El tribunal a cargo del juicio por el atentado contra la expresidenta Cristina Kirchner fijó fecha para la realización de dos peritajes claves para el devenir del proceso. Este miércoles determinó que el 12 de diciembre próximo se realice un estudio psicológico-psiquiátrico de la acusada Brenda Uliarte para determinar si está en condiciones de afrontar el juicio. Si se hiciera lugar a una incapacidad sobreviniente, como plantea su defensa, se suspendería el juicio en torno a ella. La semana pasada había fijado que el celular de Fernando Sabag Montiel, que quedó inutilizable a horas del ataque, sea peritado el 4 de febrero de 2025 por la Dirección General de Investigaciones y Apoyo Tecnológico a la Investigación Penal (DATIP) del Ministerio Público Fiscal y Gendarmería. Mientras esto se resuelve, continúa el debate oral. Este miércoles declararon dos amigos de Gabriel Carrizo, el tercer acusado del juicio. En dos semanas atestiguarán “Los copitos”.
La pericia psicológica de Brenda
Este miércoles, la jueza Sabrina Namer notificó a la querella, a la defensa de Uliarte y al Ministerio Público Fiscal que el Cuerpo Médico Forense (CMF) reallizará el peritaje psicológico-psiquiátrico de Brenda “el día jueves 12 de diciembre de 2024 a las 10:00hs” en la sede del CMF. La magistrada autorizó “el uso de la fuerza pública en caso de negativa” de la acusada. El estudio, que harán psicólogos y psiquiatras y del que participarán peritos de las partes mencionadas, es para determinar si Uliarte está capacitada para ser parte del juicio.
Se trata de un estudio relevante porque puede terminar con la participación de Brenda en el juicio. Fuentes judiciales explicaron a El Destape que el peritaje “no es para determinar si Uliarte es inimputable sino que si es para ver si puede estar en juicio”. “La inimputabilidad es no comprender la criminalidad del acto al momento del hecho y aquí lo que se analiza es si existe una incapacidad sobreviniente, es decir, si en este momento Uliarte no está psicológicamente en condiciones de afrontar el juicio, de defenderse materialmente de la acusación. Es para dilucidar eso”, añadieron.
Uno de los interrogantes centrales es si la acusada está simulando para evitar ser parte del juicio. “Si se hiciera lugar a la incapacidad sobreviniente se suspendería el juicio sobre Uliarte y seguiría adelante respecto de Sabag Montiel y Carrizo”, precisaron fuentes judiciales.
Los puntos centrales del peritaje serán:
- Determinar si Uliarte registra actualmente una incapacidad mental que le impida continuar con el juicio;
- Realizar un análisis de su personalidad, 2administrando para ello las técnicas proyectivas y psicométricas que correspondan a los fines de determinar el estado mental actual de sus funciones psíquicas”;
- Determinar si registra una patología psiquiátrica. Si se detecta, se deberá “indicar su inicio, síntomas y necesidad o no de tratamiento”;
- Efectuar una evaluación integral de Uliarte a los fines de descartar una simulación o una sobresimulación.
El 23 de octubre pasado, el abogado defensor de Uliarte, Alejandro Cipolla, le solicitó al tribunal a cargo del juicio que su representada sea examinada por el Cuerpo Médico Forense para “determinar si posee la capacidad necesaria para continuar en el juicio, en atención a las dificultades que -a su entender- su asistida tuvo para responder preguntas sencillas sobre sus datos personales al momento de prestar declaración indagatoria en el juicio”. En el juicio algunas partes sospechan que Brenda está simulando. Por eso la expectativa en torno a lo que pueda arrojar la pericia fijada para el 12 de diciembre.
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Intentarán recuperar el celular de Sabag Montiel
El 14 de noviembre pasado, el tribunal, conformado por los jueces Sabrina Namer, Ignacio Fornari y Adrián Grunberg, también fijó fecha para realizar un peritaje sobre el celular de Fernando Sabag Montiel, que quedó inutilizado apenas unas horas después del ataque luego de ser manipulado por la Policía Federal en el juzgado de la magistrada María Eugenia Capuchetti. Ordenó que se realice el 4 de febrero del 2025. Y que esté a cargo de la DATIP y Gendarmería.
¿De qué constará el peritaje? De “una operatoria de ‘rooteo’ y posterior extracción física del contenido del teléfono celular” secuestrado a Sabag Montiel “con el objeto de recuperar la información que pudiera haber quedado en el almacenamiento de dicho dispositivo electrónico”. Un procedimiento de prueba se realizó sobre un aparato similar al del joven que intentó asesinar a Cristina y arrojó resultados positivos, por lo que hay expectativa en que pueda “rescatar” la información que pudiera estar almacenada en el aparato. El riesgo es que el celular quede dañado para siempre.
