El diputado de PRO, Damián Arabia, profundizó sobre la polémica del presidente Javier Milei con su perro Conan, de quien se desconoce su existencia y justificó que el mandatario hable con su perro sea real o imaginario. En este sentido, sostuvo que dicha cuestión no modifica sus decisiones respecto al rumbo del país.
En diálogo con El Destape El Mundo AM 1070, el legislador admitió que no solo desconoce si Conan vive, sino que también le "parece que es un tema personal y tenemos que aprender a veces a no meternos en temas personales de los funcionarios". Por otra parte, afirmó que "es difícil pensar que porque uno es funcionario público de pronto toda tu vida privada -que nada tiene que ver con el ejercicio de tu función- tiene que ser pública".
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En este marco fue cruzado por Ari Lijalad, conductor de 'Habrá Consecuencias', quien le retrucó respecto a las declaraciones de Milei sobre las decisiones política que toma luego de las conversaciones con el animal del cual no se sabe si vive o no, a lo que el diputado Arabia justificó: “Yo también conversó con mi perra y no me parece raro. Creo que muchas personas conversamos con nuestros perros”.
“Hay veces que hablo solo y tomó decisiones en función de lo que hablo solo y no hay diferencia: uno es un perro y otros sos vos pensando, con vos mismo. No me parece tan alocado ni tan raro ni tampoco me parece tan alocado ni tan raro que uno pensando en voz alta o conversando con gente que extraña o que no ve en una conversación que tiene en su cabeza”, agregó.
En este sentido, Arabia profundizó su justificación y disparó: ”¿En qué me cambiaría el Estado y a los argentinos si yo te digo ahora en este momento que yo converso con mi perra que se llama Nala o o se llama Pepa o no existe, ¿en qué cambiaría? ¿Cuál sería la diferencia? ¿cambiaría mucho, cuáles serían las consecuencias si yo te digo que hablo con mi perra Nala que la tengo acá al lado mío o con una perra imaginaria o con Dios o en la iglesia?”.
Interna en el PRO
Por otra parte, en relación a la fuerte interna que atraviesa al PRO tras las elecciones presidenciales, el diputado Damián Arabia cruzó a Mauricio Macri por sus declaraciones contra Javier Milei en la disputa de la coparticipación del Gobierno nacional con la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. También recordó que para evitar internas se había acordado que Macri presidía el partido y Patricia Bullrich la asamblea.
En diálogo con El Destape Radio, el legislador afirmó que “en este momento las declaraciones de Macri no son las más adecuadas" y marcó que "no fue responsable". Asimismo, dio a entender que el expresidente no debería entrometerse en las conversaciones entre Nación y el gobierno porteño. “Me parece que en este momento las declaraciones no son las más adecuadas porque creo que hay dos gobiernos que están conversando entre sí y que están viendo establecer cómo se puede hacer, entonces me parece que es un tema que tienen que resolver entre ellos”, planteó.
En este sentido, ratificó su rechazo al proyecto de resolución por la coparticipación y sostuvo que “no es momento porque el Gobierno Nacional está haciendo un esfuerzo importante para lograr el equilibrio fiscal y cualquier cosa macroeconómica o cualquier cambio macroeconómico” puede afectar. Arabia hizo referencia al proyecto de resolución presentado por otros legisladores macristas para que la Nación cumpla con lo dispuesto por la Corte y le pague a la Ciudad dado que, según sostuvo Cristian Ritondo, no compromete el déficit cero.
Respecto a la interna en el espacio, recordó que para evitar estas cuestiones se había acordado que Macri presidía el partido y Patricia Bullrich la asamblea y en este contexto, negó la interferencia con que haya funcionarios en el Gobierno que sean del partido. “Para que quede en claro y quede nítido, cuando nosotros hicimos el acuerdo para no ir a interna establecimos a Macri presidente del Consejo y Patricia presidenta de la Asamblea. Esto fue en marzo, lo que significa que cuando se hizo el acuerdo Bullrich llevaba cuatro meses dentro del gobierno y como ministro de Seguridad de la Nación”, afirmó. Y puntualizó: “No solo Patricia está en el gobierno sino hay decenas de dirigentes nuestros (por el PRO) que están dentro del gobierno” de Javier Milei.
Las declaraciones del legislador son en medio de la jugada fuerte del macrismo de Mauricio Macri a Javier Milei. En cuestión de horas, presentó un informe lapidario de la gestión nacional, la Ciudad avanzó públicamente en su disputa con la Casa Rosada por la coparticipación y el reclamo llegó al Congreso. El contraste con el bullrichismo es notorio, ya que la ministra quiere ayudar al gobierno casi en forma ciega. Un contrapunto que el PRO terminará de cocinar este jueves. Cabe recordar que Nación arrastra, según la Corte Suprema, una deuda con la Ciudad desde el 2022. Dada la sintonía ideológica, se pensó que esta gestión iba a cumplir las demandas del máximo tribunal y de un distrito amarillo por tradición. Pero no sólo no sucedió sino que la CABA se encontró, casi sistemáticamente, con la respuesta por default del Gobierno: “No hay plata”. Luis Caputo, ministro de Economía que supo desempeñarse en el mismo rol con Macri, fue el encargado de transmitir el mensaje y de dormir las negociaciones.
Mauricio no se perdió la oportunidad y también se pronunció sobre el tema. “Hay una condición anterior aún más importante que crear nuevas leyes, y es cumplir con las existentes, en especial, cumplir con los fallos irrevocables dictados por la Corte Suprema”, lanzó el jefe del PRO en sus redes sociales. La Ciudad salió a quejarse por una necesidad económica, Macri por la pelea política. La CABA juega en esta disputa, también. Pero, en este caso, es el principal afectado por el no giro de fondos, por eso el rol ocupado.
El jueves, día D para el PRO
Según una nota publicada en El Destape, con la posibilidad de que haya “quilombo”, Macri va a incumplir un acuerdo político con Patricia Bullrich y va a sacar su silla en la jefatura de la Asamblea partidaria que, entre otras cosas, define las alianzas electorales. “El acuerdo se hizo, pero las condiciones variaron” de marzo a la fecha. Ya no se trata de elegir a un titular del órgano partidario, sino de elegir una de dos concepciones del PRO.
Macri cree que el PRO vale, aunque esté devaluado, aunque saque diez puntos en las elecciones. Es, según él y sus seguidores, el cambio con gestión y responsabilidad. Pero -sobre todo-, el espacio pionero de esa transformación. Bullrich, en cambio, considera que el partido ya perdió sentido, que no sirve más. “Lucra, disuelve y se va”, describió un dirigente a Patricia y su relación con las fuerzas políticas.
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“Vamos a refundar el partido”, dice Mauricio en privado. Una actitud que llamó la atención porque nunca fue una persona muy metida en la discusión política. Un dato para entender la profundidad de la disputa aunque, más adelante, puedan terminar todos juntos en una alianza electoral. “Lo dirá el tiempo”.
La que también jugó fue Elisa Carrió, quien repudió "las declaraciones del presidente en contra" de Lula da Silva, "el anuncio de su no presencia el próximo 8 de junio en la cumbre del Mercosur y su participación en la cumbre política de Bolsonaro, casi como una clara provocación al país vecino". Cuestionó la intención de Milei de dinamitar acuerdos y pidió que deje de lado su "fanatismo ideológico".