En una de sus últimas resoluciones como juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla dejó allanada la elevación a juicio para el principal tramo de la causa de las bases AMBA, donde se investiga el espionaje político que desplegó el macrismo en la provincia de Buenos Aires. Se trata de un desprendimiento del caso D’Alessio.
Con el dictado del procesamiento del jefe de base de Bahía Blanca, Ramos Padiila consideró que “no restan medidas de prueba sustanciales en lo que respecta a la participación de todos los procesados hasta el momento como partícipes del ciclo de inteligencia ilegal enmarcado en el denominado ‘Proyecto AMBA’ de la Agencia Federal de Inteligencia, por lo que –para garantizar su juzgamiento en un plazo razonable– estimo que –una vez firme su situación procesal– el proceso se encuentra en condiciones de transitar hacia la etapa de juicio oral –al menos de modo parcial”-.
En esta causa fueron procesados el director y la subdirectora de la AFI macrista, Gustavo Arribas y Silvia Majdalani, respectivamente; y los jefe de las bases que la exSIDE había desplegado en territorio bonaerense (6 nuevas y 3 históricas). También, el director del Proyecto AMBA, Pablo Pinamonti, y los coordinadores de la iniciativa, entre los que figura el experito del caso Nisman y exjefe de la Policía Bonaerense, Daniel Salcedo. En total son 17 los acusados.
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“Eventualmente, en esa fase posterior del proceso, caracterizada por su mayor amplitud probatoria y la inmediatez propia de la oralidad, podrán continuar debatiéndose estos asuntos y adoptarse criterios definitivos vinculados con la responsabilidad de cada uno de los imputados, atendiendo a sus situaciones particulares”, consideró Ramos Padilla, que el viernes juró como juez federal de La Plata, cargo en el que asumirá este lunes.
El allanamiento para una elevación parcial del caso a juicio no implica que la causa esté concluida. El propio Ramos Padilla destacó que tomó esta resolución “a pesar de que reste profundizar la pesquisa en orden a la posible participación de otros agentes y ex agentes de dicho organismo en las maniobras investigadas”. Por ejemplo, según pudo reconstruir El Destape, la investigación podría involucrar a media docena de espías de las bases AMBA, todos de rango inferior.
“Debe aclararse además que en lo que hace a las medidas probatorias que podrían estimarse útiles y conducentes para acreditar ciertos extremos fácticos accesorios o contextuales que hacen al juicio de responsabilidad de los aquí imputados, en cualquier caso y eventualmente, podrá ser evaluado su dictado en la etapa de instrucción suplementaria previa a la sustanciación del debate oral”, aclaró el juez que instruyó la causa.
Los procesados
“Aquí se habrá de disponer que, una vez firme la situación procesal de los procesados Gustavo Arribas, Silvia Majdalani, Pablo Pinamonti, Daniel Salcedo, Vicente Melito, Nicolás D´Giano, Eduardo Rocchi, Marcos Pannunzio, Pedro Oscar García, Alicia Susana Nocquet, Andrés Máximo Maisano, Gustavo Emilio Carreiras, José Luis Fiorentino, Ricardo Bogoliuk, Roberto Hugo Bianchi, Nicolás Iuspa Benítez y Guillermo Coll, y estimándose completa la instrucción a su respecto, se corra vista a las partes acusadoras privadas y pública en los términos del art. 346 del C.P.P.N”, resolvió Ramos Padilla y dejó allanada la elevación a juicio.
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Los 17 acusados son: los jefes de la AFI macrista (Arribas y Majdaldani), el director del Proyecto AMBA (Pinamonti), cinco coordinadores (Salcedo, Melito, D'Giano, Rocchi y Pannunzio) y miembros de las nueve delegaciones de la agencia que estaban distribuidas en Buenos Aires.
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D'Giano, Rocchi y Pannunzio fueron procesados el pasado miércoles.
Entre las últimas resoluciones de Ramos Padilla en Dolores también se destaca la prórroga por un año de la prisión preventiva de Bogoliuk, quien fuera jefe de la base Ezeiza de la AFI e integrante de la banda de Marcelo D’Alessio. Todo indica que era el superior del falso abogado y que a pesar de haber dejado la agencia siguió manteniendo contacto con la exSIDE, sobre todo, con Pinamonti.
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El espionaje en la Provincia
De acuerdo a la pesquisa, la AFI macrista expandió de tres a nueve sus bases de operaciones en la provincia de Buenos Aires. A las bases que ya tenía la agencia como la de Mar del Plata, Bahía Blanca y La Plata se sumaron las de Morón (Base Haedo), San Martín, Quilmes, Pilar, La Matanza y Ezeiza. Esta última estuvo a cargo Bogoliuk, procesado en el marco del D’Alessiogate.
En tanto, el jefe del proyecto AMBA fue Pablo Pinamonti, quien había sido indagado en el marco del D’Alessiogate. Al profundizar sobre su rol, Ramos Padilla solicitó información a la intervención de la agencia de inteligencia y así fue que se encontró con todo este entramado ilegal, del que se desprende el espionaje sobre organizaciones políticas, sociales y sindicales. Hubo actividades de inteligencia ilegal hasta en comedores y merenderos.
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Ramos Padilla detalló en diversas resoluciones el circuito de la información que era recabada de forma ilegal en la provincia de Buenos Aires: “En forma cotidiana y permanente, las Bases AMBA reunían información vinculada a las actividades políticas de la oposición en los diferentes distritos del Gran Buenos Aires, la cual luego era procesada y analizada en informes semanales y reportados a la superioridad, la que culminaba con el ciclo de inteligencia a través de la planificación y toma de decisiones teniendo como base aquella información de inteligencia prohibida”.
¿Cómo debería ser el juicio de este caso? En una resolución en el maco del D’Alessiogate, Ramos Padilla planteó la necesidad de unificar todas las causas de espionaje en un tribunal para que toda la red sea juzgada en un único gran juicio. Resaltó que se repiten acusados, víctimas y modus operandi.
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“Frente a la evidencia de que en todos los casos nos encontramos ante maniobras de espionaje político desarrolladas en un mismo período de tiempo, con idénticos y similares actores, víctimas y modus operandi, lo más adecuado es investigar la red de espionaje ilegal de manera conjunta y no a través de compartimientos estancos”, señaló el juez en una resolución que se conoció el pasado martes. Consideró que los casos de espionaje que involucran a la AFI macrista y hoy se sustancian en Dolores, Lomas de Zamora, Mar del Plata y Comodoro Py deben juzgarse de manera conjunta.
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