Una corte de Londres le brindó a los holdouts un plazo de dos semanas para oponerse a las declaraciones de George Soros en la disputa por el cobro de 226 millones de euros en intereses de bonos argentinos. El empresario multimillonario inició el lunes un petitorio para desbloquear los fondos que corresponden a la ley británica retenidos por el fallo del juez estadounidense Thomas Griesa.
La demanda pide que la corte declare que como los pagos de interés dependen de la ley inglesa, cualquier intento de una corte extranjera de modificar los contratos no sería efectiva. Los demandantes incluyen a los fondos de inversión Quantum Partners, de Soros, Knighthead Master Fund y Hayman Capital. Estos inversores quieren asegurarse de que cualquier decisión de Griesa no afecte el pago de intereses de sus bonos.
Si bien Bank of New York Mellon, el demandado, se ha opuesto al caso en Reino Unido, el magistrado Guy Newey dijo que hay un acuerdo amplio entre las partes de que los pagos están regidos por legislación inglesa.
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Newey les sugirió a los holdouts que hablen con sus asesores legales de aquí al 21 de noviembre para ver si desean intervenir. La próxima audiencia en la Alta Corte de Londres está programada para la segunda quincena de diciembre.
Entre este grupo se encuentran los buitres, liderados por NML Capital, una filial del fondo Elliott Management del millonario Paul Singer, y Aurelius Capital Management, que encabeza Mark Brodsky.