El gobierno de Javier Milei sigue con las modificaciones en el Gabinete. El secretario de Culto de la Nación, Francisco Sánchez, tomó la decisión de dejar su cargo. "Se va por motivos personales, no hay otra razón", confirmaron fuentes oficiales a El Destape.
Se trata de una baja en un área clave de la Cancillería, a cargo de Diana Mondino. Su lugar sería ocupado por el diputado de La Libertad Avanza (LLA) en la provincia de Buenos Aires, Nahuel Sotelo, de fuerte compromiso con la religión católica y de estrecha relación con el Presidente.
La última aparición de Sánchez en Balcarce 50 se produjo hace menos de una semana, cuando el jueves pasado mantuvo una reunión en el primer piso con funcionarios cercanos al jefe de Estado.
El ex diputado renunció a su cargo en la Secretaría luego de polémicas situaciones que afectaron su consideración dentro la propia administración libertaria, como su decisión unilateral de viajar a la cumbre de Vox en España y su ausencia en el tedeum del último 25 de mayo.
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El prontuario de cuestionadas frases del dirigente incluye críticas en duros términos contra el Papa Francisco, un pedido de ”pena de muerte” contra la expresidenta Cristina Kirchner, y la referencia a “hordas islámicas” y de “organizaciones nefastas” como “Amnistía” vinculadas al “sionismo internacional”.
De esta manera, sus propuestas e iniciativas durante su estadía en la Cámara baja estuvieron relacionadas con el endurecimiento de penas, el uso domiciliario de armas y la crítica feroz a las políticas favorables para los pueblos originarios y la diversidad de género.
Quién es Francisco Sánchez, el ahora ex secretario de Culto de Milei
La violencia del discurso de Francisco Sánchez alcanzó el punto máximo en agosto de 2022, cuando sostuvo que la entonces vicepresidenta Cristina Kirchner merecía la pena de muerte. Fue mientras los fiscales federales Diego Luciani y Sergio Mola terminaban sus alegatos y pedían la proscripción de CFK y la pena de 12 años de prisión por considerarla la jefa de una asociación ilícita.
"12 años por robar impunemente es casi nada. El año pasado presenté un proyecto de ley para que este tipo de delitos sean considerados traición a la Patria. Merecen la pena de muerte, no una liviana prisión domiciliaria", había escrito en sus redes sociales.
Tiempo después, militó por la candidatura de Patricia Bullrich en las elecciones de 2023 y luego expresó su apoyo "sin condiciones ni especulación alguna” a Milei en el balotaje de noviembre, es un exdiputado nacional y exconcejal de Neuquén reconocido por sus posturas ultraconservadoras.
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Llegó a su cargo en medio de polémicas, sobre todo por sus críticas contra el Papa Francisco en sus redes sociales. El ex legislador había apuntado contra el sumo Pontífice a raíz de la designación de Raúl Eugenio Zaffaroni, ex juez de la Corte Suprema, en la Junta Académica Fundadora del Instituto para la investigación y promoción de los Derechos Sociales “Fray Bartolomé de las Casas”, en el ámbito de la Pontificia Academia de las Ciencias Sociales. “Caso para estudiosos encontrar un Papa que haya hecho tanto daño”, había manifestado.
Cuando asumió su puesto, pidió unas extrañas disculpas: "Sin dudas que me arrepiento de lo que señalé en relación al Santo Padre. Seguramente por la cuestión política, cruzada por la grieta que ha dominado la escena política en los últimos años, la designación de Zaffaroni fue interpretada por mí, y por otros, como algo negativo para la política argentina sin comprender, en mi caso, las implicancias que en realidad tiene cada acción del Santo Padre y el Vaticano", indicó.
En ese sentido, se excusó y dijo que "parte de la ignorancia, las pasiones y cierta imprudencia" lo llevaron a cometer ese error. "Me arrepiento y pido perdón", agregó. Sin embargo, nunca pudo recomponer la relación con la Iglesia Católica.
El perfil de Sánchez se elevó en mayo cuando en un encuentro del partido Vox, en España, en la que expresó ideas de fuerte tinte conservador: además de rechazar el aborto legal -señaló que los hijos de padres separados sufren ansiedad y problemas escolares- , criticó las leyes de divorcio vincular y del matrimonio gay.
“Soy conservador. En Argentina, el conservadurismo ha ido retrocediendo”, sostuvo durante su presentación Sánchez, que luego continuó por un recorrido histórico sobre la aprobación en Argentina de las leyes que criticó.
En primer lugar, el secretario de Culto se refirió al divorcio y el matrimonio igualitario. "En 1987, en plena crisis económica, el pésimo Gobierno radical alfonsinista promovió el debate por el divorcio vincular, y se aprobó", manifestó.
Mientras que en relación con el matrimonio homosexual dijo que "no era el momento en Argentina en plena crisis", pero "lo promovieron y lo aprobaron” igualmente.
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