El Gobierno revocó la personería del Grupo Sophia, el think tank macrista fundado por Rodríguez Larreta

Fue por una resolución de la ministra de Justicia, Marcela Losardo, y la intervención del titular de la IGJ, Ricardo Nissen.  La fundación lleva 15 años sin presentar balances, 18 sin nombrar autoridades y tiene un domicilio inexistente.

08 de febrero, 2021 | 19.19

El Gobierno retiró la autorización para funcionar de la Fundación Grupo Sophia, el think tank fundado por Horacio Rodríguez Larreta en 1994, que se transformó en uno de los semilleros del macrismo, primero del PRO y luego de Cambiemos. La Inspección General de Justicia (IGJ) detectó que la fundación no presentaba balances hacía 15 años, no designaba autoridades hace 18, estaba registrada en un domicilio inexistente y no actualizaba un solo dato desde 2010.

Fue través de la resolución 141 del Ministerio de Justicia, firmada por Marcela Losardo el 3 de febrero pasado luego de la intervención de la IGJ, el organismo comandado por Ricardo Nissen que tiene entre sus funciones el control y la fiscalización de sociedades y fundaciones.

La decisión no pasará desapercibida. El Grupo Sophia es clave en la historia de Rodríguez Larreta y su acercamiento a Mauricio Macri. En su biografía oficial, que figura en la web del gobierno porteño, se relata: “En 1993 creó la fundación Grupo Sophia, una ONG compuesta por jóvenes con intenciones de asumir responsabilidades públicas. Por ese semillero pasaron la actual Gobernadora de la Provincia de Buenos Aires María Eugenia Vidal, la Ministra de Desarrollo Social de la Nación Carolina Stanley, y el Ministro de Educación de la Nación Esteban Bullrich, entre otros tantos que dejaron su impronta”. El año es incorrecto: el contrato social de la fundación es del 13 de octubre de 1994, pero lo demás es tal cual.  

Este proyecto lo hacemos colectivamente. Sostené a El Destape con un click acá. Sigamos haciendo historia.

SUSCRIBITE A EL DESTAPE

En los considerandos de la resolución, a la que accedió El Destape, se detalla que la IGJ detectó que la Fundación Grupo Sophia no presentaba sus balances desde el 2005, o sea hace 15 años. Tampoco las designaciones de autoridades desde el 2002, 18 años. La última comunicación con el organismo que controla las sociedades y las fundaciones fue en 2010, hace 10 años. A partir de eso inició un proceso de fiscalización para “verificar determinados aspectos de su funcionamiento y, en su caso, intimarla a regularizar su situación”.

La primera medida fue una visita al último domicilio que registró al Fundación, pero al llegar les dijeron que hacía 10 años que no funcionaba allí. Ante eso se le enviaron cartas certificadas a las autoridades que figuraban pero, según la documentación a la que accedió El Destape, “sólo pudieron ser notificados tres de los miembros del Consejo de Administración, a saber: Sres. Eugenio BURZACO, Raúl RIGO y Juan SEGURA”. Burzaco fue el viceministro de Seguridad de Patricia Bullrich; Rigo es un histórico del ministerio de Economía, donde estuvo 15 años a cargo de la subsecretaria de Presupuesto y hoy es secretario de Hacienda; Segura ha pululado en diversas fundaciones de la derecha.

Para la IGJ, la falta de actualización de la dirección y las autoridades de la Fundación así como la no presentación de sus balances son faltas que ameritan distintas sanciones de acuerdo a la ley.

Que la falta de presentación de estados contables o cambios en la composición de sus autoridades, sumado a la falta de registración de una nueva sede social hace suponer, prima facie, que la entidad no estaría desarrollando las actividades para las cuales le fuera otorgada -en su momento- la autorización para funcionar; mientras que de configurarse el supuesto en el que la fundación se encontrase activa, ello evidenciaría una clara actitud de obstaculización a las funciones de fiscalización que la INSPECCIÓN GENERAL DE JUSTICIA tiene a su cargo, impidiendo su efectivo ejercicio”, dice la resolución del Ministerio de Justicia.

El documento que retira la autorización y dispone a su vez la liquidación de la fundación dice: “Que en cualquiera de las dos situaciones planteadas, ya sea la gravedad en el incumplimiento de sus obligaciones para con el organismo de control o el haber dejado de desarrollar las actividades propias de su objeto social, corresponde el retiro de la autorización para funcionar a la ‘FUNDACIÓN GRUPO SOPHIA’, en el primer supuesto entendida como sanción generada por la inobservancia de los deberes que tiene a su cargo y en el segundo caso como medida inevitable ante la inexistencia de un sujeto a quien controlar”.