El fiscal federal Carlos Stornelli recibió un fuerte respaldo de la Cámara Federal de Casación Penal en uno de los hechos del D’Alessiogate en los que estuvo involucrado. La sala III del máximo tribunal penal del país confirmó el sobreseimiento del fiscal en el caso que aborda el armado de la causa Gas Natural Licuado (GNL) por parte del espía ilegal Marcelo Sebastián D’Alessio y su banda. La decisión incluyó la imposición de costas a quien querelló para intentar revertir el beneficio que había recibido el titular de la Fiscalía Nº 4 de Comodoro Py el 23 de septiembre de 2023.
Operación GNL
La “Operación GNL” es uno de los siete episodios del D’Alessiogate que involucraron a Stornelli y a D’Alessio. El fiscal y el espía ilegal habían sido procesados por el juez federal Alejo Ramos Padilla en 2019 cuando el caso tramitaba en la justicia federal de Dolores.
La “Operación GNL” se detecta cuando los investigadores hallan en la computadora de D’Alessio un documento “en el que se diseñaba con precisión cómo habría de ejecutarse la operación, al menos, con casi un año de anticipación”. El punto era intervenir en la causa conocida como Gas Natural Licuado (GNL) donde estaban apuntados CFK, Julio De Vido y Roberto Baratta, entre otros funcionarios kirchneristas. D’Alessio llegó a declarar como testigo en la fiscalía de Stornelli en dos ocasiones en este proceso que tuvo como prueba un libro escrito por el periodista de Clarín Daniel Santoro, en el que había colaborado el espía ilegal. El expediente GNL tuvo hasta la participación de un perito que truchó un peritaje.
La causa GNL en la que participaron Stornelli y D’Alessio, se había iniciado en 2014 por una denuncia de los entonces legisladores del PRO Federico Pinedo, Laura Alonso y Patricia Bullrich y otra del abogado Juan Ricardo Mussa. Fue instruida por el juez Claudio Bonadío. Tal como explicó Ramos Padilla, “se centró en el presunto pago de sobreprecios en la compra de gas natural licuado que era traído en barcos que llegaban a dos puertos locales (Bahía Blanca y Escobar), en los que se hacía el proceso de ‘regasificación’ y se introducía en la red de distribución. El 19 de octubre de 2017, la causa adquirió una notable relevancia cuando Bonadío dictó el procesamiento de 25 personas, entre ellas, Julio De Vido y Roberto Baratta, sobre quienes dispuso su prisión preventiva”.
De acuerdo a Ramos Padilla, a través de esta operación se “buscó incidir en una causa judicial de relevancia pública e institucional y socavar la imagen pública de un determinado sector político, opositor al que gobernaba en ese entonces, lo que se desarrolló en coordinación con algún sector de la prensa y organismos oficiales de inteligencia”. El juez que instruyó el D’Alessiogate había detectado “la participación de D´Alessio, Santoro, Stornelli, Bidone y la A.F.I” en la maniobra.
Según reconstruyó Ramos Padilla, en el marco del armado de GNL “D’Alessio le entregaría a Carlos Stornelli una valija con cuatro carpetas que contenían información ilegal, que D’Alessio aseguraría, en la declaración testimonial brindada ante el fiscal, haber recibido anónimamente, lo que resultaba falso”. “También se confirmaría que, a lo largo del año 2018, la organización intervendría, con distinto grado de avance, en la presentación de ‘arrepentidos’ bajo coacción en la causas conexas o vinculadas a G.N.L. –casos Pablo Barreiro, Etchebest, Fariña , etc.–“, añadió el juez que instruyó la megacausa D’Alessiogate.
Cuando el D’Alessiogate fue enviado a Comodoro Py, la investigación se desarmó y tanto Stornelli como Santoro fueron beneficiados y dejaron de estar procesados.
Por ejemplo, el 23 de septiembre de 2023, luego de que el caso pasara de los tribunales de Dolores a los de Retiro, la sala I de la Cámara Federal porteña revocó el procesamiento de Stornelli que había dictado Ramos Padilla en diciembre de 2019 por su rol en la “Operación GNL”. La decisión la tomaron Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi, designados a dedo por Macri, y Mariano Llorens, que tal como reveló El Destape se reunió con Macri en Olivos.