Este mismo estudio fue suspendido en agosto pasado porque en el marco de la causa por el atentado que se sigue instruyendo en primera instancia (donde quedó paralizada, por ejemplo, la “línea Milman”) se había recibido una respuesta del Estado de Israel de que había tomado nota de un pedido para prestar colaboración para intentar extraer o recuperar la información de ese celular. Se trataba de una nota de la Embajada de Israel en la Argentina que informaba que giró una solicitud de colaboración a la Cancillería israelí que se había realizado. Frente a eso, la querella pidió en la víspera del inicio del peritaje la suspensión del estudio. Consideraban que la propuesta de Israel podría ser más segura. Pasado el tiempo y el silencio de Israel en el tema, el tribunal decidió avanzar con el estudio con la DATIP y la GNA.
El reseteo del celular de Sabag Montiel es una de las tantas irregularidades que tuvo este caso. Quien gatilló a centímetros de la cabeza de la entonces vicepresidenta tenía en su poder el aparto al momento del ataque. Tras ser secuestrado, el teléfono quedó inabordable. La Policía Federal fue la primera fuerza en manipular el aparato y, según un peritaje que hizo la Gendarmería (GNA) en 2022 para determinar qué sucedió, no tomó "los recaudos pertinentes respecto a su debida preservación/resguardo”. Además abordó el celular a través de un software “completamente desactualizado”, según se precisó en el mentado informe de la GNA. En el estudio también se señalaron falencias cometidas por la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), la fuerza que quedó a cargo de peritar el teléfono tras el apartamiento de la Federal y adonde llegó completamente “manoseado”.
El atentado contra CFK ocurrió el 1 de septiembre poco antes de las 21. Recién a las 23 del 2 de septiembre el celular le llegó a la PSA para que ser analizado. Más de 24 horas y, para colmo, llegó en un sobre abierto, prendido, con una leyenda de error en la pantalla y con la tarjeta SIM y la memoria externa extraídas. Y con un defecto clave: sin la planilla donde constara la cadena de custodia.
Declaraciones comprometedoras
Este miércoles, como sucede cada semana, se desarrolló una nueva audiencia del juicio por el atentado contra la expresidenta. Se trata de un debate donde se hace foco en quienes ejecutaron el ataque. Como dijo Cristina Kirchner cuando declaró como testigo: “En este juicio faltan los autores intelectuales y los financiadores del atentado".
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Esta jornada declararon como testigos Luis Affigne y Kevin Bargas, dos amigos de Carrizo. Affigne narró bajo juramento de decir verdad que Carrizo alguna vez contó que le disparó a alguien pero dijo que en ese momento no consideró que estuviera diciendo la verdad. Cree que le dijo que le disparó en la pierna a un vendedor de copos de azúcar de otro grupo que vendía en su zona. También dijo que él integró el grupo de chat “Los Girsosos” pero que entraba y salía, que estudió hasta cuarto año de Derecho y que formó parte de la venta de copos de azúcar pero en un grupo previo al que quedó involucrado con el atentado. A su vez, afirmó que Carrizo votó por Alberto Fernández e hizo referencia a los estado de Whatsapp del acusado al momento del atentado, que fueron amenazantes hasta para con el entonces presidente Fernández.
A Bargas se le preguntó por los mensajes que intercambió con Carrizo, que era incriminantes para el acusado como uno que decía: “Recién intentamos matar a Cristina”. Bargas dijo que no le creyó lo que le escribió y que sólo le siguió la conversación. Afirmó que transcurrido cierto tiempo y tras la prueba que se fue conociendo consideró que quizás Carrizo sí tuvo algún grado de participación en el ataque.
Cómo sigue el juicio: el testimonio de los copitos
Según pudo reconstruir El Destape, el próximo miércoles están convocados a declarar como estigos Yaquelin Murga Mamani (ex pareja de Carrizo, madre de uno de sus hijos); Marisol Mansilla Cuadros (actual pareja de Carrizo, integrante del circulo de amigos de “Los copitos”); Verónica Carvallaro (prima de Carrizo) y Morena Gallardo (amiga de Carrizo).
En dos miércoles, el 4 de diciembre, se espera como testigos a “Los copitos”. Se trata de los vendedores de copos de azúcar Lucas Acevedo, Leonardo Volpintesta, Miguel Ángel Castro Riglos y Sergio Orozco, quienes se dedicaban a la venta de algodón de azúcar junto a Sabag Montiel, Uliarte y Carrizo. Estos jóvenes quedaron involucrados al inicio del caso por sus vinculaciones con todos los acusados. Fueron quienes acompañaron a Uliarte y Carrizo a la entrevista que se realizó en Telefe en la que intentaron todos distanciarse del ataque. Luego fueron desvinculados del proceso.
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