta ‘Ruta del Dinero K’”.
Luego, la sala IV emitiría “un fallo que perjudicaba al ex Vicepresidente de la Nación, Amado Boudou”.
Sexta visita. El 13 de agosto de 2018 se registró la última visita del juez. Ingresó a las 12.21. Salió a las 16.15. Cuatro días antes, la sala IV de Casación según informó el CIJ “rechazó planteos de Cristina Kirchner, Oscar Parrilli y Luis D’Elía en la causa por la denuncia de Nisman por el memorándum con Irán”. Y “el 22 de agosto de 2018, la Cámara Federal de Casación Penal confirmó las prisiones de Amado Boudou, José María Núñez Carmona y Nicolás Ciccone”, recordaron los denunciantes. Un día después, la misma sala "rechazó un recurso extraordinario en el marco del pedido de libertad de Carlos Santiago Kirchner, ex subsecretario de Coordinación de Obra Pública Federal”.
“Nuevamente el pico de la agenda mediática y judicial, de desprestigio a los miembros del partido opositor, se intensificaba en las fechas próximas de las reuniones entre el ex presidente y el camarista Hornos”, afirmaron los denunciantes. “Estamos hablando de la aplicación del lawfare en su máxima expresión, estamos presenciando cómo las cabezas de dos poderes se juntan a pergeñar estrategias de persecución y amedrentamiento a opositores”, añadieron.
Medidas de prueba
Ante este cuadro de situación, los diputados pidieron una serie de medidas de prueba que tendrán que resolver el fiscal Franco Picardi y la jueza María Capuchetti, quienes están a cargo de la investigación.
Entre las medidas más destacadas, figuran:
-El pedido de que se “remita copia del expediente en donde consta un informe de la Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crimen Organizado (Dajudeco) con el resultado de los entrecruzamientos telefónicos entre Macri, Fabián ‘Pepín’ Rodríguez Simón, (y) José Torello, todos ellos involucrados en la presente causa”.
- La solicitud a la DAJuDeCO “para que informe el entrecruzamiento de llamadas de todas las personas imputadas en la presente causa entre el 10 de diciembre de 2015 y el 9 de diciembre de 2019”.
- El requerimiento de que se libre un oficio a la Secretaría General de la Presidencia General de la Nación para que se informen ingresos y egresos del juez Gustavo Hornos a todas las dependencias del Poder Ejecutivo de la Nación.
-También se pide un “análisis de los ingresos y egresos de la Residencia Presidencial de Olivos” durante el macrismo.
La Mesa Judicial
De acuerdo a los denunciantes, la “Mesa Judicial” era una “organización criminal encargada de presionar sistemáticamente a funcionarios judiciales con el objetivo de afectar la independencia del Poder Judicial”.
¿Quiénes integraron esa mentada organización? Además de Macri, están acusados el exministro de Justicia, Germán Garavano; el exjefe de la AFI, Gustavo Arribas; la exministra de Seguridad, Patricia Bullrich; y el exasesor y abogado de Macri, Fabián “Pepín” Rodríguez Simón, entre otros exfuncionarios.
Según se desprende de este caso, mientras un grupo de jueces visitaba la Casa Rosada, otro, que no fallaba de acuerdo a los intereses del macrismo, era presionado para “alinearse”.