Durante la 10° sesión especial de la legislatura de la provincia de Jujuy se aprobó el ingreso de Ekel Meyer, conocido por ser el carcelero de Milagro Sala, al Superior Tribunal de Justicia. La designación fue impulsada por el gobernador Gerardo Morales.
Pese a las 2 impugnaciones que fueron presentadas para que no ocupe un lugar en el Tribunal Superior de Justicia, una de ellas por el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), la designación finalmente tuvo su aprobación. La decisión fue tomada en una sesión especial pedida por el presidente del cuerpo legislativo Carlos Haquim.
De antemano, se esperaba esta decisión ya que el oficialismo provincial contó con los dos tercios de los votos entre los que estuvo el apoyo al sector que responde a Rubén Rivarola. También fueron designados Ellio Luciano Yapura como Juez del Tribunal en lo Criminal, Jorge Rafael Abud como Defensor Oficial Civil, José Alejandro López Iriarte como Juez de Cámara en lo Civil y Comercial Nº1 ( Vocalía 2), Javier Salvatierra como Juez del Juzgado de Control Nº 3, entre otros.
Meyer es conocido por ser la persona que, en el año 2016, llevó adelante la detención de Milagro Sala como consecuencia de un acampe. En aquel momento se ordenó detenerla por "instigación a cometer delito, obstrucción al transporte público y tumulto". Por otro lado, el CELS solicitó a la legislatura provincial que rechace la postulación de Ekel Meyer tras considerar que "está en duda su respeto por valores democráticos y el respeto y la defensa de los derechos humanos», el CELS solicitó a la Legislatura que «rechace la postulación de Ekel Mayer como vocal del Superior Tribunal de Justicia de la Provincia de Jujuy”.
Por otro lado, alertarlo que la "ausencia de selección de magistrados para la designación de candidatos y candidatas al cargo de integrante del Superior Tribunal de Justicia (STJ) de la Provincia de Jujuy -con las características señaladas por la Corte IDH- limita la garantía de independencia e imparcialidad que los Estados deben asegurar para el ejercicio de la función judicial”.
A pesar de las impugnaciones, de los pedidos y de los reclamos, el deseo de Gerardo Morales de encontrar un lugar a Ekel Meyer dentro del Tribunal Superior pudo ser cumplido.
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