En Santa Fe, una de las provincias más complejas para Juntos por el Cambio, se empezaron a acomodar las fichas pero la interna sigue caliente. El PRO y el radicalismo jugarán en tándem en las elecciones 2021, en vistas a las del próximo año impar con el objetivo de ganar el distrito. Tras la muerte de Miguel Lifschitz, todas las negociaciones avanzaron a una velocidad vertiginosa y estarán unidos salvo en Rosario y Santa Fe capital, parte del Gobierno socialista. Sin embargo, las cosas no son tan sencillas. Unos piden PASO y otros quieren hacer una suerte de síntesis con una lista que incluya a los tres partidos de la alianza, donde aparece la Coalición Cívica. Además, hubo cruces y desmentidas por el anuncio de candidaturas.
Por el lado de los que quieren internas, se plantean tres boletas diferentes: Federico Angelini, actual diputado nacional, se encamina a encabezar la lista de senadores por el PRO con los apoyos de Horacio Rodríguez Larreta, Mauricio Macri y Patricia Bullrich. El dirigente rosarino consiguió la venia de todos los dirigentes nacionales que no sólo se reunieron con él sino que también sacaron y publicaron fotos. El más difícil fue el jefe de Gobierno porteño que, en los últimos días, le dio su bendición.
En esa predicción, José Corral se presenta como el que competirá por el radicalismo, algunos marcan que sin apoyo de los dirigentes nacionales; y aparece Maximiliano Pullaro por la UCR disidente de Martín Lousteau. Más allá de ese principio de acuerdo para disputar PASO, hay un sector del radicalismo que todavía no se plegó a Juntos por el Cambio y sigue dentro de lo que es el Frente Progresista. A este sector lo califican como un espacio residual que no moverá demasiado la balanza pero esperan atraerlo más adelante, tal vez luego de los comicios legislativos de este año. El objetivo, a fin de cuentas, es armar un gran frente que pueda ganar en 2023 para gobernar Santa Fe.
Este proyecto lo hacemos colectivamente. Sostené a El Destape con un click acá. Sigamos haciendo historia.
Desde el radicalismo que está dentro de Cambiemos en la provincia del litoral aseguran que probablemente no haya acuerdo y que puede ser que se encaminen a un escenario de internas, pero prefieren armar una suerte de síntesis de las tres fuerzas de la alianza en una misma boleta. Fue parte de la propuesta que hicieron en 2019, una representación de todos los partidos.
En ese armado, Roy López Molina es el nexo de la UCR con el PRO. Alguien a quien califican como más dialoguista que Angelini, un dirigente con el que no analizan hacer ningún tipo de acuerdo. Luego, aparece Lucila Lehmann, actual diputada nacional y líder del radicalismo provincial.
La disputa aumentó su temperatura en los últimos días. Angelini asegura que será el candidato de Juntos por el Cambio mientras que la cuenta Cambiemos Santa Fe, en Twitter, salió con una desmentida: “Desde nuestro sector político en Santa Fe, comunicamos que todavía @juntoscambioar no ha definido candidaturas nacionales. Creemos que, en este contexto de crisis sanitaria y económica, la atención de la dirigencia debe estar enfocada en resolver de la gente y no de los políticos”. Y pidió “máxima atención para no ser funcional a operaciones de prensa de aquéllos que pretenden presentarse como candidatos únicos de un espacio que hoy se encamina a resolver sus referencias mediante el mecanismo de las primarias abiertas y obligatorias”.
La semana pasada, López Molina le dijo a La Capital: “La autoimposición de una candidatura lo único que hace es contaminar el intento de unidad por el que estamos trabajando, además de que expresa debilidad de quien se autoimpone”. Y agregó: “Esa supuesta candidatura tiene un problema conceptual enorme: difícilmente candidatos supuestamente nombrados a dedo en Buenos Aires puedan ser defensores del federalismo”.
MÁS INFO
Más allá de eso, aclaran que el radicalismo está junto al PRO desde la convención de Gualeguaychú y, si bien son escépticos de un acuerdo con el sector de Angelini, sostienen que están dispuestos a conversar aunque creen que es más posible hacerlo con otros sectores del partido fundado por Mauricio Macri. Por eso, de no llegar a un acuerdo, la PASO deberá discutir con las demás propuestas sobre el tablero.
La situación, en resumidas cuentas, es la siguiente: Angelini quiere encabezar y disputar internas. El radicalismo quiere una lista de unidad sin el candidato de Larreta, Macri y Bullrich. Respecto los radicales socialistas, desde la UCR analizan que hay voluntad de presentar una propuesta en Juntos por el Cambio y aclaran que “no hay ningún inconveniente” para unificarlos aunque sin una posibilidad de acuerdo porque es un sector que “viene de otra experiencia y nunca estuvieron dentro de JxC”.
Pero la alianza tiene también otras preocupaciones. La situación en distritos como Buenos Aires y la Capital Federal, un territorio que quieren recuperar y otro que quieren mantener. Por la pésima presidencia de Macri, en la Ciudad decidieron que Diego Santilli acompañe a Larreta en la boleta del 2019 anulándole toda posibilidad de ser el próximo Jefe de Gobierno por lo que, todo indica, se mudará a la provincia de Buenos Aires donde cuenta con la resistencia de Jorge Macri que cree que un porteño no tiene que ser el candidato bonaerense.
En la Ciudad, como contó El Destape, se palpita la gran interna entre Patricia Bullrich, la candidata incuestionable de Mauricio Macri, y María Eugenia Vidal, la de Larreta. Para la primera, la ex gobernadora bonaerense debería quedarse en la provincia y no disputar comicios en la Capital. Así, la guerra será entre quienes piden cambio de domicilio y entre quienes ya tienen su dirección registrada en cada distrito. De eso hablarán en la reunión que la mesa nacional de Juntos por el Cambio mantendrá esta tarde.