El juez Eduardo Riggi finalmente renunció a la Cámara Federal de Casación Penal. Según pudo reconstruir El Destape, realizó la presentación el 28 de febrero pasado ante el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación. Había cumplido 75 años el 16 de febrero pero tenía licencia hasta el 3 de marzo. Su partida de los tribunales de Comodoro Py se da cuando debía definir si su colega Carlos Mahiques, que está imputado por el viaje que realizó a Lago Escondido junto a otros jueces, un ex espía y funcionarios porteños, puede intervenir en una de las causas que más preocupa a Mauricio Macri: la del espionaje ilegal a los familiares de la tripulación del ARA San Juan. Quien reemplace a Riggi en el cargo deberá tomar esa decisión clave. En Casación se debe revisar el sobreseimiento del expresidente en esa causa.
En una nota dirigida al ministro de Justicia de la Nación Martín Soria, fechada el 28 de febrero, Riggi escribió: “Tengo el agrado de dirigirme a V.E y por su digno intermedio al Señor presidente de la Nación, doctor Alberto Fernández – toda vez que me encuentro alcanzado por los establecido en el 3er párrafo del inciso 4º del art. 99 de la Constitución Nacional-, a fin de presentar mi renuncia al cargo de Juez de la Cámara Federal de Casación Penal con el que fui honrado por Decreto 2512/92 del Poder Ejecutivo”.
Según indicaron desde el Poder Ejecutivo, “para terminar el proceso de aceptación, falta que el Consejo de la Magistratura responda si el juez tiene algún expediente abierto contra él o alguna sanción. Una vez recibida esa respuesta, continúa el circuito habitual, y se eleva al Presidente para que acepte la renuncia”.
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Riggi era presidente de la sala III de la Cámara de Casación pero además había sido designado para intervenir en el caso del ARA San Juan –que tramita en la sala II- para definir si Mahiques podía o no ser parte de la causa. Se trata de una resolución clave para el futuro judicial de Macri por la cercanía de la familia Mahiques con el macrismo. Carlos Mahiques fue ministro de Justicia cuando María Eugenia Vidal era gobernadora bonaerense. Su hijo Juan Bautista es el Fiscal General porteño y fue el representante del gobierno de Macri en el Consejo de la Magistratura además del Nº 3 del ministerio de Justicia que condujo Germán Garavano. Ambos, tanto Carlos como Juan Bautista fueron imputados por el viaje a Lago Escondido que todo indica que financiado por el Grupo Clarín. A su vez, otro hijo de Carlos Mahiques, Ignacio, es fiscal e intervino en diversas causas de persecución contra CFK como la de Vialidad. Hoy Ignacio está por ser nombrado camarista en la Ciudad.
Entre otras cosas, la Cámara Federal de Casación Penal debe revisar el rol de Macri en la causa. El exmandatario había sido procesado en primera instancia por el juez federal Martín Bava, quien subroga en Dolores, pero luego fue sobreseído por la Cámara Federal porteña cuando el caso pasó a Comodoro Py. Ese fallo lo firmaron 3 jueces nombrados por Macri, fue apelado y está en Casación.
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El caso del espionaje a los familiares de la tripulación del ARA San Juan es revisado en Casación por la jueza Ángela Ledesma y los magistrados Guillermo Yacobucci y Carlos Mahiques. Este último fue recusado por tercera vez por la querella que representa la abogada Valeria Carreras luego de conocerse el escandaloso viaje a Lago Escondido (también fue denunciado penalmente por familiares por firmar un fallo cuando estaba en la mansión de Joe Lewis en Bariloche). Como Ledesma y Yacobucci no se pusieron de acuerdo respecto al apartamiento de Mahiques se llamó a un tercer juez para definir su situación. Allí es cuando Riggi apareció en escena. Pero en febrero cumplió 75 años y ahora debe dejar el cargo. No llegó a resolver por lo que esa decisión quedará en manos de su sucesor.
¿Quién reemplazará a Riggi? En lo inmediato subrogará su vocalía alguno de sus 11 colegas de Casación. Los dos nombres que suenan para ocupar su cargo en la sala III son los de Gustavo Hornos (sala IV) o Daniel Petrone (sala I). Hornos cosechó diversas denuncias penales y ante el Consejo de la Magistratura luego de que El Destape revelara sus visitas a Macri tanto en la Quinta de Olivos como la Casa Rosada, lo que puede derivar en un pedido de recusación en causas que tengan al expresidente involucrado. Sin ir más lejos, Hornos llegó a reconocer que mantiene una relación social con Macri. Petrone, por su parte, fue nombrado por Macri en el cargo y se excusó de intervenir en el D’Alessiogate por su íntima amistad con Germán Garavano.
Si Hornos llegase a ser el reemplazante de Riggi se repetiría el esquema que se dio durante el macrismo: que Hornos y Borinsky (el otro visitante de Macri en Olivos) vuelvan a tener el 50% de las causas que tramitan en Casación. Es que Borinsky está junto a Hornos en la sala IV y se encuentra en la sala III subrogando el vacío que dejó la jubilación Liliana Catucci.
Quién es Riggi
Riggi fue designado juez el 14 de diciembre de 1978, en plena dictadura cívico-militar. En la década del '90 arribó a la Casación por decisión del entonces presidente Carlos Menem. En la actualidad compartía sala con Juan Carlos Gemignani y Borinsky.
El año pasado, Riggi hizo un pedido formal para lograr un nuevo nombramiento que extienda su mandato por 5 años más pero el Gobierno no dio el visto bueno.
Riggi es un personaje legendario de Casación que fue denunciado por demorar las causas de lesa humanidad. En 2007, por ejemplo, fue denunciado ante el Consejo de la Magistratura por un grupo de querellantes, víctimas de la represión. No fue la única acusación en su contra. También fue denunciado por el Centro de Estudio Legales y Sociales (CELS) por su participación en una trama de sobornos en el marco de la investigación por el asesinato de Mariano Ferreyra. Luego recibiría un sobreseimiento por parte del entonces juez Norberto Oyarbide en aquel caso.
El camarista renunciado hizo sus primeros pasos en la Justicia en 1971 en el Camarón, la Cámara Federal en lo Penal que fue un tribunal especial creado por la dictadura de Agustín Lanusse para perseguir a los opositores políticos. Allí fue secretario privado. En 1973 fue designado auxiliar en la Corte Suprema y desde ahí comenzó a escalar posiciones hasta ser designado en octubre de 1975 secretario letrado de la Corte. En 1978, durante la dictadura comandada por el genocida Jorge Rafael Videla, fue promovido a juez.
Con la democracia asomando en el horizonte, en marzo de 1983, llegó a la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Penal Económico. Y en la década del ’90 fue nombrado en la Casación, cargo que ejerció hasta el 28 de febrero.
Desde la Casación, Riggi, por ejemplo, votó junto al juez Gustavo Hornos para que durante el macrismo los empresarios Cristóbal López y Fabián De Sousa vuelvan a ser detenidos en el caso Oil Combustibles.
A la vacante de Riggi en Casación, que es la máxima instancia penal del país, se suma la de Liliana Catucci, quien dejó el cargo en septiembre de 2021 también tras cumplir 75 años.