Algo que hasta hace unas semanas no figuraba ni en la discusión de campaña, hoy se convertirá en realidad: todo indica que el Senado aprobará esta tarde la eliminación del impuesto a las Ganancias para los trabajadores que cobran un salario. En ese sentido, la audaz jugada de Sergio Massa de decidir la medida por decreto y en paralelo enviar un proyecto al Congreso para que sea ley resultó un golazo porque le permitió tomar la iniciativa con una decisión de impacto social, meter a la oposición en un lío y terminar de ganarse el apoyo incondicional de los sectores sindicales que luego de mucho tiempo tuvieron un logro importante que mostrar. La CGT, la CTA y las organizaciones sociales avanzaron en la organización del acto del viernes frente al Congreso que tendrá a Massa como único orador.
Inesperadamente, un Congreso que sesionó poco y nada en el último año se convirtió en protagonista en el momento más complicado, semanas antes de las elecciones presidenciales. La convocada para hoy las 14, será apenas la segunda sesión del año de la Cámara de Senadores para debatir proyectos. En esa dificultad para reunirse tuvo que ver el desgajamiento que sufrió el oficialismo con la conformación de una banca de cuatro senadores disidentes junto a la representante del peronismo cordobés. Hoy, los cuatro disidentes acompañarán al oficialismo, lo mismo que los aliados de partidos provinciales. En la visita que hizo a Neuquén, Massa anticipó "un día histórico" y aseguró que con el voto del rionegrino Alberto Weretilneck tenían asegurada la aprobación. Será una sesión densa: también figuran en el temario la ley de Alquileres y la aprobación del pliego de varios jueces, incluyendo el de la camarista Ana María Figueroa.
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Se repetirá la lógica de la sesión pasada en Diputados. Los legisladores de Juntos por el Cambio cuestionarán el costo fiscal de la decisión y el desfinanciamiento que significará para las provincias. Están metidos en una contradicción porque la eliminación del impuesto a las Ganancias fue una de las promesas de campaña de Mauricio Macri en 2015 que no sólo incumplió sino que profundizó: terminaron pagando el tributo muchos más trabajadores. La iniciativa enviada por el ministro de Economía reforma el impuesto a las Ganancias al crear un nuevo gravamen sobre los ingresos a partir de un monto equivalente a 15 salarios mínimos, vitales y móviles. De esta manera, 800 mil trabajadores quedarán eximidos y sólo lo seguirán pagando unas 90 mil personas como ejecutivos de empresas, funcionarios de alto rango y jubilados de privilegio.
La medida venía siendo reclamada desde hacía muchos años por algunos de los gremios más importantes de la CGT como Camioneros y Bancarios. La decisión de Massa los unió en el festejo e inicialmente le armaron un acto "espontáneo" de apoyo en la Plaza de Mayo. Luego estuvieron en el Congreso para acompañar la sesión en Diputados y la idea era repetir este jueves en el Senado, pero imaginaron una sesión maratónica, con horario impreciso para la aprobación del proyecto. Por eso terminaron resolviendo directamente hacer la movilización el viernes.
En medio de las complicaciones por los índices de inflación y pobreza, fueron sumando motivos para celebrar: todas las medidas de recomposición del poder adquisitivo que tomó el ministro en los últimos días y otras dos propuestas que ya comenzaron a tratarse en Diputados como la reducción de la jornada laboral y la devolución del IVA para los salarios más bajos. La CGT sacó un comunicado para expresar su apoyo a Massa y apuntarle, sin mencionarlo, a Javier Milei por sus propuestas que "nos plantean falsas libertades individuales, con imaginarios equilibrios virtuosos de mercado que nunca se concretan y que, en la práctica, nos conducirían hacia un camino de desintegración, violencia y descomposición”. Se despegaron así de la movida del gastronómico Luis Barrionuevo que le organizó un acto de apoyo al candidato de La Libertad Avanza.
"La eliminación del impuesto a las Ganancias y la reducción de la jornada laboral son formas de distribuir la riqueza", expresó el secretario general de la CTA, el diputado Hugo Yasky, en diálogo con El Destape Radio. Yasky, uno de los más enfáticos defensores de la medida cuando se discutió en la Cámara baja, se mostró convencido de que el oficialismo contaba con los apoyos necesarios para la aprobación de la eliminación de Ganancias en el Senado y confirmó que la CTA se movilizará el viernes para acompañar a la CGT. "Las medidas que se están tomando van en el sentido correcto", sostuvo Yasky, quien participó de la reunión del Consejo del Salario que incrementó en un 32% el salario mínimo, que quedará en 156 mil pesos en diciembre.
La del viernes será la segunda convocatoria masiva que encabezará Massa luego del relanzamiento bonaerense que compartió ayer en Ensenada con el gobernador Axel Kicillof y el intendente Mario Secco. Frente al Congreso se espera mucha gente porque también participarán las organizaciones sociales Movimiento Evita, Somos-Barrios de Pie y la Corriente Clasista y Combativa. "Vamos a estar movilizados para fortalecer la candidatura de Massa y cerrarle el paso a la derecha. Las recientes medidas marcan un rumbo que implica la recomposición del poder adquisitivo de las trabajadoras y trabajadores", explicó el titular de Barrios de Pie, Daniel Menéndez.
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