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El exministro Julio De Vido apeló esa decisión de la Cámara Federal porteña y el caso llegó a la Cámara de Casación. Para la querella, representada por los abogados Maximiliano Rusconi y Gabriel Palmeiro, la sentencia del tribunal revisor fue arbitraria y violó el debido proceso. Entre otras cosas, sostuvo que no se tuvieron en cuenta las conversaciones entre D’Alessio y Stornelli. La relación entre el fiscal y el espía ilegal era tan fluida que tal como surge de la pesquisa llegaron a intercambiar 92 mensajes de whatsapp en apenas 11 horas. “Los magistrados han omitido referirse a las múltiples similitudes encontradas en las diferentes maniobras -7 en total- imputadas a la asociación ilícita con la participación, en estos casos, del Sr. Stornelli. Aquello, para el Juez de primera instancia, revelaba la existencia de un modus operandi de la organización”, resaltaron Rusconi y Palmeiro.
Este 12 de octubre, la sala III del máximo tribunal penal del país confirmó el sobreseimiento del fiscal. En la actualidad, la “Operación GNL” se encuentra en instrucción, es decir, no integra la serie de hechos que se debaten en juicio (el D’Alessiogate fue elevado parcialmente a juicio; este martes se espera que el abogado José Ubeira declare como testigo por la cámara oculta que D’Alessio pretendió armarle a pedido de Stornelli).
El fallo de Casación
El voto de la Casación en favor de Stornelli en la “Operación GNL” lo lideró Guillermo Yacobucci –juez designado por Macri en ese tribunal y quien suele fallar a favor de represores en causas de lesa humanidad-. De acuerdo a Yacobucci “no se han reunido elementos que permitan inferir un accionar ilegal de Stornelli en torno al caso ‘GNL’”. Para poder sostener esta afirmación, el camarista obvió la relación estrecha que existió entre el fiscal y el espía ilegal y consideró que Stornelli simplemente “se circunscribió a recibir la declaración testimonial de un sujeto que afirmaba haber trabajado en ENARSA y tener información relevante para la causa en la que el imputado actuaba como Fiscal. Así, Stornelli se limitó a recabar el testimonio, a certificar la documentación recibida y a enviarla al Juzgado en donde tramitaba el expediente. Ello, de conformidad con sus facultades como acusador público”.
En esta línea, sostuvo “que no hay elementos concluyentes que permitan afirmar que Stornelli conocía a D ´Alessio de forma previa a su declaración ante la Fiscalía”. Entre otras cosas, sostiene que los chats que se conocieron entre ambos son posteriores a esta declaración. Lo cierto es que el fiscal esquivó casi una decena de llamados a indagatoria que había hecho Ramos Padilla y cuando se presentó en el juzgado de Dolores dijo que había perdido su celular por lo que no se pudo peritar su teléfono.
“En orden a los documentos que éste (Stornelli) tuviera en su poder no resulta posible afirmar que el encausado estuviera al tanto de ellos pues, justamente, no estaban bajo su disposición. Similar consideración cabe realizar respecto a que D´Alessio ya tenía agendado entre sus contactos a Stornelli, pues ello tampoco marca que efectivamente se conocieran”, agregó Yacobucci.
Acto seguido, Yacobucci compartió la postura del fiscal ante la Casación, Raúl Pleé (padrino de Stornelli en Comodoro Py), y votó por rechazar el recurso de la querella.
El camarista Gustavo Hornos (visitante de Macri en la Quinta de Olivos y la Casa Rosada) coincidió con su colega: “Habré de adherir, por coincidir en lo sustancial con las consideraciones expuestas en el voto que lidera el acuerdo, a la solución propuesta de rechazar el recurso de casación interpuesto por la querella de Julio M. De Vido”. Para Hornos “en la sentencia se señaló razonablemente que no se advertía irregularidad alguna en el anoticionamiento que el fiscal Carlos Ernesto Stornelli pudo tener para motivar su actuación funcional de recibir la declaración testimonial de D´Alessio en el marco de la causa GNL”. Todo, curiosamente, parece haber sido fruto del azar.
Finalmente, la tercera magistrada que intervino en este caso fue Ángela Ledesma. La jueza tuvo un argumento diferente al de sus colegas para rechazar el planteo de De Vido. Consideró que no debía hacerse lugar al recurso de la querella porque no hubo impulso de la fiscalía: "No es posible concebir un proceso penal sin la participación y control del acusador público” y como hubo un “expreso pedido de sobreseimiento efectuado por el representante del Ministerio Público Fiscal (el cual ha sido acogido por la Cámara), la querella no se encuentra facultada para continuar con la prosecución del delito de manera autónoma”. El fiscal que no apuntaló la acusación fue Raúl Plee, padrino de Stornelli en Comodoro Py y también visitante de Macri en la Quinta de Olivos, como reveló El Destape.