Con más consenso, cuáles serán las nuevas restricciones que tomará el Gobierno ante la segunda ola

El gobierno cree que es el momento de cortar la circulación de la pandemia y tiene el apoyo de los gobernadores. Cuáles son las medidas en carpeta. Qué pasa con las clases. El DNU sale mañana.

29 de abril, 2021 | 06.50

La prolongación de medidas para restringir la circulación en esta segunda ola de coronavirus está decidida, después de las dos ruedas de consulta telemáticas que tuvo Alberto Fernández con los gobernadores y el jefe de Gobierno porteño en las últimas 48 horas. El Presidente recogió el apoyo de los mandatarios locales, que a diferencia de lo que había sucedido dos semanas antes, esta vez se comprometieron a garantizar el cumplimiento del decreto que se publicará mañana.

Hasta entonces, quedan horas de afinar el lápiz para definir las nuevas normas, sector por sector. Resultará clave la reunión que tendrán hoy los jefes de gabinete de Nación, provincia de Buenos Aires y CABA para decidir la situación en el área metropolitana. En principio, no está previsto en esta etapa de la pandemia el regreso a clases presenciales ni el cierre de comercios e industrias.

En la Casa Rosada enumeran tres motivos por los cuales consideran necesario extender y profundizar las restricciones a la movilidad. Primero, porque dieron resultado. La curva de contagios se estabilizó a partir de las medidas implementadas durante este mes, lo cual fue analizado por el gobierno como una señal de que el camino emprendido con las limitaciones a la actividad nocturna y la interrupción de la presencialidad escolar es el correcto.

En segundo lugar, porque si bien se cortó la dinámica de crecimiento exponencial que había hace dos semanas, estamos en un nivel altísimo de casos, con un promedio cercano a los 25 mil contagios detectados por día, que no puede ser sostenido en el tiempo por el sistema sanitario. La ocupación hospitalaria está colapsada o al borde del colapso en buena parte del país y es necesario reducir la demanda para evitar una crisis aún peor.

Por último, cerca del Presidente advierten que ahora existe un mayor consenso para avanzar que el que había quince días atrás, tanto entre la dirigencia política con responsabilidades ejecutivas como entre la población en general, y que incluso eso se ve reflejado en algunos medios que usualmente se ubican por default en las antípodas del gobierno. Esperan, también, que eso ayude a hacer más efectivas las medidas que se decidan tomar.

Al respecto, todavía no existen definiciones concretas. La desaceleración de la curva hizo perder envión a la propuesta de hacer ahora un cierre total por quince días, un “último recurso” que se puso sobre la mesa y que aún no debería descartarse para las próximas semanas si la situación no mejora pronto. Por el costo económico que tendría, para Fernández resulta un alivio poder posponer una decisión así.

Las medidas que funcionaron hasta ahora van a mantenerse: seguirán prohibidas las reuniones sociales, las actividades en espacios cerrados y la circulación nocturna. Se evalúa ampliar la franja negativa o hacer cierres totales durante los fines de semana en las zonas con peor situación epidemiológica. Los shoppings permanecerán con las persianas bajas y los locales comerciales sólo podrían atender en la vereda.

Un punto en el que se hizo énfasis en las reuniones virtuales con gobernadores fue la necesidad de controlar más y mejor el cumplimiento de las disposiciones. En ese sentido, tras una reunión entre la ministra de Seguridad de la Nación, Sabina Frederic, y las autoridades porteñas, se coordinó el cierre, entre las ocho de la noche y las seis de la mañana, de veinte accesos a la ciudad de Buenos Aires.

El asunto más espinoso sigue siendo el de la presencialidad escolar. El gobernador bonaerense Axel Kicillof está convencido de mantener suspendida la asistencia al aula con este nivel de contagio, mientras que el alcalde porteño, Horacio Rodríguez Larreta piensa en un esquema de asistencia parcial. Deberá definir el presidente Fernández. Si es coherente con su postura de las últimas semanas, deberá ratificar la virtualidad.