Denunciaron penalmente a la empresa del hombre más rico de la Argentina, Paolo Rocca, por violación de la cuarentena. La demanda es contra la planta de la firma Ternium-Siderar de la localidad bonaerense de Canning.
Según la acusación a la que accedió el diario Ámbito Financiero, se están realizando operaciones no autorizadas para desarrollar en medio del aislamiento preventivo, social y obligatorio en el que se encuentra nuestro país.
La denuncia la presentó hoy la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) ante la Justicia federal por la supuesta violación de las pautas de la cuarentena en una planta. La presentación fue hecha por los dirigentes Ceferino Fernández y Sergio López de la seccional Avellaneda de la UOM.
Por otra parte, en paralelo radicaron una denuncia administrativa ante el Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires. "La imputación fue por la presunta violación del artículo 205 del Código Penal que impone penas de seis meses a dos años de prisión para quien 'violare las medidas adoptadas por las autoridades competentes para impedir la introducción o propagación de una epidemia'", difundió Ámbito.
Según los dirigentes, Ternium, que fabrica chapas de acero, cuenta con una autorización de la Secretaría de Industria para mantener una dotación mínima de personal en actividad para desarrollar una tarea puntual que no debe ser interrumpida.
En la siderurgia, donde no se apagan los hornos, existen contados rubros que forman parte de procesos continuos. Sin embargo, en la presentación se advierte que “sin contar con autorización expresa de autoridad competente, la empresa ha intentado obligar a más de cien trabajadores que se encontraban cumpliendo aislamiento obligatorio para que concurran al establecimiento a cumplir tareas habituales”.
“La empresa habría gestionado ante la Municipalidad de Ezeiza una autorización irregular para ampliar sus actividades, en momentos en que tanto ella como el municipio habrían conocido que no se contaba con las facultades para expedir tal autorización”, añaden los denunciantes, y explican que los operarios se rehusaron a concurrir a sus puestos incluso a pesar de que en esa condición perciben “menos del 50% de sus remuneraciones”, tanto por temor a un posible contagio como por “la determinación de no contribuir al quebrantamiento indebido del sistema preventivo de confinamiento”.
Asimismo, al estar al tanto de la denuncia, el intendente de Ezeiza, Gastón Granados, negó haber expedido autorización alguna para la ampliación de actividades en la planta de Ternium y alegó que “la municipalidad no tiene las facultades para habilitar o no una actividad que está regulada en la emergencia por el Poder Ejecutivo nacional”.
Qué dice Techint
La empresa respondió a la denuncia. En diálogo con El Destape, uno de sus voceros indicó: "El Centro Productivo Canning perteneciente a Ternium cuenta con todas las habilitaciones necesarias para operar, en el marco de lo dispuesto por el Decreto 297, las Decisiones Administrativas de la Jefatura de Gabinete nº 429 y 450, y resolución de la Secretaría de Industria, Economía del Conocimiento y Gestión Comercial Externa de fecha 23/3/2020".
Además, afirmó a este portal que Techint "en sus actividades da íntegro cumplimiento al Protocolo de Higiene y Seguridad Emergencia COVID-19 que ha sido implementado en la planta, con estricto apego a las normas vigentes".