En el último día del gobierno de María Eugenia Vidal, personas privadas de la libertad de diversas cárceles bonaerenses, 18 en total, empezaron una huelga de hambre de carácter pacífica. Son diversos los pedidos que realizan, a corto, mediano y largo plazo. Los reclamos van dirigidos no solamente a la gobernadora saliente, sino también piden reformas y mejores condiciones al nuevo gobierno que encabezará Axel Kicillof.
Las medidas de protesta fueron organizadas por los propios reclusos. Aseguran que algunos de las demandas fueron solicitados durante toda la gestión de Cambiemos y no fueron escuchadas. Entre ellas, se destacan:
-Libertades o arrestos domiciliarios para los procesados sin condena.
-Arrestos domiciliarios para los condenados sin sentencia firme.
-Mejores condiciones de alojamiento carcelario.
-Mayor celeridad en la tramitación de las causas penales.
En un documento elevado por los presos con siete puntos explican: "El Poder Ejecutivo de la Provincia de Bs. As. no utiliza el mecanismo constitucional de la conmutación de penas - de usarlo podría atenuar el fenómeno de la sobrepoblación carcelaria -ver derecho comparado -. Por ello solicitamos que se evalúe la posibilidad de su empleo”.
Además, se pide al Congreso Nacional que evalue la posibildad de derogar el paquete de las denominadas "Leyes Blumberg", y las reformas del 2017 vigentes a partir de julio del año 2017.
En agosto de este año, la Comisión Provincial por la Memoria presentó un informe donde aseguró que existe una superpoblación del 113% y otra del 310%. El informe denunció una crisis humanitaria en los establecimientos que llevó a que haya un record de personas detenidas sin sentencia, hacinamiento y torturas dentro del sistema penal. Frente a esto el funcionario bonaerense